El Gobierno apuesta a que la obra, de más de US$ 2.500 millones, se inicie a fin de año y esté operativa en marzo de 2026. A diferencia del primer tramo, será adjudicada a un constructor privado en una licitación internacional. El rol que tendrá Enarsa, que cambiará de nombre y será vendida parcialmente.
El secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo, anunció que se pretende adjudicar el segundo tramo del Gasoducto Néstor Kirchner (GPNK II) en diciembre, con el objetivo de que entre en operación en marzo de 2026, requiriendo una inversión aproximada de 2.554 millones de dólares.
Durante el tradicional almuerzo del Club del Petróleo, ante más de 100 líderes de empresas energéticas, el funcionario presentó la licitación del segundo tramo del GPNK II, que permitirá duplicar la capacidad de transporte de gas a 40 millones de metros cúbicos diarios (m3/d) desde Vaca Muerta al Litoral.
La meta que se fijó el Gobierno es poder adjudicar la obra en diciembre para tenerla terminada y operativa en marzo de 2026.
A diferencia del primer tramo, construido en tiempo récord con fondos públicos, esta vez se buscará capital privado para la construcción. Para eso, se llevará a cabo una licitación internacional abierta a empresas extranjeras.
El proyecto se adjudicará a un único constructor privado, quien tendrá la opción de subcontratar partes de las obras y deberá asegurar el financiamiento a través de un pool de bancos.
El proyecto se adjudicará un único constructor, que tendrá la opción de subcontratar partes de las obras y deberá asegurar el financiamiento a través de un pool de bancos.
Como garantía de pago, la empresa podrá utilizar los contratos firmados con los productores de gas por la capacidad de transporte.
De este modo, se aseguraría el retorno de la inversión y sus ganancias a través de acuerdos con otros actores privados del sector, sin que se involucren fondos del Estado. Se trata del modelo que el gobierno libertario pretende para reactivar toda la obra pública nacional, paralizada desde diciembre en pos de reducir el déficit fiscal del Estado.
Cambio de nombre y venta parcial para Enarsa
Otro novedad que confirmó Chirillo en el encuentro con empresarios petroleros es que Energía Argentina (Enarsa), la empresa fundada por Néstor Kirchner en 2004, pasará a llamarse más adelante Transportadora del Gas del Centro (TGC) y se hará cargo de la operación de los dos tramos del gasoducto Néstor Kirchner: el ya construido y el que se licitará este año.
“Hay una traza original para el segundo tramo, pero en la licitación vamos a permitir que el contratista proponga otra traza, si lo cree más conveniente”, adelantó.
También destacó que esta licitación se divide en varias etapas: “Está la etapa de la construcción, la de la contratación de la capacidad de transporte y de la firma de los contratos, y la etapa en la que se va a conformar una transportista independiente, que se va a hacer cargo del GPNK I y el GPNK II”.
Cómo se pagará el segundo tramo del Gasoducto Néstor Kirchner
A su vez, la empresa contratista recibirá un canon anual, cuyo pago estará garantizado por la constitución de un fondo que se creará, el Fondo de Repago para Construcción (FRC), que se nutrirá de los ingresos por la ampliación de la capacidad de transporte del TGC y por las ventas de los productores de gas.
El canon estimado es de 480 millones de dólares por año durante 15 años, con una tasa del 10% después de impuestos, aunque el valor final se definirá en la licitación.
“Hay una primera etapa donde se hace la licitación de la construcción del primer tramo y se determina el canon que se debe pagar. Paralelamente, aunque se llama etapa dos, pero va en paralelo, es la licitación de la capacidad de transporte en firme, más la celebración de contratos de abastecimiento de gas, por parte de quienes estén interesados”, dijo.
“Con ello vamos a estructurar un fondo de repago del canon por la construcción de la licitación”, dijo el secretario de Energía.
“Posteriormente, y mientras se desarrolla, se va a ir creando la transportista independiente, que en definitiva supone hacer un spin-off de activos que son de Enarsa y que después se podrán privatizar en un porcentaje al sector privado”, agregó.
Primeras pruebas de la planta compresora de Tratayén
En la previa del encuentro con los empresarios del petróleo, Rodríguez Chirillo había anunciado a través de su cuenta de la red social X la puesta en marcha de la planta compresora del Gasoducto Néstor Kirchner ubicada en Tratayén, provincia de Neuquén.
El titular de Energía anticipó que el proceso de puesta en marcha de la primera de las tres instalaciones pendientes se inicaría el sábado 15 de junio, con las primeras pruebas, que se extenderían por un par de semana para finalmente poner la planta a inyectar unos 5 millones de btu de gas diarios, lo que implica incrementar la capacidad de transporte del GPNK en casi un 50% (hoy alcanza los 11 millones).
«Primero dijeron que la habían terminado. Después, que estaba al 80%, pero era al 60%. También dijeron que nosotros habíamos parado la obra. Finalmente, el 9 de julio, va a estar inyectando 5 millones de m³ diarios de gas al sistema, gracias a este Gobierno», posteó el funcionario.
De esta manera, Chirillo volvió a criticar al gobierno anterior y a su antecesora Flavia Royón, quien en el inicio de la gestión de Javier Milei fue secretaria de Minería, y que en la reciente crisis del gas había salido al cruce del funcionario nacional.
Más allá de si la responsabilidad en las demoras le cabe al gobierno anterior o al actual, el conducto inaugurado en 2023 hubiera podido transportar el doble de la cantidad de gas actual si la construcción de las plantas compresoras se hubiese completado tal como estaba previsto.