Aunque un auto eléctrico es más caro que uno a combustión, le recarga eléctrica de la batería puede salir hasta una décima parte de lo que cuesta tener nafta en el tanque.
El avance de la los autos eléctricos en los países de América latina enfrenta no pocos desafíos. En la Argentina, por caso, los altos precios de los autos eléctricos y una todavía magra infraestructura de puntos de carga atenta contra una mayor penetración de esta clase de vehículos en el país.
A pesar de ello, un informe elaborado por Mercado Libre reveló en septiembre pasado que, en los primeros seis meses del año, las ofertas de este tipo de vehículos aumentaron 10% en esa plataforma, comparado con el mismo período en 2022.
La Secretaría de Energía dio días atrás un paso clave en el camino para fomentar el uso de los autos eléctricos en el país al crear el “Registro Nacional de Infraestructura de Carga de Vehículos Eléctricos (VE) y Vehículos Híbridos Eléctricos (VHE)” con el fin de “identificar, georeferenciar y difundir el uso de infraestructura de carga de VE y VHE, el relevamiento estadístico de los consumos eléctricos de dicha infraestructura y el fomento de la movilidad eléctrica en todo el territorio de la República Argentina”.
Uno de los grandes desafíos a superar para potenciar la penetración de los autos eléctricos en la región es extender la infraestructura de carga.
La falta de una extendida infraestructura de carga es una de las trabas que atenta contra un mayor desarrollo de la electromovilidad en el país.
Pero, ¿cuánto cuesta cargar un auto eléctrico en América latina?
Los costos asociados a la carga de un vehículo eléctrico dependen de una multiplicidad de variables que van desde el precio de la energía en cada uno de los países de la región, así como el lugar en donde se cargue y el tipo de cargador, entre otros.
En cada modelo de auto eléctrico los precios también se definen en función de la capacidad de energía almacenada, lo que en el caso de los vehículos a combustión se refiere al volumen de su tanque. Los vehículos eléctricos actuales pueden almacenar entre 30 y 100 kWh en sus baterías.
Otro factor que considerar en cuanto a los costos es la potencia de cada vehículo.
Cargar los autos eléctricos, país por país
En Brasil, la Federação Nacional da Distribuição de Veículos Automotores (Fenabrave) señaló en los puntos de carga se paga entre 1,90 y 2,10 reales/kWh (entre 0,3 y 0,4 dólares). Es decir que cargar un auto eléctrico con batería de 50 kWh (como el Peugeot E-208 GT.2) cuesta entre 95 reales (18,7 dólares) y 105 reales (20,7 dólares).
En tanto, en el caso del mismo modelo, pero con motor a combustión, llenar el tanque cuesta 277,44 reales (54,7 dólares).
El presidente de la Cámara de Comercio Automotriz de Chile (Cavem), Martín Bresciani, explicó a Bloomberg Línea que una carga para un recorrido de 200 kilómetros, que calculó en un consumo de 40 kW, puede costar entre 9 y 14 dólares.
Esto va a depender del tipo de carga, bien sea domiciliaria de carga lenta o electrolinera pública de carga rápida. “Los mismos 200 kilómetros en combustible para un vehículo a combustión que tiene uso urbano puede significar en Chile 28 dólares”, indicó.
En la Argentina cargar un auto eléctrico cuesta la novena parte de lo que demanda un auto naftero para recorrer el mismo kilometraje, de acuerdo un estudio publicado por el Ente Regulador de los Servicios Públicos (ERSEP), del Gobierno de Córdoba.
El director general de la Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina (ACARA), Marcelo Randazzo, detalló que si el gasto en los autos a combustión fuera de 10 mil pesos (11,24 dólares), en el caso de los eléctricos este valor se reduciría a 1.100 pesos (1,23 dólares) por hacer la misma cantidad de km.
En tanto el presidente de la Asociación de Emprendedores para el Desarrollo e Impulso del Vehículo Eléctrico en Perú (Aedive), Adolfo Rojas, explicó que recorrer 35 kilómetros con un auto eléctrico cuesta cerca de 1,3 dólar, mientras que con uno a combustión el gasto está cerca de 5,3 dólares.