Los últimos registros de una consultora muestran que mientras el tight y el convencional sufren caídas moderadas, el segmento no convencional acelera su crecimiento. Los yacimientos que opera Pluspetrol arrojaron las alzas interanuales más pronunciadas.
La producción de shale gas en Vaca Muerta se consolida como uno de los pilares fundamentales de la matriz energética nacional. Según el informe de octubre de 2024 de la consultora El Aleph, durante el décimo mes del año se extrajo un total de 133 millones de metros cúbicos diarios (MMm³/d) de gas en la Argentina, con un aporte de 65 MMm³/d proveniente del no convencional, mientras que el convencional y el tight registraron descensos interanuales del 9% en ambos casos.
En contraste, el shale cerró el mes con un alza del 21% interanual, impulsado por fuertes mejoras productivas en áreas clave, entre las que destacaron los rendimientos en La Calera y Sierra Chata. Recientemente, YPF le compró una importante participación de esta última a ExxonMobil y Qatar Petroleum, pero sigue siendo operada por Pluspetrol.
El fortalecimiento de la infraestructura fue un factor determinante en la expansión del shale gas.
En este contexto, la Cuenca Neuquina, principal fuente de producción, continúa liderando con 93 MMm³/d, a pesar de haber registrado una caída intermensual de 16 MMm³/d en octubre. Este desempeño representó el 70% del total nacional, lo que subraya el protagonismo de la región en la producción de hidrocarburos.
Los motivos del crecimiento acelerado
El fortalecimiento de la infraestructura ha sido un factor determinante en la expansión del shale gas. Entre las mejoras recientes destacan el Gasoducto Perito Moreno (ex GPNK) que en agosto de 2023 sumó 11 MMm³/d a la capacidad nacional, y la planta compresora de Tratayén, que en julio de 2024 añadió 5 MMm³/d.
Asimismo, la compresión adicional en Salliqueló incorporó otros 5 MMm³/d en octubre de este año. Estas iniciativas han permitido optimizar el transporte y procesamiento del gas, facilitando el incremento de la producción.
Por otro lado, la Cuenca Austral aumentó su producción a 26 MMm³/d (+2 MMm³/d intermensual), impulsada por el Proyecto Fénix (CMA-1), que puso en producción su primer pozo de manera exitosa. De acuerdo al informe, el crecimiento del shale gas en los últimos años es impactante y se observa una fuerte recuperación pospandemia, en lo que se denomina el “combustible de transición”.
El documento explica que el recurso implica un menor impacto ambiental en comparación con los combustibles líquidos fósiles.
Esta tendencia, que se acelera a medida que más actores económicos se comprometen con combatir el cambio climático, sostiene el incremento exponencial del gas y genera expectativas de cara al final de la década.
Las áreas más destacadas en Vaca Muerta
El desempeño en Vaca Muerta se sustenta en la eficiencia de algunos de sus principales desarrollos. Entre ellos, Fortín de Piedra, operado por Tecpetrol y el bloque histórico del segmento, produjo 11,8 MMm³/d en octubre, registrando una caída interanual del 3% pero un aumento del 7% en el año móvil. Por su parte, Aguada Pichana Este, gestionado por Total Austral, mostró un crecimiento interanual del 20%, alcanzando 9,9 MMm³/d.
Sin embargo, el alza más importante se dio en el área La Calera, operada por Pluspetrol, que alcanzó los 8,4 MMm³/d, lo que representa un incremento del 69% interanual y del 38% en el año móvil.
El siguiente bloque que reportó un crecimiento similar fue Sierra Chata (Pluspetrol –y ahora YPF-), con una suba del 28% interanual y una producción total de 4,1 MMm³/d.
Además, Aguada Pichana Oeste (Pan American Energy) reportó 7,8 MMm³/d, mientras que otros yacimientos relevantes incluyen Aguada La Arena (YPF), con un aumento del 40% interanual; Rincón del Mangrullo (YPF), con una suba del 30%; y Loma Campana (YPF), que alcanzó un crecimiento interanual del 39%. }
También sobresalen El Mangrullo (Pampa Energía), con un récord del 202% en el año móvil, y Bandurria Sur (YPF), que incrementó su producción un 50% en el mismo periodo.
En octubre, YPF lideró la producción de shale gas con 14,7 MMm³/d, equivalente al 23% del total, seguida por Tecpetrol con 12,1 MMm³/d, que representa un 19%. Pluspetrol, por su parte, duplicó su producción en los últimos meses, consolidándose como un actor clave en el sector.