Ese día se alcanzarán los 37°C de máxima. Se estima un pico de demanda de 29.662 MW anticipando un nuevo récord por encima del máximo histórico de 29.653 MW del 1 de febrero de 2024. Además, el Gobierno reduciría los topes de consumo subsidiado de la luz.
El Servicio Meteorológico Nacional anunció que esta semana traerá un notable aumento de temperaturas, marcando la llegada de la primera gran ola de calor del año en la Ciudad de Buenos Aires y el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).
De acuerdo con el pronóstico, las máximas en la región no bajarán de los 30°C, mientras que las mínimas oscilarán en torno a los 21°C. El jueves será el día más sofocante, con temperaturas previstas de hasta 37°C de máxima y 26°C de mínima.
En este contexto, la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico S.A. (CAMMESA) anticipó que la demanda eléctrica y de potencia podría alcanzar cifras récord en el país, especialmente después de un diciembre con temperaturas más bajas de lo esperado.
A nivel nacional, las condiciones del sistema de transporte y distribución se mantienen en estado “normal”, según el reporte elaborado por CAMMESA
Según el informe semanal de programación de CAMMESA, “los pronósticos disponibles indican que en la semana comprendida entre el 11/1/25 y el 17/1/25 la demanda tiene alta probabilidad de alcanzar o incluso superar los récords vigentes de energía y potencia (597.7 GWh y 29.653 MW)”.
Para enfrentar posibles picos de consumo, se considera la importación de energía desde países vecinos como Chile, Uruguay, Bolivia y Brasil, dependiendo de la disponibilidad de cada uno.
A nivel nacional, las condiciones del sistema de transporte y distribución se mantienen en estado “normal”, según el reporte.
El jueves 16 se perfila como el día más crítico, con una demanda proyectada de 29.662 MW, lo que superaría el récord histórico de 29.653 MW registrado el 1 de febrero de 2024. Este escenario podría ejercer una presión significativa sobre el sistema eléctrico, incrementando el riesgo de fallas y cortes de luz.
Ante esta situación, el equipo liderado por la secretaria de Energía, María Tettamanti, sostiene reuniones semanales con actores clave del sector.
Este miércoles, se espera un nuevo encuentro con representantes de Cammesa, el ENRE, empresas generadoras, transportistas, grandes usuarios y las distribuidoras del AMBA, Edesur y Edenor antes del pico de la primera gran ola de calor del año.
Estas reuniones forman parte del “Comité de Seguimiento de Implementación del Plan de Contingencia para meses críticos 2024-2026”. Aunque el sistema se encuentra operativo, persiste entre las empresas la preocupación por posibles cortes de luz debido al alto nivel de demanda.
Con el ojo en el demanda de energía en el AMBA
El foco principal del sector energético está puesto en el AMBA, que concentra el 40% de la demanda eléctrica del país. El horario más crítico suele ocurrir entre el mediodía y las cuatro de la tarde, cuando los sistemas de aire acondicionado funcionan a pleno rendimiento.
Durante esos picos de consumo, y más aún en la anunciada ola de calor que durará varios días, la región llega a requerir alrededor de 12.000 MW, de los cuales 7.000 MW provienen del sistema interconectado nacional.
Los 5.000 MW restantes deben ser generados por las plantas ubicadas en la Ciudad de Buenos Aires y el Gran Buenos Aires, según datos proporcionados por las empresas generadoras.
En paralelo, el Gobierno tiene planes para reforzar el sistema eléctrico a mediano plazo. Este mes, Energía lanzará licitaciones clave con el objetivo de fortalecer la infraestructura en los próximos dos años.
Entre los proyectos destacados se incluyen: licitación para almacenamiento de energía, marcando la primera iniciativa de este tipo en Argentina; convocatoria para la construcción de una nueva central térmica de generación eléctrica; y ampliación de la capacidad de transporte eléctrico en el AMBA.
Estudian reducir los topes de consumo subsidiado de la luz
Por otro lado, el Gobierno está evaluando la posibilidad de reducir los topes de consumo subsidiado en las tarifas eléctricas para usuarios residenciales.
Esta medida podría implementarse antes de la puesta en marcha del nuevo esquema de subvenciones, previsto para mediados de año, según indicaron fuentes a Infobae.
El plan liderado por Tettamanti analiza establecer bloques de consumo subvencionado más bajos que los actuales.
Estos nuevos límites podrían ser escalonados y considerar factores regionales, como las condiciones climáticas que incrementan el uso de electricidad o la falta de acceso a la red de gas natural.
La decisión final dependerá del análisis conjunto del secretario coordinador de Energía y Minería, Daniel González, y del ministro de Economía, Luis Caputo.
La premisa oficial es equilibrar las cuentas fiscales sin generar un impacto significativo en los consumidores, especialmente en un año electoral. Por ello, el nuevo esquema se centraría en ser más “focalizado” y, consecuentemente, más restrictivo.