El texto del proyecto no aclara si contará con participación de los gobiernos de Neuquén y Río Negro, que reclaman participación tras el fin de las concesiones privadas.
Mientras sigue sin definirse cómo será en el futuro cercano la administracion y operación de las represas del Comahue , el Gobierno acaba de dar una inequívoca señal de hacia adónde orienta sus intenciones.
El ministro de Economía de la Nación, Sergio Massa, presentó la semana pasada el proyecto de Ley del Presupuesto 2024 que comenzará a ser debatido en Diputados luego de las elecciones del próximo 22 de octubre y allí se deja ver su idea de que las centrales queden bajo la órbita del Estado nacional.
En su artículo 78, el proyecto de la denominada Ley de Leyes sostiene que “a la finalización de las concesiones hidroeléctricas de jurisdicción nacional, la administración, operación y explotación de cada uno de los aprovechamientos hidroeléctricos otorgados oportunamente en concesión será asumida por Energías Hidroeléctricas S.A.U., dependiente de Energía Argentina S.A. con el objetivo de asegurar la plena operatividad de las centrales, la continuidad de los servicios y el correcto funcionamiento de las instalaciones, sin perjuicio de las eventuales responsabilidades por las obligaciones asumidas por los actuales concesionarios”.
El proyecto del Presupuesto no aclara si Energías Hidroeléctricas S.A.U. contará con participación de los gobiernos de Neuquén y Río Negro.
De esta manera el Ejecutivo nacional avanza en la conformación de una empresa estatal que esté bajo el control de Enarsa para asegurar la operación de las centrales y refuerza la idea del control de Enarsa que ya había sido anunciada a principios de este año y que, tras el rechazo de las provincias de Neuquén y Río Negro.
Para salvar esa situación, a mediados de julio se resolvío extender por 60 días corridos (prorrogables por otros 60 días corridos más) las concesiones de las empresas que controlan las represas desde la década del ’90.
Esa medida había quedado plasmada en la Resolución 574/2023 publicada en el Boletín Oficial con la firma de la secretaria de Energía, Flavia Royón, y alcanzó a la operación de las centrales hidroelécticas Alicurá, El Chocón Arroyito, Cerros Colorados y Piedra del Águila.
La disposición indicó que la decisión final sobre este tema, al igual que ahora el tratamiento del presupuesto, quedaría pendiente para el próximo período de gobierno nacional.
Más alla de esto último, la previsión del gasto público para 2024 podría indicar en qué dirección avanzará en caso de ganar las elecciones el actual candidato a presidente oficialista, quien prepara un gran acto en Neuquén para inaugurar obras clave para Vaca Muerta con apoyo del gobernador y su sucesor electo.
El proyecto no aclara si Energías Hidroeléctricas S.A.U. contará con participación de los gobiernos de Neuquén y Río Negro, un punto que igualmente fue bien considerado por el Gobierno y estuvo sobre la mesa de diálogo que se creó para tratar el tema con ambas provincias luego de un período de tensión.
El 11 de agosto pasado vencieron los contratos de concesión de Alicurá (1.000 MW), El Chocón (1.200 MW) Arroyito (1.200 MW) y Cerros Colorados (450 MW) y el 29 de diciembre vence el de Piedra del Águila (1.400 MW), todos ellos firmados en 1993 en el marco de la privatización de Hidroeléctica Norpatagónica Sociedad Anónima (Hidronor).
En tanto las empresas concesionarias son AES (Alicurá), ENEL Generación (El Chocón Arroyito), Orazul Energy (Cerros Colorados) y Central Puerto (Piedra del Águila).
El reclamo de las provincias por las represas del Comahue
“La infraestructura (de las centrales) es Nacional, hay que tener en cuenta que fueron construidas con los recursos de todos los argentinos. Al mismo tiempo, el recurso es de cada provincia. Es lógico lo que reclaman las provincias, por eso está contemplado que haya un director de cada una”, admitió semanas atrás Royón.
Las provincias propusieron al Gobierno avanzar en la creación de una empresa hidroeléctrica regional tripartita, conformada por el Estado Nacional y las provincias de Neuquén y Río Negro. En ese sentido, el proyecto de presupuesto de Massa podría estar dando lugar a el pedido.
Entre los ejes centrales del reclamo de las provincias, se destacaba la necesidad de contemplar una renta por la explotación comercial de las centrales generadoras que permita la ejecución de un programa de obras hidroeléctricas multipropósito, de infraestructura y de desarrollo productivo a consensuar entre las partes.
También está en debate la participación de las provincias en la renta que se genere a partir de la explotación de las centrales hidroeléctricas. Las provincias advirtieron que debe contemplarse una tarifa que permita, por un lado, llevar adelante correctamente y de manera segura la operación y mantenimiento de las represas al mismo tiempo en que debe incorporarse una contribución a los municipios y/o comisiones de fomento aledaños a los emprendimientos. También debe servir para financiar un fondo específico para obras hidroeléctricas y productivas en la región.