Desde la minera estadounidense Livent, productora del metal en la Argentina, estiman que subirá apalancado por la reduccion del stock de los fabricantes de baterías y una creciente demanda de autos eléctricos.
El sector se encuentra en plena expansión a nivel global y el precio del litio registró una tendencia a la baja a lo largo de este año, como reflejo del crecimiento en la cantidad de proyectos de extracción. Sin embargo, desde la compañía Livent, una de las más importantes en la industria, evalúan que la tendencia se revertirá a partir de 2024.
Así lo adelantaron las autoridades de la firma norteamericana, que se erige como la mayor productora del mineral en la Argentina.
Especialistas de la empresa presentaron el balance trimestral a los inversores y explicaron que la baja en los valores del “oro blanco” se debió a la decisión de reducir la manufactura de celdas por parte de los fabricantes de baterías para autos.
Por qué bajó el precio del litio
“Vemos que esta reducción de existencias ocurre en el downstream del litio, con los productores de celdas de batería, principalmente en China, reduciendo o incluso deteniendo la producción, ya que reducen sus inventarios de celdas”, detalló Paul Graves, presidente y CEO de Livent, compañía estadounidense que pasará a llamarse Arcadium Lithium cuando se termine de concretar la anunciada fusión con otro gigante de la minería: la australiana Allkem, que también produce en la Argentina.
Esta merma en la producción responde -según los responsables de Livent- a que los fabricantes de baterías optaron por utilizar los insumos construidos en sus inventarios a fines de 2022. Por lo que, a medida que estos se agoten, se anticipa que las compras volverán a crecer y empujar los precios.
A ese escenario, se le agrega el incremento en la demanda de vehículos eléctricos a nivel global. En septiembre, las ventas de estos autos subieron un 25% interanual, mientras que el acumulado del 2023 evidencia un alza del 37%.
De esta manera, las autoridades de la norteamericana evalúan que el crecimiento en la oferta de litio no alcanzará a cubrir la demanda cuando los fabricantes terminen de liquidar sus stocks de celdas.
“Dado que la demanda subyacente a largo plazo del mercado final se mantiene fuerte, y los niveles de inventario en la cadena de suministro disminuyen a niveles que no pueden soportar más de unas pocas semanas o tal vez meses de ventas, si se repite la historia, veremos un rápido aumento en los precios de los materiales para baterías cuando reinicien las compras”, sostuvo Graves.
Otro factor clave que genera expectativas en Liven, es que el crecimiento en el suministro de carbonato de litio provino de productores que procesan espomudena africana o lepidolita china, cuyos costos son mucho mayores a la extracción llevada a cabo en las salmueras sudamericanas. Este tipo de oferta no sería competitiva con los actuales precios, lo que constituye una ventaja para las operaciones en el “Triángulo del Litio”.
Livent incrementará su producción
La compañía estadounidense opera el proyecto Fénix que se desarrolla en Catamarca. Si bien señalaron que sufrieron algunas demoras en la expansión productiva en la provincia norteña, esperan incrementar significativamente los volúmenes entregados a sus clientes para el próximo año.
Según sus estimaciones, el incremento podría llegar a ser de un 50% más que en 2023. La minera, busca ampliar su capacidad extractiva para sumar 20.000 toneladas de carbonato de litio adicionales, en dos etapas de 10.000.
La primera debía entregar los primeros volúmenes de carbonato a fines de este año, pero Livent anunció que se concretará recién al primer trimestre del 2024. La segunda etapa aún tiene fecha de entrega y todo indica que se realizaría en el semestre final del año entrante.
Por último, la empresa informó que tuvo dificultades para atraer mano de obra especializada a su proyecto de expansión y problemas para importar insumos y repuestos.
“Siempre se descubren problemas en la transición de la construcción a la puesta en marcha en la etapa inicial. Sin embargo, estamos descubriendo que son más difíciles de resolver cuando se opera en regiones remotas y, especialmente, en jurisdicciones donde el acceso a mano de obra especializada es limitado debido a la falta de talento local”, completó Graves.