El presidente y CEO de la petrolera argentina, Horacio Marin, dio uno de sus mejores golpes justo a un año de asumir, al sellar el trato para la primera fase de desarrollo del Argentina LNG. Tras meses de gestiones, el logro marca el final definitivo a la participación de la malaya en la mega inversión.
El CEO de YPF Horacio Marin y el vicepresidente Ejecutivo de GNL de Shell, Cederic Cremers, firmaron en La Haya, Países Bajos, un acuerdo para el desarrollo de Argentina LNG, que en los hechos implica la inocorporación de un nuevo socio de peso al proyecto.
Es el punto de partida de una asociación que ya tiene antecedentes en el país, tanto en Vaca Muerta como en la explotación off shore, pero que ahora suma el desafío del Gas Natural Licuado mediante un Project Development Agreement. Es decir, bastante más que un Memorando de Entendimiento habitual.
Como uno de los grandes jugadores globales de ese negocio, al representar casi el 20% de lo que se comercializa globalmente, con una amplia y diversificada cartera de clientes, numerosos activos de transporte y almacenamiento y acceso a plantas, se espera que Shell pueda darle impulso y proyección al shale gas de Vaca Muerta.
Lo cierto es que la Shell está considerada como una de las cinco grandes corporaciones de este segmento junto con Petronas, Qatargas, Chevron y TotalEnergies.
Es el punto de partida de una asociación que ya tiene antecedentes en el país tanto en Vaca Muerta como en la explotación off shore, pero que ahora suma el desafío del Gas Natural Licuado mediante un Project Development Agreement, es decir bastante más que un Memorando de Entendimiento habitual.
YPF viene de sumarse en las últimas semanas al otro naciente consorcio bajo el nombre de Southern Energy, en el que contará con un 15% del proyecto, el remanente de lo que ya habían acordado PAE (40%), Pampa Energía (20%); Harbour Energy (15%) y Golar GNL (10%), y que prevé la llegada al país de un primer buque licuefactor para 2027.
En este nuevo entendimiento con Shell, a partir de ahora, las partes se comprometen a avanzar en el desarrollo de la primera fase del proyecto Argentina LNG hasta asumir la decisión para ingresar a la etapa del Feed o Front-End Engineering and Design. Esa definición se tomará durante 2025 e implicará, en su primera instancia, una capacidad de licuefacción de 10 millones de toneladas al año (MTPA).
Esto representa unos 40 millones de m3 diarios de gas natural, un volumen que requerirá importantes obras de infraestructura como desarrollo de áreas gasíferas en Vaca Muerta, plantas de tratamiento, gasoductos, instalaciones de licuefacción y una terminal portuaria, que de reconfirmarse con el nuevo socio se instalará en Punta Colorada, Río Negro.

Un punto clave a definir será la decisión de avanzar con la construcción o no de una mega factoría on shore, para transformar el gas natural al estado líquido, ya que hasta el momento se viene insistiendo en contar con una red de buques licuefactores que pueden dar un volumen importante al negocio, evitando una inversión multimillonaria.
“Estamos orgullosos de que Shell, líder mundial en la producción de GNL, se una al proyecto. Como pionero en el mercado de GNL, el conocimiento y la experiencia de Shell serán fundamentales para ayudar a posicionar a Argentina como un proveedor de energía global confiable y competitivo», afirmó el presidente de YPF al reconocer el aporte del know how que sumará la compañía multinacional.
El adiós de Petronas y el agradecimiento de YPF
YPF sentenció que con el ingreso de Shell al desarrollo de la primera fase de ARG LNG, finaliza la participación de Petronas como socio en el proyecto, aunque ambos ratifican que continuarán trabajando en el desarrollo del área La Amarga Chica en Vaca Muerta.
“YPF reconoce el valioso aporte de Petronas durante los últimos dos años, compartiendo con los equipos de YPF su experiencia técnica y comercial en el mercado de GNL. El trabajo conjunto ha contribuido al desarrollo del Proyecto ARG LNG hasta su etapa actual y permitirá dar nuevos pasos”, expresó la petrolera argentina.
La tarea de YPF junto a su nuevo socio permitirá continuar la búsqueda de nuevos off takers, interesados en firmar compromisos de compra del gas licuado a producir, lo que facilitará la búsqueda del financiamiento internacional mediante un project finance cerrado.
Para esto, se había anunciado que el propio Marin comenzará el 1 de enero un raid comercial por Asia en busca de acelerar los acuerdos de contractualización del futuro GNL, en momentos en que baja del dólar financiero, la inflación y el riesgo país, son puras buenas noticias para esta industria de capital intensivo.
El GNL es gas natural que se ha enfriado hasta alcanzar un estado líquido a unos -162 °C (-260 °F), y este proceso reduce su volumen unas 600 veces facilita y hace más seguro su almacenamiento y transporte, por lo cual en los últimos años se convirtió en una solución de abastecimiento energético para muchos países.
Es que, más allá de cuestiones geopolíticas recientes, muchas ciudades e industrias que dependen del gas natural para generar energía están ubicadas lejos de los yacimientos, lo que hace que la construcción de gasoductos sea poco práctica o costosa.