A través de su controlada Megacar, entregará 40 unidades rígidas y 15 articuladas, además de 28 cargadores para la línea T1, que conectará Aeroparque con Pompeya y comenzará a operar en 2026.
La Ciudad de Buenos Aires avanza con su plan de transformar el transporte de superficie, y ya adjudicó oficialmente la compra de colectivos eléctricos para las nuevas líneas que se presentarán bajo el nombre comercial de Trambús.
La licitación quedó en manos de Megacar, representante local de Agrale y firma ligada directamente al Grupo DOTA, que ahora tendrá a su cargo el suministro de todas las unidades.
Aunque el pliego original —lanzado en octubre de 2023— preveía la compra de 74 unidades y 60 cargadores, esa cantidad fue finalmente recortada.
Con esta decisión, el Gobierno porteño dejó de lado la oferta de la española Irizar E-Mobility, que había sido preseleccionada para aportar parte de los coches.
Irizar ya había participado en el sistema con los minibuses eléctricos del Microcentro, conocidos como “e-Bus”, pero en este caso se optó por unidades de origen chino comercializadas por Agrale.
Megacar se encargará de entregar 40 colectivos eléctricos rígidos, 15 articulados y 28 cargadores. Las carrocerías estarán a cargo de Todobus, que utilizará su flamante modelo “Lugano” montado sobre los chasis eléctricos Agrale MT17e (para los rígidos) y MT27e (para los articulados).
Aunque el pliego original —lanzado en octubre de 2023— preveía la compra de 74 unidades y 60 cargadores, esa cantidad fue finalmente recortada.
En los próximos días, la presidencia de SBASE firmará el contrato con Megacar en un paso clave para avanzar con el proyecto que impulsa el Ministerio de Infraestructura de la Ciudad. La estatal del subterráneo porteño sólo actúa como gestor técnico del proceso licitatorio.
El Grupo DOTA y su plan de expansión
La adjudicación total a una empresa vinculada a DOTA no pasa desapercibida, sobre todo en un contexto de fuerte expansión del grupo empresario.
En el último tiempo, no sólo consolidó su dominio en el AMBA, sino que también comenzó a ganar terreno en el interior del país.
En Buenos Aires, por ejemplo, acaba de adquirir la tradicional empresa El Puente, sumando cuatro nuevas líneas urbanas (32, 75, 128 y 158) y profundizando su presencia en zonas como Lanús y Pompeya.
Además, se quedó con la histórica carrocera La Favorita, fortaleciendo su control sobre toda la cadena del transporte.
La línea T1 llegará en 2026
Las primeras unidades eléctricas que se compren se destinarán a la línea T1, que comenzará a operar en 2026.
Este nuevo servicio conectará la zona de Aeroparque, en la Costanera, con el Centro de Trasbordo Sáenz, atravesando barrios como Palermo, Villa Crespo, Caballito, Almagro, Parque Chacabuco, Boedo, Parque Patricios y Nueva Pompeya.

El recorrido también permitirá combinar con varias estaciones de subte: Palermo (línea D), Dorrego (línea B), Acoyte (línea A), Avenida La Plata (línea E), Hospitales (línea H) y la terminal Sáenz del ferrocarril Belgrano Sur.
En paralelo, ya se lanzó un concurso de ideas, organizado por la Sociedad Central de Arquitectos (SCA) y el GCBA, para diseñar seis paradas “emblemáticas” de la T1. La propuesta se inspira en experiencias similares, como el certamen realizado meses atrás para la estación Facultad de Derecho.
La segunda línea, T2, está prevista para 2027. Unirá la estación Belgrano C del ferrocarril Mitre con el Centro de Trasbordo Sáenz, atravesando barrios como Nueva Pompeya, Flores, Villa Santa Rita, Villa del Parque, Agronomía, Parque Chas, Villa Pueyrredón, Villa Urquiza y Belgrano.
También pasará cerca de estaciones clave como San Pedrito (línea A), Congreso de Tucumán (línea D), y las paradas Luis María Drago y Pueyrredón del Mitre.
Varios intentos, pocos resultados
No es la primera vez que se intenta incorporar colectivos eléctricos al sistema de transporte porteño. En 2016, el entonces Ministerio de Ambiente de la Nación lanzó una licitación para comprar 400 unidades, pero nunca se concretó.
Tres años más tarde, en 2019, se puso en marcha una prueba piloto que preveía ocho colectivos eléctricos para las líneas 12, 34, 39 y 59. Finalmente sólo dos unidades Yutong, de origen chino, circularon en la línea 59, y fueron devueltas tras un año, luego de que la empresa operadora desistiera de comprarlas.
En la actualidad, fuera de los pequeños e-Bus del Microcentro, la Ciudad sólo cuenta con un único colectivo eléctrico en operación regular. Funciona en la línea 28, que depende de Nación y está operada por DOTA. Es una unidad prototipo, montada sobre un chasis Agrale y equipada con tecnología eléctrica desarrollada en Gran Bretaña.