En las últimas semanas «desaparecieron» de la oferta global unas 600 mil toneladas que permitirían satisfacer la demanda y mantener en equilibrio el mercado cuprífero en 2024. Los proyectos en marcha en la minería argentina.
El cobre es uno de los minerales esenciales para avanzar en la transición energética y se estima que su demanda crezca de manera exponencial en los próximos años.
De hecho, en agosto de este año el Departamento de Energía de los Estados Unidos (DOE, por sus siglas en inglés) siguió los ejemplos de la Unión Europea, Japón, India, Canadá y China e incluyó el cobre a su lista de materiales críticos.
Así dejó en evidencia el lugar de preponderancia que se espera ocupará en los próximos años el cobre, al igual que el litio entre otros, de la mano de la transición energética.
Aunque se preveía un fuerte desfasaje entre oferta y demanda de cobre, se estimaba que ocurriría hacia fines de la década. Ahora, aseguran que podría sentirse ya el próximo año.
Sin embargo, el escenario que se preveía para el corto plazo en el sector cuprífero cambió radicalmente en poco tiempo.
Sucede que se esperaba que la oferta, a pesar del aumento de la demanda, siguiera el ritmo de ese crecimiento a partir de la puesta en marcha de grandes proyectos cupríferos en todo el mundo.
Y aunque se preveía un desfasaje entre oferta y demanda, se estimaba que ocurriría recién hacia fines de esta década. Ese desfasaje, advierten ahora, podría sentirse desde el año próximo.
Es que el cierre de una de las mayores minas de cobre del mundo en Panamá en medio de fuertes protestas públicas y una serie de contratiempos operativos que obligaron a Anglo American Plc, una de las principales mineras a recortar sus proyecciones de producción en América del Sur, ponen en entredicho la capacidad de satisfacer la demanda en 2024.
En pocas semanas se eliminaron unas 600 mil toneladas de cobre de la oferta global que, se esperaba, serviría para mantener en equilibrio la oferta y la demanda.
La semana pasada, el Gobierno de Panamá ordenó formalmente a First Quantum Minerals Ltd. poner fin a todas las operaciones de su mina de cobre en el país. La minera producía 400 mil toneladas de cobre al año.
En tanto, Anglo American redujo su objetivo de producción de cobre para el próximo año en unas 200.000 toneladas, eliminando así el equivalente a una gran mina de cobre de la oferta mundial. Se prevé además que la producción disminuirá aún más en 2025.
De acuerdo con Goldman Sachs Group Inc. el déficit en la oferta de cobre podría aumentar a más de medio millón de toneladas el próximo año.
A principios de octubre, el Grupo Internacional de Estudio del Cobre había anticipado que esperaba un excedente de 467 mil toneladas el próximo año, su mayor pronóstico de exceso desde 2014. Esas estimaciones parecen haber quedado ahora en el pasado.
El cobre en Argentina
Argentina no produce cobre desde que la mina La Alumbrera cerró en 2018, pero tiene una cartera que consta de 8 megaproyectos que podrían posicionarlo entre los 10 principales productores del mundo para el año 2030.
La única iniciativa de cobre en Argentina que inició la etapa de construcción es el proyecto sanjuanino “Josemaría”, con una inversión anunciada de 4.100 millones de dólares.
Otro de los mega proyectos es el de Pachón, también en San Juan, que actualmente atraviesa la etapa de factibilidad con una inversión inicial de 4.500 millones de dólares.
La tercera iniciativa sanjuanina es “El Altar”. Se encuentra en exploración avanzada y demandará unos 3.000 millones de dólares. La firma a cargo es Aldebarán Resouces, cuyas autoridades confirmaron en abril que superaron los 10 mil metros de perforación y comenzaron los trabajos con cuatro máquinas perforadoras en alta cordillera.
Los otros dos proyectos que se emplazan en la provincia cuyana son Los Azules, que está en estudio económico preliminar (PEA) por 2.363 millones de dólares , y Filo del Sol, que tiene un costo de construcción de 1.266 millones de dólares.
En Catamarca, el proyecto Minera Agua Rica Alumbrera (Mara) avanzó a la etapa de prefactibilidad y una inversión de 3.100 millones de dólares. Mientras que en la misma situación se encuentra el proyecto San Jorge ubicado en Mendoza y que requiere un desembolso inicial de 370 millones de dólares.
Por último, en Salta se desarrolla el estudio económico preliminar para la mina Taca Taca, que demandará 3.583 millones de dólares.
