El concepto nació en el ámbito empresarial como respuesta a un mercado dinámico y volátil que demanda cada vez más eficiencia. Una operadora definió cinco contribuciones clave de esta tendencia.

En el sector de distribución de mercancías y productos, el concepto de como logística elástica cambió el paradigma radicalmente. Desde hace una década, también conocido como logística 4.0, refiere a la incorporación de tecnología, que en las empresas del rujbro se incrementa de manera exponencial y se vuelve uno de los pilares del éxito.

El impacto alcanzó al mercado en su totalidad, tanto en los servicios de la oferta como en las exigencias de la demanda.

En el escenario actual las compañías que busquen competir deben tener una multiplicidad de canales de difusión y comunicación con sus clientes, distintos puntos de entrega y de “pick up”, lapsos de tiempo más acotados, y nuevos requerimientos que surgen día a día.

Su implementación no está exenta de dificultades y demanda de un alto esfuerzo económico y de una planificación cuidadosa.

Estos factores ejercen una nueva presión sobre la cadena de suministros, que debe estar en constante adaptación, flexibilizando sus operaciones y sumando tecnologías.

De eso se trata la “logística elástica”: de la capacidad de poder preparar las operaciones de toda la cadena de una manera que permita afrontar las nuevas dinámicas del sector.

Según un análisis de Celsur Logística, las firmas que logren una alta elasticidad en sus servicios podrán “responder ágilmente a los cambios del mercado, las demandas del consumidor y las variables externas”.

En esa línea, afirman que este concepto se ha convertido en un componente esencial para las empresas que buscan optimizar sus procesos en una economía globalizada y volátil.

Sin embargo, su implementación no está exenta de dificultades y demanda de un alto esfuerzo económico y de una planificación cuidadosa.

“Claves para alcanzar este objetivo incluyen la digitalización de la cadena de suministro, la adopción de tecnologías avanzadas como el Internet de las Cosas (IoT), Big Data y la Inteligencia Artificial (IA), así como la colaboración estrecha con socios y proveedores”, detalló Gabriel García Polignano, director de Operaciones de Celsur Logística.

“La agilidad en la toma de decisiones y la capacidad de ajustar rápidamente las estrategias son factores esenciales que definen el éxito en este entorno logístico dinámico”, agregó el especialista. E

n ese sentido, desde Celsur señalan que las compañías que adoptan esta estrategia experimentan una serie de beneficios que repercuten directamente en su competitividad y eficiencia.

Los 5 beneficios de la logística elástica

Lo primero que se logra es una optimización de costos, al reducir los tiempos muertos y al adaptarse eficientemente a cambios en la demanda.

De ello, se llega al punto número dos y quizás el más importante: una mejora en la satisfacción del cliente, al que se le ofrece una mejor capacidad para cumplir con plazos de entrega, requisitos de seguridad más altos y sistemas de trazabilidad que garanticen la transparencia.

Logística Elástica, Tecnología, Costos
La integración de tecnologías emergentes será clave para la transformación de la logística elástica.

En paralelo se evidencia una mayor disponibilidad de inventario, cuya gestión se facilita al minimizar los excesos y los faltantes.

El cuarto beneficio involucra el cuidado medioambiental ya que el mapeo de rutas disminuye el tiempo de tránsito de los vehículos y, en consecuencia, se reduce su huella de carbono.

Por último, las empresas que doten a sus cadenas de suministro de elasticidad tendrán una mayor resiliencia ante las crisis.

Las claves de la estrategia

La clave de la logística elástica es preparar las operaciones para enfrentar desafíos inesperados. En la concepción de esta estrategia está la idea básica de “optimizar los costos, tanto de fuerza laboral como de almacenamiento”, indican desde Celsur.

Para adaptar las cadenas de suministros a los parámetros que plantea esta tendencia, se deben superar las complejidades tecnológicas, la resistencia al cambio organizacional y el miedo de realizar inversiones significativas.

Asimismo, los riesgos asociados con la ciberseguridad y la dependencia de la tecnología pueden presentar desafíos adicionales.

A largo plazo, se espera que la integración de tecnologías emergentes juegue un papel crucial en la evolución y transformación de la logística elástica. Entendiendo que este concepto no solo se presenta como una respuesta a los desafíos actuales, sino como un catalizador para el éxito futuro de las empresas a nivel global.

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