Las dos lineas metropolitanas de la CABA seguirán siendo operadas por Metrovías y Ferrovías, respectivamente. Son las únicas que están en manos privadas desde la reestatización. Entre los fundamentos, el Ejecutivo mencionó que desde junio rige una «emergencia pública en materia ferroviaria».
El Gobierno decidió mantener en manos de operadoras privadas por al menos un año más los servicios de pasajeros del tren Belgrano Norte y del Urquiza en el área metropolitana de Buenos Aires (AMBA), al igual que lo ocurrido recientemente con las concesiones de los trenes de carga Ferroexpreso Pampeano, NCA y el Ferrosur Roca, cuyos contratos vencieron en los últimos meses,
Las nuevas extensiones contractuales corresponden a Metrovías (que opera la línea Urquiza) y Ferrovías (responsable de la línea Belgrano Norte).
Las resoluciones 999 y 1000/24, firmadas por el ministro de Economía Luis Caputo, aprobaron estas prórrogas temporales por 12 meses o hasta que se adjudiquen los servicios a través del proceso de licitación vigente, aprobado por el decreto 423/19 y modificado por el decreto 170/23.
La concesión de las líneas Belgrano Norte y Urquiza se remonta a la privatización impulsada durante el gobierno de Carlos Menem, cuando todos los servicios de pasajeros del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) fueron entregados a operadores privados.
Entre los motivos esgrimidos para justificar esta decisión, el Gobierno recordó que está en vigor una «emergencia pública en materia ferroviaria» desde junio.
Además, a fines de agosto se aprobó un «Plan de Acción y Programa de Obras, Trabajos y Contrataciones Indispensables y Urgentes» para cubrir las necesidades prioritarias de las líneas Urquiza y Belgrano Norte.
Las resoluciones también destacaron que las obras y proyectos para estas líneas aún están en proceso de definición, y que, por razones de «oportunidad, mérito y conveniencia, no es prudente realizar una transición operativa hasta que se precisen los alcances, plazos y cronogramas de ejecución”.
Por otro lado, se señaló que la transformación institucional y normativa que está atravesando el Estado Nacional exige un análisis detallado de la regulación ferroviaria.
Las viejas concesiones del tren Belgrano Norte y el Urquiza
La concesión de las líneas Belgrano Norte y Urquiza se remonta a la privatización impulsada durante el gobierno de Carlos Menem, cuando todos los servicios de pasajeros del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) fueron entregados a operadores privados.
A diferencia de lo que ocurrió con las líneas San Martín, Roca, Belgrano Sur, Sarmiento y Mitre, estas dos líneas no fueron reestatizadas debido a que no presentaron los mismos incumplimientos que las otras.
No obstante, los contratos de concesión de ambas líneas vencieron hace varios años: en diciembre de 2017 para el Urquiza y en abril de 2018 para el Belgrano Norte.
El Plan Quinquenal de Ferrocarriles Argentinos, diseñado durante la gestión de Florencio Randazzo, estipulaba que, al finalizar estos contratos, ambas líneas volverían a ser operadas por el Estado, junto con las otras cinco que ya habían sido reestatizadas.
Sin embargo, el gobierno de Mauricio Macri decidió extender las concesiones vencidas y buscó renovar la gestión privada. Inicialmente, intentó implementar un modelo de Participación Público-Privada (PPP), pero ante el fracaso de ese esquema, se lanzó una nueva licitación para concesionarlas nuevamente.
Nunca se brindó una explicación clara sobre por qué se eligió privatizar solo las líneas Belgrano Norte y Urquiza y no otras del sistema ferroviario, o cuál era el beneficio de mantener operadores privados en estas dos líneas mientras el Estado cubría hasta el 95% de los costos de operación y se encargaba de todas las inversiones de capital, como la renovación de estaciones y la elevación de los andenes.
El gobierno anterior heredó de la administración de Mauricio Macri un decreto que convocaba a una licitación para la nueva concesión de las dos líneas. Sin embargo, el entonces ministro de Transporte, Mario Meoni, suspendió el proceso y ordenó revisar los pliegos, en función de que se repetía el esquema de concesion de los 90 y -a entender de la nueva administración- era ilegal según la normativa vigente, que establece que la administración de la infraestructura ferroviaria debe estar en manos del Estado.
En septiembre de 2021, en consecuencia, el Ministerio de Transporte anunció una prórroga «final» de 18 meses, durante los cuales se realizaría el inventario de los bienes concesionados y se concretaría la devolución de las líneas al Estado.
A pesar de este anuncio, el traspaso de las líneas Belgrano Norte y Urquiza a Trenes Argentinos nunca se llevó a cabo. Y ahora, en medio de un proceso que busca privatizar todos los servicios ferroviarios de pasajeros del AMBA, la vigencia de los viejos contratos se prolongó.