Los trabajos de las centrales hidroeléctricas Jorge Cepernic y Néstor Kirchner están paralizados desde diciembre por problemas con el financiamiento chino. El Jefe de Gabinete, Nicolás Posse, anticipó que “de llegarse a los acuerdos necesarios, se firmará una nueva adenda contractual».
Luego de un comienzo de año crítico en torno a la ejecución de las represas de Santa Cruz, el jefe de Gabinete de ministros, Nicolás Posse, aportó algo de alivio al tema al afirmar que “la decisión del gobierno nacional es finalizar la construcción» de las hidroeléctricas Jorge Cepernic y Néstor Kirchner.
El proyecto consiste en la construcción de dos represas hidroeléctricas a cargo de la UTE conformada en un 54% por la china Gezhouba, un 36% por Eling Energía (antes llamada Electroingeniería) y el 10% restante corresponde a la mendocina Hidrocuyo.
Pero un problema con el financiamiento dejó los trabajos a la vera del Río Santa Cruz paralizados desde el 18 de diciembre hasta el momento.
Ante el Senado de la Nación, el funcionario describió que la empresa estatal ENARSA “está negociando con la UTE contratista el reinicio de las obras a la mayor brevedad posible a un ritmo de ejecución que posibilite su concreción en plazos razonables“.
Y agregó que, “de llegarse a los acuerdos necesarios, esto derivará en la firma de una nueva adenda contractual«.
Según el Jefe de Gabinete, el objetivo es contar con «un cronograma de avance de obra realista y ejecutable, que permita certificar tareas en función de hitos críticos para su terminación antes de la finalización del contrato de financiamiento»
ENARSA está negociando con la UTE contratista el reinicio de las obras a la mayor brevedad posible a un ritmo de ejecución que posibilite su concreción en plazos razonables“.
Nicolás Posse, Jefe de Gabinete
Las declaraciones de Posse se enmarcan en cierta recomposición de relaciones comerciales bilaterales, y también financieras, entre el Gobierno Nacional y China, después de un comienzo con tropiezos.
De hecho, hace un par de semanas la Canciller Diana Mondino viajó a China para reunirse con funcionarios del gobierno de ese país, y también se encontró con directivos de Gezhouba.
Más allá del compromiso del Gobierno, no hay definiciones respecto a los plazos. En principio, Posse indicó que las centrales eléctricas estarán operativas recién después de 2027.
En su visita al Congreso informó que el contrato original fue firmado el 31 de octubre de 2013 y que las obras comenzaron el 15 de febrero de 2015, con una modificación del proyecto ejecutivo a principios de 2016. Según puntualizó, el plazo original previsto era que fuera terminada en abril de 2022.
Un comienzo de año con tropiezos para las represas de Santa Cruz
La construcción de las represas de Santa Cruz tuvo un principio de año marcado por conflictos sindicales, falta de financiamiento chino y la paralización total de los trabajos.
El punto más crítico de la iniciativa tuvo lugar el último marzo, con el despido de 1.800 trabajadores por parte de las empresas a cargo de la ejecución de un proyecto estratégico para la provincia.
Sin embargo, un mes después hubo novedades positivas a raíz de una audiencia de conciliación obligatoria convocada en la Casa de Santa Cruz de la CABA. Allí, se reunieron todas las partes involucradas para destrabar la situación de los trabajadores de la obra
En ese marco, se llegó a un acuerdo para prolongar la conciliación obligatoria con los trabajadores percibiendo el 80% de sus saliarios, de modo de continuar la negociación y encontrar la manera de reactivar los trabajos cuando las condiciones climáticas lo permitan, después del próximo invierno.
Además, en esa ocasión se definió que la empresa energética nacional sea comitente de la UTE a pedido de todas las partes.
Un megaproyecto con marchas y contramarchas
Hasta esa fecha, las obras avanzaron de manera dispar y registrando distintos grados de ejecución.
La central Jorge Cepernic, que antes se llamaba La Barrancosa, ya fue concretada en un 42%, y cuenta con un grupo de algo más de 300 trabajadores que están nucleados en la UOCRA.
Mientras que la represa Néstor Kirchner, tiene un avance del 20% y no cuenta con trabajadores activos.
Si bien en octubre del año pasado se anunciaba la llegada de la segunda turbina para la central Jorge Cepernic y componentes electromecánicos para la represa Néstor Kirchner, finalmente eso no sucedió.
Los obreros pensaban que el parate estaba vinculado a las fiestas de fin de año, pero la espera se prolongó más de lo esperado. La inversión china que se había anticipado en ese mismo mes, tampoco se había concretado y el proyecto quedaba virtualmente desfinanciado.
La iniciativa ya había sufrido un período de incertidumbre similar cuando Mauricio Macri asumió como presidente, en diciembre de 2015, y la obra estuvo paralizada durante seis meses. Luego se reactivó y los trabajos siguieron su curso normal, escenario que -se espera- vuelva a repetirse.