La CAEM, en lugar de visitar una provincia minera, eligió Córdoba para su reunión y cena anual. Insistirán con el balance y potencial de la minería, pero esta vez en la región referente de agroindustria, hablándole también a ajenos.
La Cámara Argentina de Empresas Mineras se reúne todos los años el 7 de mayo, cuando se celebra el Día de la Minería. La cita incluye la presencia de empresarios, funcionarios nacionales y gobernadores. Esto implica que es una oportunidad para que el sector exponga su realidad y también pida a la política nacional medidas o cambios que requiere.
Este año, el evento será en Córdoba, una provincia que no es, a primera vista, una de las fuertes en minería. En el comunicado oficial de la cámara empresarial, citaron la importancia del sector no metalífero, que sí tiene desarrollo en esta región.
Pero lo cierto es que, en medio de un fuerte pedido de impulso del litio, el cobre y oro, será una cumbre en la que los mineros del país no tendrán el respaldo de la localía de otros lugares, como Salta, Santa Cruz o San Juan.
La agenda de temas que presentará el sector empresarial gira en torno a ejes que, hacia adentro, no son nuevos. Pero esta vez lo harán en un entorno diferente, por lo que puede ser una presentación de estos temas a actores distintos.
La CAEM redactó un balance anual que marcará la discusión del encuentro en Córdoba. Ahí destinan las 28 páginas a un detalle del avance hasta el momento en exploración y contribuciones a la economía, pero también muestran lo que denominan exportaciones perdidas.
No todo en el mensaje que envió a la sociedad la CAEM tiene que ver con contar logros. Los empresarios decidieron mostrar también las “exportaciones perdidas”. Detallaron a cuánto podrían llegar las divisas generadas por la minería, algo más de USD 12.000 millones, si los complejos de oro, cobre y litio estuvieran a plena producción.
Otro apartado, donde la industria minera pone el foco en sus beneficios a otros en lugar de hablarle a los propios, es a la hora de mostrar su cadena de valor. Es que, a lo largo del balance, la cámara detalla los beneficios para la balanza comercial del país y también detalla los rubros de donde obtiene los bienes y servicios de forma local y la cantidad de empleo que crea.
Qué dice el informe de CAEM para el Día de la Minería
El informe pondera la posición de Argentina en el esquema global minero, siendo el cuarto país en reservas de oro, el décimo productor mundial de plata, tener 5 proyectos de cobre de clase mundial, cuarto productor de litio del mundo y segundo en reservas, entre otros.
A su vez, muestra como esta industria, a pesar de sus problemáticas, es el sexto complejo exportador del país, con USD 8.000 millones producidos, la mitad de esto para la venta en el exterior.
La CAEM eligió darle un lugar importante en la selección de información al impacto que tiene la minería en otros sectores de la economía. Entre los datos que sumó, está la creación de 7.700 puestos de trabajo desde 2019, de los cuales, el 71% están vinculados a servicios mineros y el litio.
En otro de los puntos, detallaron cuáles son los distintos sectores que componen la cadena de valor y proveedores. Entre estos, resaltaron desde la industria manufacturera, construcción, comercio, servicios profesionales, combustibles y transporte, hasta el agro.
Las oportunidades y los problemas
Pero no todo en el mensaje que envió a la sociedad la CAEM tiene que ver con contar los logros hasta el momento. Los empresarios decidieron mostrar también las “exportaciones perdidas”. En este apartado, detallaron a cuánto podrían llegar las divisas generadas por la minería, algo más de USD 12.000 millones, si los complejos de oro, cobre y litio estuvieran a plena producción.
En comparación con la proyección, que podría cumplirse alrededor de 2030 si las exploraciones más importantes iniciaran su construcción, Argentina solo está generando un tercio de los dólares de exportación que puede.
En la misma línea compararon la producción de litio actual, donde aclaran que en la actualidad la demanda está cubierta con los proyectos en curso, pero para 2030 habría déficit en la producción.
En el caso del cobre, la CAEM resalta que la «normalización macroeconómica, moderación de la carga tributaria y resolución de las problemáticas crónicas, abrirán las puertas a la puesta en marcha de los proyectos de cobre postergados». Nuevamente, la cámara elige hablar de postergación, dando señales de que existen factores externos que explican la falta de crecimiento del sector.
