El 8 de enero se realizará la audiencia pública para definir las subas que se aplicarán a las tarifas de gas en el contexto de la eliminacion del esquema de subsidios que se propone el gobierno de Javier Milei.

De cara a la audiencia pública convocada por el Enargas para el 8 de enero, las empresas distribuidoras de todo el país ya presentaron sus propuestas de aumento del gas para las boletas de febrero.

De acuerdo con los planteos presentados por las distribuidoras, la recomposición de tarifas debería de ser de al menos el 350% para el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) pero todavía más altas en el interior del país.

También reclamaron un mecanismo de actualización automática calculada sobre la base e la inflación mayorista.

El Observatorio de Tarifas y Subsidios de la UBA advirtió que los usuarios residenciales de luz y gas pagan en promedio el 33% del costo de abastecimiento mientras que el 67% lo abona el Estado nacional.

Para Metrogas, por ejemplo, que distribuye el fluido en el AMBA, el aumento debería ser superior al 375% ya que, advirtió, “la tarifa de distribución se mantuvo congelada durante los últimos cuatro años”.

Así, el cargo fijo para los usuarios de Metrogas pedido a Enargas a partir de febrero pasaría a un mínimo de 4.318 pesos en la Capital Federal y 4.335 pesos en Buenos Aires (usuarios con consumo más bajo) para los tres niveles de segmentación (N1, el de mayores ingresos, N3 los de menor ingreso y N2, de ingresos medios).

Para el tramo de mayor consumo, el cargo fijo pasaría a ser de 19.333 pesos en CABA y 19.357 pesos en Provincia.

En tanto Naturgy, que opera en la Provincia de Buenos Aires, solicitó al Enargas una suba del 437% y un mecanismo automático de actualización que identificaron en el IPIM, es decir el índice de inflación mayorista que publica mensualmente el Indec.

El secretario de Energía, Eduardo Chirillo. Aumento del gas
El Secretario de Energía de la Nación, Eduardo Rodríguez Chirillo, avanza en la liquidación del esquema de subsidios a las tarifas energéticas.

Las otras empresas distribuidoras que operan en el país también presentaron sus solicitudes de aumento.

Redengas (Entre Ríos), pidió desde un incremento promedio de 481%.

Camuzzi Gas Pampeana, en tanto, solicitó un 421% de aumento en la tarifa de distribución.

Camuzzi Gas del Sur pidió subas del 543% por ciento mientras que Gasnor aseguró que sus tarifas de distribución están atrasadas en entre un 438% y 704% para los usuarios residenciales.

Ecogas (Córdoba, La Rioja, Catamarca) midió por su parte un promedio de 126% de impacto en las tarifas mientras que Transportadora Gas del Sur (TGS), por su parte, calculó que hace falta una recomposición mayor, de 567%, y TGN lo hizo en 573%.

Atraso tarifario y aumento del gas

La situación de atraso tarifario fue expuesta en números en un informe reciente del Observatorio de Tarifas y Subsidios IIEP, que depende de la Universidad de Buenos Aires (UBA). “En diciembre los usuarios residenciales de energía eléctrica y gas natural pagan en promedio el 33% del costo de abastecimiento mientras el restante 67% lo abona el Estado nacional”, se indica.

Debido a que el 80% del costo eléctrico y el 100% del costo de gas están dolarizados, estas proporciones pueden cambiar sensiblemente a partir del salto del tipo de cambio de $400 a $800 pesos por dólar. En ausencia de nuevos incrementos en el precio estacional, es posible que la cobertura de costos se reduzca significativamente”, planteó ese informe.

En términos generales, “los principales subsidios económicos a los sectores Agua, Energía y Transporte tuvieron en diciembre un crecimiento acumulado anual del 75,9% anual respecto de igual periodo del año anterior y por lo tanto su variación real muestra una reducción del 19,6% anual en el período. Hasta los primeros quince días de diciembre se acumula una ejecución del 91% respecto del crédito vigente para los rubros seleccionados”, planteó el observatorio.

Si bien es temprano para estimar el impacto final que tendrá el salto devaluatorio en la estructura de costos, fuentes de mercado estiman que, por ejemplo, para el caso de la energía eléctrica, el encarecimiento de la generación sin que haya un incremento en el precio de las tarifas llevaría al porcentaje de cobertura a mínimos históricos. Para luz y gas podrían quedar incluso por debajo del 10 por ciento. Para tomar dimensión: en la actualidad el segmento de los usuarios con menor asistencia de subsidios cubre el 62% del costo total de la generación, mientras que el N2 -tarifa social- cubre 18% y el sector medio, 23%.

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