El gobierno descongeló los gravámenes al sector de manera gradual para impedir disparadas. Según los datos de diciembre y enero, los valores de la nafta súper solo quedaron un 4% debajo de los precios internacionales.
El mercado de los combustibles tuvo un 2024 con subas frecuentes, pero que se fueron moderando. Desde un principio, el gobierno señaló que el objetivo era liberar los precios para normalizar el comercio y que los valores internos alcancen la paridad de importación. En concreto, que se alineen con los precios internacionales.
Si bien este esquema tuvo un impacto en las ventas, que aún no alcanzan los niveles del año pasado, el mercado interno se “estabilizó” a partir de septiembre. De esta manera, mientras algunos derivados se encuentran apenas por debajo de la paridad buscada, otros están apenas por encima, y el escenario encontró su equilibrio.
En enero de 2025, la Ciudad de Buenos Aires registró un incremento uniforme del 1,8% en todas las variedades de combustibles.
Sin embargo, los Impuestos a los Combustibles Líquidos y al Dióxido de Carbono, aún mantienen un atraso significativo. Esto se debe a que los incrementos que se aplicaron al tributo siempre fueron regulados por el Ministerio de Economía. El gobierno ya adelantó que prepara los aumentos escalonados para corregir esta situación a lo largo de 2025.
La consultora Economía y Energía calculó que hay pendiente un aumento de $200 en la nafta y de $110 en el gasoil.
En cuanto a las ventas, estas tuvieron un desplome pronunciado a principio del año pasado cuando se aplicaron las primeras subas en los precios. El consumo se estabilizó en junio y repuntó con dos subas intermensuales consecutivas en octubre y noviembre.
Así cambiaron los precios de los combustibles en diciembre y enero
En diciembre, los impuestos se incrementaron un 7,5% para el gasoil y un 6,5% para las naftas, mientras que en enero de 2025 los ajustes fueron del 5,4% y 4,7%, respectivamente. Este esquema permitió que el impacto en los surtidores fuera de apenas un 1% en ambos meses.
Los datos se desprenden del último informe del estudio Montamat y Asociados. El texto señala que la suba final de diciembre (sumada a la devaluación mensual y la variación del valor del petróleo) fue de un 5% para el gasoil y del 3,5% para las naftas.
En Capital Federal, los precios de YPF reflejaron un alza del 2,8% para todas las variedades de combustibles, salvo el gasoil premium, cuyo aumento fue del 1,8%.
En enero de 2025, la Ciudad de Buenos Aires registró un incremento uniforme del 1,8% en todas las variedades de combustibles. En el promedio nacional, sin embargo, el aumento fue inferior al 1%, por lo que los combustibles más baratos se ubicaron un 3% por debajo de la paridad internacional.
Desde que comenzó la gestión del Gobierno en diciembre de 2023, los precios de los combustibles subieron 285%, ya que los mayores aumentos se concentraron en los primeros días de gestión. En 2024, en tanto, la suba anual fue de 100%, por debajo de la inflación estimada en el año de 118%.
Con estas correcciones de precios, que estuvieron explicados por el aumento del tipo de cambio oficial y por la suba del impuesto a los combustibles, el precio promedio a nivel nacional del litro de nafta súper es 1,17 dólares.
De esta forma, es más cara que en Paraguay (0,85) y Brasil (1,01), pero más barata que México (1,25), Chile (1,30) y Uruguay (1,72), según los últimos cálculos de la consultora Economía y Energía (EyE).
En cuanto al gasoil, el litro vale en promedio en el país 1,22 dólares. En este caso, es el precio más caro de la región, solo por debajo de México (1,27). En tanto, es más alto que en Paraguay (0,92), Chile (0,98), Brasil (1) y Uruguay (1,14).