Tras varios encuentros, los gobernadores catalogaron el diálogo como “inconducente” y prepraran una acción judiciual colectiva. Apuntan a la reversión de las áreas sin inversiones y al pago de las deudas ambientales que deje la petrolera nacional.
Las diferencias entre los gobernadores patagonicos e YPF por su salida del negocio convencional de los hidrocarburos se acercan a un punto de inflexión definitorio. En las últimas horas, se dio a conocer que los mandatarios de las principales provincias afectadas por la medida de la petrolera, analizan elevar una demanda colectiva.
Esta nueva fase de conflicto llega luego de los reclamos que la semana pasada realizasron distintas entidades sindicales como la Federación de Camioneros y el gremio de petroleros de Santa Cruz, Y es otro paso coordinado de los gobernadores petroleros, que anteriormente ya coordinaron el impulso a una empresa energética propia.
La objeción principal apunta a la determinación de la petrolera nacional de abocarse decididamente al segmento shale, dejando a los yacimientos convencionales en un segundo plano.
Los mandatarios vinculados a la posible acción judicial son los de Río Negro, Neuquén, Chubut, Santa Cruz, Tierra del Fuego y Salta.
Los campos neuquinos linderos a Vaca Muerta son los activos más rentables de la industria, e YPF planea destinar más recursos a su explotación. Sin embargo, desde la compañía señalaron que esto no involucra una salida de las provincias y ejemplificaron su compromiso con los distintos proyectos que está llevando en la zona patagónica.
En esa línea destacaron inversiones como el parque eólico en Chubut o Palermo Aike en Santa Cruz, “YPF reorganiza su inversión, no se retira», puntualizaron. Por su parte, los gobernadores alegan que la firma que ahora comanda Horacio Marín, debe abonar las deudas ambientales generadas por su actividad y analizan la posibilidad de realizar una demanda de manera conjunta contra la petrolera.
Esta iniciativa busca que las áreas donde hay bajos niveles de inversión o directamente se encuentran sin producir, vuelvan a la administración pública. Los mandatarios vinculados a la posible acción judicial son los de Río Negro, Neuquén, Chubut, Santa Cruz, Tierra del Fuego y Salta.
El concepto de la demanda se enfocaría en “la falta de inversión, por la pérdida de producción, que terminó siendo un daño al Estado, por no sostener ni incrementar la producción y no cumplir con los pasivos ambientales».
De todas maneras, desde la compañía de mayoría estatal reafirmaron su postura, señalando que «en Chubut, en Manantiales Behr, estamos invirtiendo 200 millones, en Neuquén 3.000 millones en Vaca Muerta, en Mendoza, 600 millones en la ampliación de la refinería, no es verdad que no estemos invirtiendo».
El plan de inversiones de YPF para 2024
A principios de mes, la petrolera de bandera presentó su balance anual y dio a conocer las inversiones que planea para el 2024. En total, YPF destinará u$s 5000 millones para todas sus operaciones, un 12,5% menos que el año pasado.
De ese monto, cerca de u$s 3.000 millones irán a Vaca Muerta como parte de su estrategia de focalizar esfuerzos en el no convencional neuquino. «Estamos acelerando tanto como es posible nuestro crecimiento en la producción de shale y al respecto estamos planeando objetivos muy ambiciosos de producción por los próximos dos años con una expansión del 24% en 2024 y un futuro 35% en 2025”, señaló Horacio Marín al presentar su plan 4×4.
Este anunció marcó el principio de estas diferencias con las provincias. Algunos equipos técnicos de la órbita de los gobernadores señalan que la estatal deja “abandonados a la suerte a los yacimientos menos productivos”.
En la propia provincia de Neuquén, el reclamo de la reversión de las áreas maduras es histórico. Esa provincia, incluso, dispuso en el año 2012 la quita de dos áreas y dejó en análisis otras dos áreas para las cuales la petrolera presentó una propuesta de inversión. Lo propio hizo en su momento Chubut con “El Trébol-Escalante” y “Campamento Central-Cañadón Perdido” que representaban cerca del 7% de la producción total de crudo de la principal petrolera del país.