YPF inició en Añelo el primer tramo, de 130 kilómetros. El proyecto apunta a llevar el recurso a una nueva terminal exportadora en Río Negro y a reforzar los envíos al puerto de Bahía Blanca.
YPF ya construye el primer segmento del Oleoducto Vaca Muerta Sur, uno de sus principales proyectos junto a la planta de GNL y la adecuación de activos a partir de la venta de yacimientos maduros.
Este primer tramo de la obra se extenderá desde las localidades de Añelo, en la cuenca neuquina, hasta Allen, en Río Negro, donde se conectará con el sistema de Oldelval.
La conexión permitirá el transporte de petróleo mientras se completa el segundo tramo y la terminal portuaria de exportación en Punta Colorada, cerca de Sierra Grande.
A plena capacidad, el conducto duplicará la capacidad actual en la zona central de Vaca Muerta e incrementará en un 70% la capacidad de evacuación de petróleo de la cuenca neuquina.
Además, esta fase inicial fortalecerá el sistema de evacuación de petróleo de la cuenca, maximizando la capacidad de transporte hacia las refinerías y el puerto de Bahía Blanca.
La construcción comenzó en Loma Campana, un bloque operado por YPF en el corazón de Vaca Muerta, según precisó la empresa en un comunicado difundido en la tarde de este martes, con un video que muestra los primeros trabajos.
La inversión para este primer tramo asciende a unos 190 millones de dólares, generando 500 empleos en el pico de la obra.
Para la construcción se utilizarán más de 10 mil tubos de 20 y 30 pulgadas de diámetro, que empezaron a llegar a Añelo a principios de este 2024.
A plena capacidad, el ducto podrá transportar 390 mil barriles diarios, incrementando en un 70% la capacidad de evacuación de petróleo de la Cuenca Neuquina y duplicando la capacidad actual en la zona central de Vaca Muerta.
La segunda etapa y la terminal portuaria en Río Negro
La segunda etapa y el puerto de última generación en Punta Colorada, que completarán el proyecto, están en desarrollo y han avanzado significativamente.
La terminal espoctadora implica la construcción de la playa de tanques más grande de Argentina, con dos monoboyas flotantes que se ubicarán a 6 kilómetros de la costa.
Estas fases implicarán una inversión superior a los 2.000 millones de dólares, que YPF realizará en conjunto con otras compañías interesadas en el proyecto exportador, con el mismo mecanismo al que apuesta para la planta de GNL que proyecta con la malaya Petronas.
Una vez completado, todo el proyecto Vaca Muerta Sur (oleducto más nuevo puerto) permitirá la exportación de 135 millones de barriles de petróleo anuales, posicionando a las Argentina como uno de los principales exportadores de la región y generando divisas y empleo para el país.
Audiencia pública
En agosto de 2023 se llevó a cabo una audiencia pública necesaria para autorizar el proyecto.
Por un lado, los defensores de la iniciativa argumentaron que la obra creará una gran demanda de empleos directos e indirectos en Sierra Grande, una localidad que, desde la paralización de las operaciones de extracción de hierro y el retiro de la minera china MCC, se ha quedado sin una industria que la sustente.
En contraste, diversas organizaciones ambientales, vecinos y activistas advirtieron que el proyecto amenaza el ecosistema del Golfo San Matías y la Península Valdés,
Durante las exposiciones en la audiencia, al respaldo de los habitantes de Sierra Grande se sumó el de instituciones académicas y sindicatos.
El vicerrector de la Universidad Nacional de Río Negro (UNRN), Daniel Barro, destacó el “compromiso de la universidad con este proyecto que va a generar trabajo, desarrollo y oportunidades”.
Además, mencionó que la institución está ante el desafío de ampliar su oferta académica y planea crear un organismo de control y monitoreo para supervisar las actividades del proyecto, abarcando las cuestiones sociales y ambientales.