El área de operaciones tiene el grueso de los trabajadores directos de un proyecto y es, además, donde más personas ingresan sin necesidad de tener capacitación previa, por lo que suele ser la cantera de nuevos mineros.
En el trabajo minero, quienes se encargan de la maquinaria y mover los volúmenes de roca, son parte del equipo de operaciones. Uno de los trabajos más conocidos de este grupo es el que realizan los conductores de camiones fuera de ruta.
Se trata de las moles que protagonizan la imagen típica de la minería moderna: con más de 7 metros de altura, recorren las canteras de la producción a cielo abierto o los túneles de las minas subterráneas.
Este trabajo, aunque parece una tarea reservada para pocos, suele ser la primera tarea que realizan muchos en minería. Es que los conductores fuera de ruta pueden entrar casi sin conocimientos previos a los proyectos, a veces sin tener un carnet de conducir en las calles.
A esto se suma que muchos de ellos, tras pasar un tiempo en esta tarea, aprenden a usar otro tipo de equipos, como palas, topadoras o motoniveladoras. Así, operaciones y en especial los camiones se convierten así en la cantera de donde salen nuevos mineros.
Los operadores de fuera de ruta reciben formación de parte de la empresa para ingresar. No es necesario tener un título terciario, aunque algunas empresas piden terminar el secundario, en caso de no tenerlo, mientras hacen la capacitación previa.
La formación incluye un curso teórico, que va de 3 a 5 semanas según la compañía, donde aprenden los fundamentos teóricos del funcionamiento del camión y cómo se maneja. Tras esto continúan con prácticas de simuladores, donde conocen los controles para mover el camión y cómo se utiliza la tolva, que, en algunos casos, cuando está elevada puede superar los 13 metros. Las prácticas seguras son una unidad de importancia en esta formación.
Quienes pasan esta instancia pasan a hacer prácticas dentro del proyecto. Son en general 6 meses en los que viajan a las minas y conducen uno de los fuera de ruta junto con instructores, hasta que finalmente reciben la certificación para poder hacer el trabajo solos. A partir de este punto ya son oficialmente un minero más dentro de la industria.
Cómo es trabajar en un camión fuera de ruta
Si bien cada proyecto minero tiene diferentes modelos de camiones, existen similitudes. Se los denomina fuera de ruta porque son muy grandes para moverse en una vía normal. En general, para trasladar en los centros urbanos uno de estos equipos, se hace en partes, cargado en camiones normales y con grandes operativos porque ocupan más de una calzada.
Uno de los modelos más utilizados es el Caterpillar 793, que tiene 7 metros ancho, 7 metros de altura y 12 metros de largo. El operario para ingresar a la cabina lo hace por una escalera que está en el frente del camión. Cuenta con aire acondicionado para soportar las bajas temperaturas en minas remotas y dos asientos y se conduce con una caja automática secuencial.
Dependiendo de cada proyecto, los turnos de trabajo varían, pero suelen ser de 12 horas. En este periodo de tiempo los trabajadores tienen paradas para comer, donde son trasladados al campamento principal o comedores acondicionados.
El CEO global de Barrick, Mark Bristow, aseguró que la captación de mujeres para conducir camiones les dio buenos resultados porque “las mujeres conducen bien y dan, en promedio, mejores resultados” en este sector.
La tarea de los operarios de camiones es mover grandes volúmenes de roca. En general tienen un circuito destinado, desde alguna zona de la explotación de donde deben retirar el material, que lo carga una pala en la tolva.
Si la carga es valiosa en minerales, van a la zona donde están las trituradoras o plantas del proyecto. En cambio, cuando lo que se sacó es material estéril, lo dejan en las escombreras o botaderos, donde las empresas van acopiando toda la roca de la que no podrán extraer beneficios, pero debían remover para llegar a la riqueza.
Los camiones son, de esta manera, los que logran que en las grandes distancias que tienen en su interior las minas, el material se movilice. Cada uno puede llevar entre 100 a 400 toneladas de roca, según el modelo. Se mueven a una velocidad máxima de 50 km/h.
De camiones a paleros, el camino dentro de los proyectos
Una práctica común de las empresas mineras es la de seguir la formación de sus operarios para que manejen otro tipo de maquinaria. El resto de los equipos comunes son topadoras, niveladoras y las palas.
En los dos primeros casos, realizan una tarea de “acomodar” el material dentro del proyecto. Por ejemplo, las minas que tienen valles de lixiviación, luego de que el camión vuelca el contenido de la tolva, están las topadoras.
Las niveladoras en general mantienen los caminos para que camiones y otros vehículos puedan moverse sin riesgo, además de servir de apoyo al resto de los procesos.
Las palas son el equipo más grande que se puede ver en el área de operaciones. Tienen tamaño suficiente par estar por encima de los camiones y depositar varias toneladas de roca a la vez para que luego se las lleven de un lugar.
Un sector con presencia femenina
Durante los últimos años, el ingreso de mujeres al área de operaciones creció en Argentina. Sigue siendo uno de los sectores más desiguales, pero los objetivos internacionales de integración impulsaron varias campañas de captación de operarias.
Veladero, la mina de oro ubicada en San Juan, promueve desde hace año capacitaciones exclusivas para mujeres de las comunidades para que ingresen al área, en especial conduciendo camiones. El CEO de Barrick en el mundo, Mark Bristow, aseguró que esta política les dio buenos resultados porque “las mujeres conducen bien y dan, en promedio, mejores resultados” en este sector.
