En lo poco que va de 2024 aumentó un 50% la colocación de equipos de GNC. ¿En cuánto tiempo se amortiza la inversión?
A lo largo del último mes los precios de los combustibles líquidos subieron cerca de un 100%. Amén del impacto que estas subas significaron para los bolsillos de los trabajadores y para los costos logísticos que luego impactan en la inflación, también comenzaron a tener un correlato en cambio de hábitos y de estrategias para hacer rendir más los salarios.
Así, por ejemplo, desde la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines de Argentina (CECHA), advirtieron que, frente a las remarcaciones, cayó un 20% el consumo de combustibles en todo el país.
Y al mismo tiempo se dispararon las consultas y pedidos para convertir vehículos a GNC.
Con un rendimiento entre el litro de nafta y el m3 de GNC muy similar, el primero cuesta unos 720 pesos en la Ciudad de Buenos Aires mientras que el segundo unos 200 pesos.
Así lo advirtió Pablo Mompo, secretario de la Cámara Argentina de Productores de Equipos (CAPEC), quien señaló que en lo poco que va de este 2024, las conversiones a GNC muestran subas del 50% respecto a 2023.
“Estamos viendo un fuerte incremento en las ventas de equipo de gas del 50% respecto al promedio del año pasado, empujado básicamente por el aumento de los combustibles líquidos que hoy hace que sea muy beneficioso utilizar GNC”, indicó Mompo.
En ese sentido desde CAPEC señalaron que contabilizando el promedio diario ya se pasó de 235 conversiones a 336 en estos primeros días de enero.
La clave para explicar este fenómeno pasa por el precio del combustible. Con un rendimiento entre el litro de nafta y el m3 de GNC muy similar, el primero cuesta unos 720 pesos en la Ciudad de Buenos Aires mientras que el segundo unos 200 pesos.
El promedio histórico marca que Argentina tiene 12.000 conversiones mensuales al GNC y el año pasado fueron apenas 5.000. Frente a este nuevo escenario, en CAPEC confían en triplicar este año la cantidad de instalaciones de equipos registrada en 2023.
“En años de crisis hemos llegado a convertir 30 mil autos por mes, con lo cual este año puede que haya una conversión por arriba de lo normal y llegar a las 15 mil mensuales, pero al menos creemos que debería volver al promedio de 12.000”, proyectó Mompo.
Tiempos de amortización
Aunque en el interior del país la diferencia de precios entre uno y otro combustible es menor, la conversión permite lograr una amortización rápida del equipo.
Para empezar, debe tenerse en cuenta que la instalación de un equipo de GNC requiere una inversión que ronda los mil dólares. Sin embargo, desde el sector advierten que el ahorro generado al pagar menos de una tercera parte por kilómetro recorrido, permite recuperar la inversión en el plazo de un año si se hacen 20 mil kilómetros y en dos años si el uso del auto es de unos 10 mil km anuales.
Otra de las ventajas de este combustible es su menor impacto ambiental, motivo por el cual muchas empresas ya comenzaron a utilizarlo en su flota de camiones con el propósito de reducir su huella ambiental.
“El transporte pesado es un nuevo mercado muy importante y tiene un ahorro incluso mayor. Es un negocio que sale un poco de la industria habitual porque el taller no es el mismo que el del auto”, explicó Mompo.
En esa línea, empresas como Scania e Iveco oficializaron ambiciosos planes de construcción de camiones a GNC y aseguran que reduce el costo operativo del vehículo significativamente al reducir por lo menos en un 50% el costo del combustible.
Desde CAPEC recordaron además que el GNC tiene una amplia rama de proveedores que generan un efecto derrame en el aparato productivo. “Argentina tiene 5 fábricas de cilindros; 20 fábricas de equipos; es uno de los países con mayor industria de GNC del mundo. Hay 2.000 estaciones de servicio; más de 1.100 talleres; 160 productores de equipos y 200 empresas que revisan cilindros. Son unas 30.000 personas que trabajan directa o indirectamente con el GNC”, destacó Mompo.
