Este año finalizan las concesiones que estaban desde el menemismo y desde el Estado impulsan el Open Acces Ferroviario como nuevo modelo de gestión.
El 1º de marzo de 1948 el Estado argentino hacía oficial la estatización de los trenes de capital británico: hoy se cumplen 75 años de aquella compra. En la actualidad, el sistema ferroviario despierta críticas de distintos sectores por la ausencia de un plan estratégico e integral, mientras desde la cartelera de Transporte evalúan la implementación del Open Acces. Esta modalidad fue sancionada por la Ley Nacional N° 27.132 en 2015 y aguarda reglamentación.
El Open Acces consiste en permitir que cualquier empresa u operador de carga utilice un tramo de vía mediante el abono de un canon. El objetivo del modelo es fomentar la aparición de nuevos actores en el sector para impulsar la competitividad y aumentar el volumen de carga transportada.
Este sistema tuvo su primera experiencia en Argentina en junio del 2022, pero exclusivamente en el tramo que une Rosario y Bahía Blanca. Si bien fue establecido el monto y el gradual ajuste del canon mediante la resolución 353, la misma le otorgó una prórroga de 12 meses a la fecha de caducidad de FEPSA, el cual ahora vencería en junio de este año.
El nuevo esquema de gestión consiste en permitir que cualquier empresa u operador de carga utilice un tramo de vía mediante el abono de un canon.
Por su parte, en su discurso de apertura de las Sesiones Ordinarias en el Congreso, Alberto Fernández destacó la cantidad de reconexiones que hubo y la recuperación del sector, en el marco de la apertura de las sesiones legislativas. Explicó el progreso del Plan de Modernización del Transporte, con el que se logró la conexión de 66 localidades mediante trenes de cargas y pasajeros, y agregó que 17 ramales ferroviarios fueron reactivados.
También hizo hincapié en que se alcanzó un récord de carga transportada por los trenes que administra el Estado con 8.5 millones de toneladas, y que creció un 200% la cantidad de alimentos y bebidas que viajan desde una provincia hacia otra sobre vías ferroviarias.
Desde las empresas, Jorge de Mendonça, presidente de la Asociación Intermodal de América del Sur (AIMAS), también se pronunció sobre la actualidad del sistema ferroviario argentino en sus redes, y fue muy crítico del nuevo modelo. Según detalla, “el acceso abierto será funcional al deterioro del sistema en su totalidad con la excepción de aquellos tramos más lucrativos y, al mismo tiempo, le permitirá al Estado desligarse de la responsabilidad de un funcionamiento general más eficiente”.
Por otro lado, el especialista en transporte hizo una evaluación del estado actual de los trenes, donde indicó “los aspectos deficitarios de este medio de transporte, la sobreabundancia de personal, falta de inversión en infraestructura, capacitación e insumos del sector”.
Qué dicen los gremios
Por el lado de los trabajadores el panorama no es muy distinto. En un análisis publicado en el sitio del sindicato La Fraternidad, que nuclea a los conductores de trenes argentinos, se destacaron una serie de cuestiones a atender para el futuro de la industria ferroviaria y se hizo un recuento histórico para explicar cómo se llegó a la situación actual.
Las críticas más contundentes no difieren de lo apuntado por Mendonça, es decir la falta de inversión en infraestructura férrea e insumos para los talleres, específicamente la carencia de repuestos para el mantenimiento de las locomotoras y parque remolcado.
Según el sindicato, esto desemboca en una falta de competitividad en el transporte de pasajeros, que no haya servicio de larga distancia para el interior del país, y una baja presencia en el transporte de cargas. El comunicado de La Fraternidad atribuye estas problemáticas a la reducción de miles de kilómetros de vías y centenares de estaciones, en las décadas del 70 y 80, y al sobredimensionamiento del personal administrativo.
Por último, dejaron en claro su apoyo al Plan de Reparación Histórica de los ferrocarriles, y aseguraron que existe la necesidad de una Ley Federal de Regulación del Transporte, que ponga igualdad de derechos a todos los modos que hoy compiten en el mercado tendientes a un sistema multimodal con un uso racional del suelo y de los hidrocarburos en beneficios de la población en su conjunto.
Si bien el gobierno aún no ha definido los próximos pasos para la implementación del nuevo modelo, sí llegó a un acuerdo con los gremios del sector para un aumento de más del 99% para el período comprendido entre abril de 2022 y marzo de este año, a lo que se sumará un bono por el Día del Trabajador Ferroviario.
En esa línea, se reunieron ayer en la sede laboral para firmar el acuerdo la ministra de trabajo, Raquel y lo titulares de los gremios ferroviarios, Omar Maturano, de La Fraternidad y Sergio Sasia, de la Unión Ferroviaria.
Frase destacada: “Existe la necesidad de una Ley Federal de Regulación del Transporte, que ponga igualdad de derechos a todos los modos que hoy compiten en el mercado tendientes a un sistema multimodal con un uso racional del suelo y de los hidrocarburos.”
