Si bien se logró extender el despacho hasta septiembre, ahora el valor se ubicará cerca de los 20 dólares por millón de BTU. Se espera por la finalización del proyecto de Reversión del Gasoducto Norte para garantizar el abastecimiento a siete provincias.

Las importaciones de gas de Bolivia se extendieron para cubrir los próximos tres meses y evitar faltantes durante la temporada invernal. Sin embargo, se estima que el suministro del país vecino duplicará los precios del GNL que se importa por barco y costará hasta cinco veces lo que valdrían los recursos de Vaca Muerta, que hoy no se pueden usar por las demoras en las obras de infraestructura de transporte.

De acuerdo a la información proporcionada por YPFB, la petrolera, a cargo del despacho, el costo por millón de BTU se ubicará en torno a los 20 dólares. Es el precio al que se llega en la última etapa del sostenido declive de la industria de hidrocarburos en Bolivia, que se inició hace años, por lo cual el país vecino había anunciado la suspensión de las exportaciones a partir de (este) junio.

Esto supuso un gran problema para la Argentina ya que la Reversión del Gasoducto Norte, obra fundamental para llevar el gas de Vaca Muerta a siete provincias que hoy dependen del gas boliviano, aún no finalizó.

Desde YPFB explicaron que el precio “se encuentra dentro de los parámetros de Premio por Garantía de Abastecimiento.

En ese escenario, Enarsa abrió una negociación con la petrolera boliviana y acordaron extender el suministro hasta septiembre, mes en el que se espera finalizar la construcción del ducto demorado.

La conformación del precio del gas de Bolivia

Sobre los valores que se prevén para el gas, desde YPFB explicaron que el precio “se encuentra dentro de los parámetros de Premio por Garantía de Abastecimiento que ya había sido introducido como concepto en la adenda del 2022 con niveles similares. Como referencia, ese año se le pagó a YPFB un valor de 22.5 US$/MMbtu por el gas adicional y en la actualidad se está pagando 17.5 US$/MMbtu”, indicaron desde la empresa.

Según señalan en la petrolera, es imposible establecer un precio exacto, ya que este depende de una fórmula que considera una canasta de combustibles y su valor en el mercado internacional, que puede variar. No obstante, se estima que el precio podría rondar entre los 19 y 20 dólares.

El acuerdo entre Enarsa e YPFB

“Este suministro permitirá abastecer la zona centro/norte del país con hasta 4 millones de metros cúbicos por día (MMm3/día) en función del requerimiento de la demanda interna, mientras se termina con el proyecto de Reversión del Gasoducto Norte, actualmente en marcha”, señalaron desde Enarsa.

En ese sentido, señalaron que esperan finalizar el proyecto a mediados de septiembre, lo que permitirá “llevar a las provincias del norte 5 MMm3/día adicionales a los actuales y en una segunda etapa otros 4 MMm3/día”.

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Las tareas de soldadura se completaron con un sistema semiautomático.

El Gobierno avanza en varios convenios para garantizar el abastecimiento hasta la finalización de la obra. Este acuerdo con Bolivia, se da solo unos días después del que se alcanzó con Enap de Chile para importar un total de 128.470.000 de metros cúbicos de gas natural, desde la nación transandina hacia la provincia de Salta.

El retraso en la Reversión del Gasoducto Norte

El año pasado, cuando se abrió la licitación para las obras incluidas en el proyecto de Reversión del Gasoducto Norte, la idea de la gestión de Alberto Fernández era tenerlo listo antes de junio de este año. Pero el recambio de Gobierno y la llegada de Javier Milei al Ejecutivo no permitieron que los plazos se cumplan lo que despertó críticas desde la oposición.

Desde Enarsa, responden que la reversión “nunca se paró”, sino que se vieron obligados a relicitar el renglón 1 al constatarse un precio 70% superior al del presupuesto. “Desde el 25 de octubre quedó sin movimiento, no se expidió la comisión evaluadora hasta el cambio de administración, cuando se retomó su proceso. No era legalmente posible adjudicar el renglón 1 y peligraba su financiamiento a esos niveles de precio”, explicaron.

“Sí se adjudicaron los renglones 2 y 3 a partir del 3 de enero. Luego se relicitó el renglón 1, reformulado, con plazos abreviados, conservando el financiamiento CAF, generando competencia en la nueva licitación, lo que se vio reflejado en sus precios”, agregan respecto a los procedimientos de los primeros meses del año.

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