United Mining Projects Corporation desembolsará 550 millones de dólares para la construcción de una mina en el noroeste de la provincia. Se espera un fuerte impacto económico en la región y la creación de 700 puestos de trabajo.
El litio argentino siguen captando la atención de capitales extranjeros que buscan explotar un mineral clave para la transición energética. En las últimas horas, se dio a conocer que una importante firma de Emiratos Árabes busca explotar las salmueras de Catamarca.
Se trata United Mining Projects Corporation que, mediante su subsidiaria Marhen Lithium, realizará una inversión de 550 millones de dólares en la provincia.
Durante la etapa de construcción, la minera prevé generar 700 puestos de trabajo. Mientras que, en la fase de producción, el personal de la planta rondará las 200 personas.
Esto implicaría efectos positivos directos en la economía local, con una proyección de alrededor de $168 millones.
El proyecto se denomina Río Grande e incluye la instalación de una mina en un predio de 9.000 hectáreas, que entrará en operaciones en 2028.
El proyecto se denomina Río Grande e incluye la instalación de una mina en un predio de 9.000 hectáreas que entrará en operaciones en 2028.
El atractivo del litio argentino
A través de un comunicado, la firma aseguró que “las buenas prácticas mineras son económicamente ventajosas para todos nuestros grupos de interés; nuestro personal, la comunidad local y nuestros inversores”.
En esa sintonía, el fundador y CEO de la compañía, Bradley Pielsticker, sostuvo que están “alineados con el compromiso de la compañía de establecer nuevos estándares en prácticas mineras ambientalmente responsables y económicamente ventajosas, destacando así la dedicación a la innovación y la sostenibilidad en el panorama global de producción de litio”.
De esta manera, el litio argentino se consolida como uno de los activos más influyentes en términos de inversión extranjera.
En la última década, los proyectos en el país significaron el 22% del total invertido a nivel global, superando a otras naciones importantes en el mercado, como Estados Unidos (16%), Australia (15%), Canadá (12%) y Chile (9%).
Durante 2023, la exploración litífera le significó a la Argentina el ingreso de 140 millones de dólares. Además, la entrada en operaciones de varios de los proyectos que estaban en marcha, ubicó al país como el cuarto mayor productor de litio en el mundo.
Crece la necesidad de infraestructura
A medida que arriban más operaciones para explotar el litio en el noroeste de la Argentina, se pone de manifiesto una problemática que limita la expansión: la falta de infraestructura. Es un tema, incluso, que el año pasado despertó la atención del Banco Mundial, que recomendó una serie de obras clave a los gobrnadores del NOA y autoridades nacionales.
La zona “tiene una menor densidad de rutas que el promedio nacional” y su estado “suele ser regular o malo”, indicaba el informe de la entidad, que evaluó el escenario del sector para la llegada de inversiones.
Se trata de caminos clave para llevar insumos y trasladar los minerales hasta los puertos. Además, el reporte estima que los costos logísticos llegan a ser “hasta un 50% más altos que en las regiones vecinas, debido a las deficiencias de conectividad y calidad”.
La responsabilidad no recae solo sobre el gobierno nacional, ya que varias rutas están a cargo de las provincias, por lo que en muchos casos se necesita un entendimiento entre las autoridades de diferentes jurisdicciones y niveles.
“Algo que requiere una mejora, no se puede soslayar y no requiere dinero es la mejor coordinación entre las autoridades nacionales, provinciales y locales. Muchas de las deficiencias tienen que ver con fallas de coordinación. Que se realice de cerca y ver qué puede poner cada uno”, señaló Verónica Raffo, especialista sénior en infraestructura del Banco Mundial y líder del programa de infraestructura para los países del Cono Sur.
