Tras la quita de fondos de coparticipación a la provincia, la escaló escaló con duras declaraciones cruzadas entre el gobernador Ignacio Torres y el presidente Javier Milei. Por qué la producción de la cuenca San Jorge es clave.
El último fin de semana estuvo marcado por la pelea del Gobierno y Chubut a partir de la decisión del Ejecutivo nacional de no girarle a la provincia cerca de 13.500 millones de pesos correspondientes a la entrega de febrero del fondo de coparticipación federal.
Si bien desde la Casa Rosada justificaron la medida amparándose en una deuda preexistente por parte de Chubut, el gobernador Ignacio Torres, del Pro, salió al cruce en distintos medios de comunicación señalando que se trata de una “extorsión” y anticipó que desde su provincia “no saldrá un solo barril de petróleo para el país” hasta que la situación no se resuelva.
Chubut cerró el año con una venta externa de 11,4 millones de barriles, lo que significa alrededor de 1.140 millones de dólares.
La advertencia del gobernador fue un cimbronazo para la industria de hidrocarburos porque el crudo de la Cuenca San Jorge, que ya venía en discusión con YPF por su estrategia de abandonar yacimientos convencionales, es clave. Una paralización de la actividad en la provincia podría tener consecuencias significativas en la producción de combustibles.
En el sentido más directo, implicaría una baja anual próxima a los 7,9 millones de metros cúbicos de petróleo al año, que fue el nivel alcanzado en la provincia durante 2023.
En todo el año pasado, la Argentina produjo 36.867.693 m3 de crudo y 48.109 millones de m3 de gas, de los cuales Chubut aportó 21,4% y 5,82% respectivamente. Pero la preocupación no se vincula solo a la cantidad de materia prima, sino también a la importancia que tiene en la refinación de combustibles.
Sucede que el petróleo extraído en la Cuenca San Jorge es de tipo pesado y tiene bajo contenido de azufre, lo que lo convierte en un insumo indispensable para mezclar con los crudos de Neuquén, que son mucho más livianos. Ambos se precisan mutuamente para poder elaborar los combustibles y otros derivados como asfaltos que requiere el país.
A su vez, el freno de las operaciones impactaría negativamente en la exportación de los hidrocarburos, cuyas regalías se reparten entre Nación y Provincia.
En ese segmento, Chubut cerró el año con una venta externa de 11,4 millones de barriles, lo que significa alrededor de 1.140 millones de dólares.
De ese monto, alrededor de 90 millones de dólares se quedaron en las arcas directas del Estado nacional, en concepto de retenciones a la exportación, con una alícuota del 8%. Al tipo de cambio actual, significa unos 77.500 millones de pesos.
Por último, existiría una repercusión metodológica muy delicada para las operaciones en la región ya que la mayoría de los sitios son de recuperación terciaria y secundaria con inyección de agua y polímeros. En caso de parar, se pierde mucha eficiencia ya que reiniciarlos es complejo y tomaría largos períodos de tiempo con pozos inactivos.
Escala la pelea del Gobierno y Chubut
Lejos de amedrentar la postura del gobierno nacional, la advertencia de Chubut fue catalogada por el propio Javier Milei como un “delirio”.
De hecho, durante una entrevista con La Nación +, el presidente redobló la apuesta y apuntó directamente contra Torres: «No puede leer ni comprender un contrato. Es de una precariedad intelectual muy grande», expresó el Presidente.
Con respecto a una posible intervención del Gobierno nacional en caso que de que el gobernador avance con la medida de protesta, el libertario se limitó a decir que «se seguirán los pasos legales que determine la Justicia».
Las críticas del mandatario también se dirigieron a 19 gobernadores que se manifestaron públicamente a favor de Torres.
La autoridad chubutense convocó este lunes a una sesión extraordinaria en la Legislatura provincial en la que está previsto que presente un análisis de la situación económica actual y convocó a todos los sectores productivos.
Los gremios, las organizaciones sociales y las cámaras empresariales ya confirmaron su asistencia. Se espera que el gobernador de un detalle de los pasos a seguir.
Será horas después de un nuevo contraataque del Gobierno este mismo lunes, a través del vocero oficial Manuel Adornis, quien en su habitual conferencia de prensa aseguró: «Cortar la provisión de combustible no es un ataque al Gobierno nacional sino a los argentinos. Es evidente que (Torres) no está bien asesorado».
