En 2025, el auge del litio, el cobre y el oro está disparando la demanda de profesionales y oficios especializados. En qué zonas del país y qué proyectos se concentra la mayor demanda de empleo.
Mientras Argentina redefine su matriz productiva con la minería como uno de sus ejes estratégicos, el mercado laboral experimenta un cambio sin precedentes.
Este año, la expansión de proyectos de litio, cobre y oro —particularmente en el norte y en la región cordillerana— está generando una fuerte presión sobre la demanda de talento calificado. Sumado a las dificultades del sector para conseguir trabajadores con la formación necesaria, las oportunidades para los que acceden a capacitación pueden multiplicarse.
Según datos del Sistema de Información Abierta a la Comunidad sobre la Actividad Minera en Argentina (SIACAM), el sector emplea actualmente a unas 39.400 personas de manera directa.
Sin embargo, el número podría crecer significativamente en los próximos años a medida que avancen los grandes proyectos en construcción o en evaluación.
Los perfiles más buscados y la digitalización
Los perfiles más buscados se agrupan en tres grandes categorías. La primera es la de los profesionales universitarios y técnicos especializados. Aquí destacan los ingenieros en minas, industriales, electromecánicos, ambientales y químicos, así como geólogos con experiencia en exploración o hidrogeología.
El mayor número de búsquedas se registra en las provincias que conforman el “Triángulo del Litio”: Salta, Jujuy y Catamarca. Allí, capitales chinos, australianos y canadienses financian proyectos de gran escala.
También se suman especialistas en medio ambiente, salud ocupacional y digitalización industrial, un área cada vez más relevante en la llamada “minería 4.0”.
La segunda categoría incluye a técnicos mecánicos y eléctricos, soldadores, operadores de maquinaria pesada, choferes y personal de mantenimiento, todos ellos fundamentales para las etapas de construcción, operación y expansión de las minas.
Por último, están los perfiles transversales, como administradores logísticos, técnicos de laboratorio, analistas de recursos humanos y profesionales vinculados a la gestión de comunidades y licencias socioambientales, esenciales para cumplir con los estándares legales y sociales que exige la industria.
La transformación tecnológica del sector también impulsa nuevas oportunidades. La automatización de procesos, el uso de sensores remotos, la programación industrial y la ciencia de datos aplicada a la extracción y procesamiento de minerales son áreas que están creando demanda de perfiles que, hace pocos años, no tenían un lugar relevante en el mapa laboral minero argentino.
Las regiones del país con más demanda
El mayor número de búsquedas se registra en las provincias que conforman el “Triángulo del Litio”: Salta, Jujuy y Catamarca. Allí, capitales chinos, australianos y canadienses financian proyectos de gran escala.
Un segundo núcleo geográfico está en San Juan y Mendoza, epicentro de megaproyectos de cobre que buscan colocar a Argentina entre los principales productores globales.

En paralelo, Santa Cruz y Río Negro sostienen una fuerte actividad en oro y plata, con operaciones consolidadas y nuevas exploraciones, mientras que Neuquén y La Rioja se perfilan como emergentes en cobre, potasio y tierras raras.
Los proyectos que empujan la tendencia
Entre los desarrollos que explican la creciente demanda laboral, figuran:
–Proyecto MARA (Catamarca): cobre, oro y molibdeno, operado por Yamana Gold (Glencore–Newmont), con inversión estimada en US$ 3.000 millones. Generará más de 4.000 empleos en construcción y más de 1.000 en operación.
–Josemaría (San Juan): cobre y oro, propiedad de Lundin Mining, con inversión de más de US$ 4.000 millones y un pico de 5.000 empleos en obras.

–Fénix (Catamarca): litio, de Arcadium Lithium, actualmente en expansión con tecnologías de extracción directa.
–Centenario-Ratones (Salta): litio, operado por Eramine Sudamérica, con una planta de 24.000 toneladas anuales inaugurada en 2024.
–Mariana (Salta): litio en salmuera con extracción directa, operado por Ganfeng Lithium.
–Don Nicolás (Santa Cruz): oro y plata, en fase de expansión.
–Taca Taca (Salta): cobre y oro, de First Quantum Minerals, en evaluación ambiental.
Nueva política fiscal para la minería: incentivo a la exportación
El 2025 también marca un punto de inflexión en materia tributaria. Con el Decreto 563/2025, el Gobierno eliminó las retenciones a la exportación para minerales, hierros y metales, fijando la alícuota del Derecho de Exportación en 0% para las mercaderías comprendidas en la Nomenclatura Común del Mercosur.
La medida alcanza a la minería metalífera y no metalífera, rocas de aplicación, piedras preciosas y semipreciosas, minerales industriales y combustibles. Quedan excluidos de la exención el litio y la plata, que seguirán pagando un 4,5%.
Entre los beneficiados está el sector calero de San Juan, que no contaba hasta ahora con incentivos similares.
Además, la medida se complementa con la derogación del Decreto 308/2022, que había creado un registro optativo para exportaciones de cobre, reemplazado por un esquema más amplio para todo el sector.