El megaproyecto Vicuña dio un paso decisivo en su desarrollo al formalizar su solicitud de adhesión al Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI) bajo la categoría PEELP, correspondiente a Proyectos de Exportación Estratégica de Largo Plazo. La presentación integra de manera conjunta los yacimientos Josemaría y Filo del Sol, dos de los depósitos de cobre más relevantes del país.
La confirmación del ingreso de ambos proyectos al RIGI fue ratificada oficialmente por el Gobierno nacional, que destacó el inicio formal del trámite como un hito para la minería argentina. Desde el Ejecutivo señalaron que se trata del mayor proceso de inversión minera extranjera directa iniciado en el país, con un compromiso de ejecución acelerada de capital durante los primeros años de vigencia del régimen.
La adhesión al RIGI bajo la figura PEELP apunta a respaldar un esquema de inversión de múltiples etapas y con horizonte multidecadal. En ese marco, Vicuña proyecta una vida operativa de al menos 25 años para el yacimiento Josemaría, con una hoja de ruta que prevé sostener flujos de inversión, generación de empleo y desarrollo de proveedores durante varias décadas, consolidando a San Juan como eje central del nuevo ciclo cuprífero argentino.
Desde la compañía, el CEO de Vicuña, Ron Hochstein, destacó que la presentación refleja tanto la magnitud del capital requerido como la confianza en el país como socio estratégico de largo plazo. Subrayó además la importancia de la colaboración con los gobiernos nacional y provincial, y consideró que el RIGI ofrece un marco de estabilidad que permite avanzar en un desarrollo responsable, con beneficios económicos compartidos y previsibilidad normativa.
El esquema PEELP está pensado para inversiones de múltiples décadas, y Vicuña es el primer proyecto en activar ese modelo.
El Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones fue diseñado para atraer proyectos de gran escala y alto impacto exportador, ofreciendo estabilidad fiscal prolongada, reducción de alícuotas del Impuesto a las Ganancias y de derechos de exportación, exenciones arancelarias para bienes de capital, un régimen de IVA más eficiente y estabilidad regulatoria por 40 años desde el inicio de las operaciones. A ello se suma la posibilidad de recurrir a arbitraje internacional en caso de controversias, un factor clave para inversiones de esta magnitud.
El Proyecto Vicuña constituye un activo integrado de cobre, oro y plata que combina los yacimientos Josemaría y Filo del Sol dentro de un mismo clúster andino. Si bien se trata de un desarrollo binacional por su localización geográfica, todas las inversiones alcanzadas por el RIGI se ejecutan dentro del territorio argentino. La compañía avanza actualmente en estudios de ingeniería y trabajos técnicos, con el objetivo de publicar un informe técnico integrado durante el primer trimestre de 2026, que será clave para definir el diseño definitivo del proyecto.
El ingreso de Vicuña al RIGI se inscribe en un proceso que comenzó a tomar forma meses atrás. En agosto pasado, durante la Conferencia Internacional Argentina Cobre, autoridades provinciales y representantes de la empresa adelantaron una proyección de inversión superior a los 15.000 millones de dólares para el desarrollo conjunto de Josemaría y Filo del Sol, con un techo potencial que podría acercarse a los 17.000 millones. De concretarse, se trataría de una de las mayores inversiones directas de la historia argentina.
El distrito Vicuña proyecta a San Juan como uno de los polos cupríferos más relevantes de la región.
Vicuña Corp. surge de la asociación entre BHP y Lundin Mining, dos de los principales actores de la minería global. La empresa fue concebida específicamente para desarrollar ambos yacimientos bajo una lógica de integración operativa, aprovechando sinergias geológicas, logísticas y de infraestructura. En ese sentido, directivos de Lundin Mining han destacado reiteradamente el valor geológico del distrito Vicuña, considerado uno de los mayores depósitos de cobre sin desarrollar a nivel mundial.
La presentación formal de Josemaría y Filo del Sol al RIGI consolida el reposicionamiento del cobre en la agenda minera nacional. La creciente demanda internacional asociada a la transición energética, sumada a un escenario político y regulatorio más receptivo a las inversiones de largo plazo, genera condiciones favorables para acelerar el desarrollo de proyectos de clase mundial.
En ese contexto, Vicuña se perfila como uno de los emprendimientos llamados a marcar una nueva etapa para la minería argentina, no solo por la escala de su inversión, sino también por su potencial para transformar el perfil exportador del país, fortalecer la cadena de valor minera y consolidar a San Juan como una de las principales provincias cupríferas de América Latina.
