En lo que va del año, hay un estancamiento en EE.UU y leve caída en Europa, mientras que China sostiene una vez más el segmento. Las perspectivas del negocio siguen optimistas y se habla de «una segunda fase de crecimiento».
La Agencia Internacional de Energía (AIE) presentó una visión optimista respecto a las ventas de autos eléctricos a nivel global, a pesar de una leve desaceleración en las ventas de la industria automotriz en el arranque del año, que se atribuye en parte a la eliminación gradual de subsidios en mercados clave.
Según su informe anual Global EV Outlook 2024, el organismo proyecta que las ventas mundiales de vehículos eléctricos alcancen los 17 millones este año, un aumento notable con respecto a los casi 14 millones del anterior, lo cual representaría un aumento del 35% .
China se destaca una vez más como el que sostiene la mayor parte del crecimiento, con estimaciones de alrededor de 10 millones de ventas en 2024, lo que constituye aproximadamente el 45% de todas las ventas de automóviles en el país.
En Europa, se pronostica que los vehículos eléctricos representarán aproximadamente uno de cada cuatro automóviles vendidos en el continente.
En Estados Unidos, en cambio, la porporción sigue siendo menos: se espera que uno de cada nueve 0 km vendidos este año sea eléctrico.
En la evaluación global, se trata de un panorama auspicioso a pesar de las perspectivas generales más débiles para las ventas de automóviles de pasajeros y la eliminación gradual de subsidios en algunos países europeos, según lo señalado por la AIE.
La venta de autos eléctricos en EEUU y Europa
En los últimos meses, se ha observado un estancamiento en las ventas de vehículos eléctricos en Estados Unidos, mientras que en Europa se registró una leve caída en marzo, marcando la primera disminución en los patentamientos de este año.
Esta tendencia se reflejó en una reducción en la participación de mercado de los vehículos eléctricos en la Unión Europea, disminuyendo del 13,9% en marzo de 2023 al 13% en el mismo período de 2024.
La AIE proyecta que las ventas mundiales de autos eléctricos alcancen los 17 millones en 2024, un aumento notable respecto a los casi 14 millones del año pasado, de un 35% .
A pesar de estos desafíos actuales, la Agencia Internacional de Energía (AIE) mantiene una perspectiva optimista sobre el futuro de los vehículos eléctricos.
El director ejecutivo de la AIE, Fatih Birol, señaló que en lugar de desacelerar gradualmente, la revolución mundial de los vehículos eléctricos parece estar preparándose para una «segunda fase de crecimiento«.
Según Birol, bajo las políticas actuales, la rápida adopción de vehículos eléctricos, que incluyen automóviles, furgonetas, camiones, autobuses y vehículos de 2 ó 3 ruedas, podría evitar la necesidad de consumir más de 10 millones de barriles de petróleo al día para el año 2035.
Esta cantidad equivale a toda la demanda de petróleo para el transporte por carretera en los Estados Unidos en la actualidad.
A pesar de las fluctuaciones actuales en las ventas, la AIE sostiene que la tendencia a largo plazo hacia una movilidad más eléctrica sigue siendo prometedora y crucial para abordar los desafíos energéticos y ambientales globales.
Las inversiones en el sector de autos eléctricos
La electrificación del transporte está experimentando un impulso significativo impulsado por políticas gubernamentales y grandes inversiones en la cadena de suministro de vehículos eléctricos.
Se han anunciado inversiones cercanas a los 500 mil millones de dólares entre 2022 y 2023, y más de 20 fabricantes de automóviles han establecido objetivos claros de electrificación para sus flotas.
Las políticas de apoyo también desempeñan un papel fundamental en este proceso, con incentivos destinados a la fabricación de baterías y vehículos eléctricos que refuerzan las expectativas de una rápida electrificación.
Estos incentivos pueden incluir subsidios directos, reducciones fiscales y otras medidas que fomentan la producción y adopción de tecnologías eléctricas en el sector del transporte.
Por otro lado, la IEA destacó la importancia de que el despliegue de puntos de carga pública siga el ritmo de las ventas de coches eléctricos.
Se estima que para el 2035, los puntos de carga pública deben aumentar seis veces su cantidad actual para poder satisfacer la demanda de los propietarios de coches eléctricos.
Este crecimiento en la infraestructura de carga es fundamental para asegurar la conveniencia y la accesibilidad de los vehículos eléctricos para los consumidores.
Además, con la introducción cada vez mayor de vehículos pesados eléctricos, como camiones y autobuses, se requiere una infraestructura de carga dedicada y flexible.
La carga de vehículos pesados eléctricos puede representar una demanda significativa de electricidad, y aprovechar las energías renovables, como la solar y la eólica, para alimentar esta infraestructura de carga puede contribuir a una transición más limpia y sostenible hacia la movilidad eléctrica.
La cuestion de los puntos de carga es especialmente crucial en la Argentina, donde más allá de algunas iniciativas recientes, las dificultades para abastecder de energía los vehículos eléctricos sigue siendo el principal obstáculo para el desarrollo del segmento, además de los costos más elevados de los autos híbridos.