Diez provincias avanzan en el desarrollo de un complejo proyecto para favorecer la inserción de los productos de sus economías regionales en los mercados nacional e internacionales.
Por Catriel Etcheverri
El desarrollo económico del Norte Grande enfrenta el desafío de superar serias deficiencias logísticas que impacta de lleno en la competitividad de las economías regionales.
Frente a este escenario, los gobernadores de Catamarca, Chaco, Corrientes, Formosa, Jujuy, La Rioja, Misiones, Salta, Santiago del Estero y Tucumán encomendaron al Consejo Federal de Inversiones (CFI) elaborar una estrategia logística para el Norte Grande que promueva un sistema logístico más eficiente, aprovechando las ventajas de los distintos modos de transporte, el desarrollo de equipamientos logísticos articuladores, y potenciando la integración internacional a través de corredores bioceánicos.
A partir del exhaustivo diagnóstico realizado sobre los modos carretero, ferroviario, fluviomarítimo y aéreo, y otros componentes como plataformas logísticas y pasos de frontera, el CFI presentó 116 propuestas de obras y políticas públicas para avanzar en un sistema logístico eficiente y moderno que potencie las economías regionales del Norte Grande.
“El principal desafío que enfrentamos en un primer momento fue la articulación y la búsqueda de consensos entre 10 provincias con distintas realidades y distintos intereses y para que sea posible avanzar es necesario confluir en una serie de acuerdos no siempre fáciles de alcanzar”, explicó a Dinamicarg Guillermo Bormioli, jefe del Área de Proyectos Especiales del CFI.
Las propuestas siguen 5 ejes centrales: obras públicas; adecuación regulatoria; coordinación institucional (sobre todo con Nación); capacitación de recursos humanos y estímulos a la inversión privada.
Y señaló que “a pesar del desafío que implica articular un enfoque logístico común entre 10 provincias pudimos avanzar y se logró generar un espacio consolidado de planificación con 116 propuestas de políticas y obras públicas”.
En ese sentido Bormioli destacó que “las propuestas siguen 5 ejes centrales: obras públicas; adecuación regulatoria; coordinación institucional (sobre todo con Nación); capacitación de recursos humanos y estímulos a la inversión privada”.
Para la elaboración de esta batería de propuestas se analizaron, además, con mirada logística, 14 cadenas productivas. Así se tuvieron en cuenta las particularidades de las producciones de limón, naranja, arroz, poroto, soja, aceituna de mesa, aceite de oliva, azúcar, yerba mate, vino, carne bovina, algodón – textil, forestal y litio. “De todos estos análisis y entrecruzamientos es que surgen estas 116 propuestas logísticas”, explicó Bormioli.
Diagnóstico y propuestas
Para la elaboración del diagnóstico y las propuestas, además del análisis del desempeño logístico provincial y regional, el CFI realizó más de 120 entrevistas con productores regionales y dadores de carga; transportistas locales y regionales; organismos públicos y multilaterales; funcionarios provinciales y nacionales; representantes públicos de Brasil y Chile; especialistas de organismos multilaterales; especialistas de Universidades Nacionales y Regionales.
Por caso, en el modo carretero se detectaron una serie de situaciones como por ejemplo, que el 80% de la red vial se encuentra en estado regular o malo, que la presión de tráfico se encuentra acotada a segmentos puntuales, un fuerte desbalance de cargas y un insuficiente control de los pesos transportados.
Frente a este escenario desde el CFI propusieron, entre otras cosas, intervenir más de 5.700 kilómetros de rutas para mejorar el estado de la calzada y banquinas, desarrollar ampliaciones de capacidad críticas, carriles de sobrepaso y autovías, resolver travesías urbanas y ampliar los sistemas de control de peso transportado.
Asimismo advirtieron sobre la conveniencia de facilitar la circulación de bitrenes y escalados; desarrollar Centros de Transferencia de Cargas (CTC); garantizar la transitabilidad de los caminos rurales y generar nuevas conexiones interprovinciales.
En el modo ferroviario en tanto el informe de situación da cuenta de la baja densidad de cargas en trenes al mismo tiempo que la carga queda concentrada en pocos actores y que tan solo el 39% de la red está operativa.
Entre las propuestas para este modo se destacan la necesidad de crear nuevos centros de acopio y transferencia de carga; avanzar hacia un nuevo modelo de gestión que garantice el acceso a las PyMES; apostar por la sostenibilidad del sistema dándole prioridad sobre corredores troncales; crear un esquema de subsidios cruzados para financiar obras; la incorporación de material rodante para mejorar los niveles de servicio y lograr la reducción del transit time.
En este punto Bormioli destacó la “heterogeneidad que presentan los desafíos de cada modo. Por ejemplo -puntualizó- en el modo ferroviario es clave la articulación con Nación y en otros, como el carretero depende más de las provincias”.
En tanto para el modo fluviomarítimo se detectó una profusa oferta portuaria; la baja oferta de servicios y la incertidumbre acerca del nuevo modelo de gestión para la Hidrovía.
Para ello se propuso avanzar en una estrategia regional para la nueva concesión de la Vía Navegable; lograr mejoras de la gestión portuaria y en un marco regulatorio adecuado para propiciar la existencia de servicios navieros.
Para el modo aéreo, el CFI propuso incorporar modelos de comercialización para pequeños cargadores; destinar espacios de recepción, entrega, carga y descarga en aeropuertos y ciudades; crear depósitos fiscales y federalizar el “Exporta Simple”.