El domingo se efectivizó una nueva suba parcial en los tributos, como viene sucediendo todos los meses, pero sería la última postergación. YPF ya confirmó el traslado a surtidores y las demás comercializadoras le seguirán los pasos en estas horas.
El Gobierno nacional oficializó un aumento parcial en los impuestos a los combustibles líquidos, medida que comenzó a regir el domingo 1° de junio, según lo dispuesto en el Decreto 368/2025 publicado en el Boletín Oficial.
Este ajuste representa un incremento promedio cercano al 1% en el precio de la nafta y el gasoil, y una vez más, es parcial, ya que vuelve a postergar ajustes pendientes desde 2024, que se vienen retrazando para moderar el impacto inflacionario. Sin embargo, en el mismo decreto se anticipa que esta política empezará a cambiar el próximo mes.
Lsa presente actualización se produce en un contexto en el que el Gobierno ha postergado la aplicación total de los incrementos pendientes correspondientes a 2024 y al primer trimestre de 2025.
En esa línea, el decreto señala que desde el 1° de julio se aplicaría el aumento completo acumulado de todos esos trimestres, lo que implica que el impacto se profundizará en los próximos meses.
Luego de que se dio a conocer la corrección correspondiente a junio, YPF confirmó que trasladó el incremento al precio final para los consumidores.
La nafta súper de YPF alcanzó los 1.184 pesos por litro en la Ciudad de Buenos Aires.
En la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense el impuesto a la nafta sube 13,088 pesos por litro, mientras que para el gasoil el alza es de 10,575 pesos por litro. Mientras que en zonas patagónicas el aumento del impuesto al gasoil se aplicará de forma parcial, con un ajuste de 5,726 pesos por litro, siguiendo el tratamiento diferencial establecido en la Ley 23.966.
El precio de los combustibles en junio
Tras la suba, la nafta súper alcanzó los 1.184 pesos por litro en la Ciudad de Buenos Aires, mientras que la nafta premium llegó a los 1.403 pesos por litro.
En cuanto al gasoil, el precio promedio asciende a 1190 pesos por litro. Estas cifras representan una suba proporcional a la actualización impositiva del 1%, pero marcan el inicio de un ajuste progresivo en el mercado de combustibles.
Venta de combustibles
En abril de 2025, el despacho de combustibles a nivel nacional alcanzó los 1.323.216 metros cúbicos entre naftas y gasoil, lo que representó un aumento del 2,1% en comparación con el mismo mes del año anterior. Se trató del segundo mes consecutivo de crecimiento, tras quince períodos seguidos de caídas.
No obstante, respecto a marzo se verificó una baja del 6%, de acuerdo con un informe elaborado por la consultora Politikon Chaco, que procesó datos oficiales del sector. Del total expendido, el 57% correspondió a naftas y el 43% a gasoil. Dentro del segmento de las naftas, se destacó la categoría premium, que registró una suba interanual del 19,8%.

La nafta súper, en cambio, mostró un incremento más modesto del 0,7%, aunque significó una reversión de la tendencia negativa que había durado cinco meses. En contraste, el gasoil exhibió un retroceso interanual del 1,6%. Sin embargo, el gasoil premium logró crecer un 11,3%, mientras que el común descendió un 8,1%.
En cuanto a participación de mercado, YPF volvió a liderar con una cuota del 55,4% y un crecimiento interanual del 3,4%. En segundo lugar, se ubicó Shell, con el 24,4% del total comercializado y una suba del 7,7%. Axion, por su parte, explicó el 12,5% de las ventas totales y mostró un avance del 5,5%.
Más desregulación en el sector de combustibles
El Gobierno nacional derogó la resolución 314/2016, que obligaba a las estaciones de servicio a informar en un sistema centralizado cualquier cambio en los precios de nafta, gasoil y GNC dentro de las ocho horas posteriores a la modificación. La Resolución 717/2025 fue publicada el vierne en el Boletín Oficial.

Según el texto oficial, la medida busca “reducir la carga burocrática y fomentar la competencia en el mercado energético, en línea con la política de desregulación económica actual”. Además, el Gobierno sostiene que la supervisión estatal directa de precios es innecesaria en un mercado libre, donde la competencia debe regular los valores.
El Ministerio también argumenta que hoy existen múltiples canales digitales, como aplicaciones móviles y redes sociales, que permiten a los consumidores acceder en tiempo real a la información sobre precios, eliminando la necesidad de una intermediación estatal.
Asimismo, advierte que la publicación uniforme y obligatoria de precios podría favorecer la alineación de tarifas entre competidores, debilitando la competencia y promoviendo prácticas cercanas a la cartelización.
Finalmente, el Gobierno recordó que el Sistema de Información Federal de Combustibles, vigente desde 2004, sigue operando y ofrece datos agregados sobre precios y volúmenes en el mercado mayorista, lo que «garantiza un monitoreo suficiente sin exigir a las estaciones minoristas reportes constantes».