Challenger Gold anticipó que el mineral extraído en Hualilán será procesado en la planta de Casposo, en Calingasta. También confirmó una recaudación de 34,5 millones de dólares australianos, con participación del empresario argentino Eduardo Elsztain.
Una histórica mina de oro ubicada en San Juan se prepara para volver a operar. Challenger Gold anunció que el mineral extraído en Hualilán será procesado en la planta de Casposo, en Calingasta, reactivando así uno de los proyectos auríferos más importantes de la región.
Con el Estudio de Prefactibilidad (PFS) ya finalizado, la empresa confirmó una recaudación de 34,5 millones de dólares australianos, en la que participó el empresario argentino Eduardo Elsztain.
El inicio de las operaciones está previsto para septiembre de 2025, con finalización estimada para septiembre de 2027.
El informe técnico proyecta un EBITDA (indicador del beneficio bruto de explotación calculado antes de deducir los gastos financieros) de 221 millones de dólares australianos (unos U$S143,5 millones) en tres años, basado en precios actuales y bajo un esquema de molienda de peaje.
Desde la empresa destacan que el PFS ofrece “métricas financieras convincentes” y subrayan los márgenes robustos incluso con precios conservadores de los commodities.
Cronograma minero y logístico
El inicio de las operaciones está previsto para septiembre de 2025, con finalización estimada para septiembre de 2027.
En total, se excavarán 465.000 toneladas métricas de mineral desde tres frentes: los tajos Norte, Sánchez y Magnata. De esa cantidad, 450.000 toneladas se recuperarán del stock de material ROM (run of mine) y se trasladarán a Casposo para su procesamiento.
El mineral será transportado en camiones cubiertos de entre 25 y 40 toneladas, operados por contratistas, que cargarán el material directamente desde los acopios en Hualilán.
El movimiento de cargas comenzará en octubre de 2025 y se extenderá hasta febrero de 2028, asegurando una reserva estable en Casposo y un flujo logístico uniforme.
Cómo será el proceso
La planta de procesamiento de Casposo —propiedad de Austral Gold— se reactivará luego de un período en estado de Cuidado y Mantenimiento. Tiene una capacidad nominal de 400.000 toneladas anuales (en seco), y funciona 8.000 horas por año, equivalente a 50 toneladas por hora.
El mineral de Hualilán será tratado en campañas trimestrales mediante el sistema de molienda a comisión: tres meses de procesamiento y tres meses de pausa.

Cada campaña implicará procesar unas 75.000 toneladas húmedas, cifra que está por debajo de la capacidad operativa de la planta, generando un margen operativo que garantiza estabilidad.
El método de procesamiento será por gravedad, seguido de lixiviación con cianuro y el sistema Merrill-Crowe, y las campañas se alternarán con las del mineral extraído de Casposo.
El arranque de la primera campaña está previsto para noviembre de 2025, con la planta operando a tiempo completo en ese período a una tasa de aproximadamente 822 toneladas por día.
Impulso financiero y planes a futuro
La ronda de financiamiento anunciada por Challenger permitió captar aproximadamente A$34,5 millones, gracias al respaldo de inversores institucionales como L1 Capital y Helikon Investments, además del continuo apoyo del Grupo Elsztain.
Según explicó el director general de CEL, Kris Knauer, “la colocación anunciada hoy es transformadora para Challenger que ha logrado atraer un fuerte apoyo de los principales inversores institucionales, incluidos L1 Capital y Helikon Investments, así como el continuo y valioso apoyo del Grupo Elsztain”.
Knauer remarcó que “el éxito de la colocación valida nuestra estrategia para generar flujo de caja a corto plazo de Hualilan a través de la molienda de maquila, al mismo tiempo que proporciona a Challenger la financiación y la pista para acelerar los estudios y la perforación en un desarrollo independiente de mayor tamaño de Haulilan”.
El objetivo ahora es financiar todas las operaciones hasta lograr el primer flujo de caja, avanzar con nuevas campañas de perforación y publicar el estudio de Vida Útil de Mina (LOM) en el primer trimestre de 2026.
Con este esquema, Challenger busca consolidarse como desarrollador aurífero de pleno derecho, sin cobertura y con la producción planificada para comenzar antes de que termine el año.