El gremio de los maquinistas suspendió la medida de fuerza que este martes iba a afectar a más de un millón de usuarios. En un encuentro en Casa Rosada, su titular, el Jefe de Gabinete y el secretario de Transporte pactaron una tregua hasta el jueves y el Gobierno dispuso la conciliación obligatoria.
El paro de trenes programado por La Fraternidad para este martes 4 de junio fue suspendido luego de una reunión a última hora entre el Jefe de Gabinete, Guillermo Francos, el secretario de Transporte, Franco Mogetta, y el titular del gremio de los maquinistas, Omar Maturano.
Tras un encuentro calificado como «cordial», el Gobierno dictó la conciliación obligatoria y el sindicato hizo saber que finalmente no hará el cese de actividades anunciado.
La negociación para evitar el paro de trenes
Al salir de la reunión, el sindicalista indicó a la prensa que el Gobierno les propuso un impasse hasta el jueves, cuando se programó una nueva audiencia en la Secretaría de Trabajo.
«Necesitamos un aumento que por lo menos le emparde a la inflación», enfatizó Maturano.
El Gobierno había propuesto un incremento del 2% en abril y otro 7% en mayo, pero la oferta fue rechazada por La Fraternidad. Ahora se abrió una impasse hasta el jueves.
El conflicto siguió sin resolución y el gremio había anunciado una paralización total para el martes, que se iba a extender por 24 horas.
En rigor, el plan de lucha de los maquinistas había empezado el jueves de la semana anterior, cuando operaron los trenes a una velocidad máxima de 30 kilómetros por hora y se generaron demoras y cancelaciones que afectaron a los usuarios.
Sin embargo, tras el encuentro entre Maturano, Francos y Mogetta realizado esta tarde en la Casa Rosada, se prestarán los servicios con normalidad.
“Nosotros pretendíamos el 38%, pero sabemos que es difícil, aunque nunca vamos a aceptar el 2 por ciento que ofrecían, queremos recomponer el salario de los conductores”, dijo Maturano, post reunión, con cierto tono conciliador. “Queremos empatar a la inflación, como la veníamos empatando con el Gobierno anterior”, insistió -sin embargo- el titular de La Fraternidad.
Tras la advertencia de paro que el gremio había ratificado la semana pasada, el Gobierno ofertó un incremento del 2% en abril y otro 7% en mayo, a pagarse a finales de junio. Sin embargo, esta oferta fue considerada insuficiente por los maquinistas y hasta el momento no se logró acercar posiciones.
Pero una vez confirmado el levantamiento del paro, se abren nuevas insancias de negociación.
El Secretario de Transporte de la Nación, Franco Mogetta ,explicó que la reunión fue convocada por Francos, quien desde el fin de semana está “ocupándose del asunto”.
Más allá del salario, la emergencia ferroviaria
«La reunión ha sido en muy buenos términos. La Fraternidad tenía anunciada una medida de fuerza para el día de mañana. Lo que nos comunicó el secretario general del sindicato es que va a consultar a los cuerpos orgánicos con el fin de lograr una tregua en la negociación, para tratar todos los temas que hacen a la emergencia del sector y que van más allá de lo salarial«, señaló Mogetta.
En ese marco, se espera la comunicación oficial de La Fraternidad indicando la restauración del servicio normal.
«Este diálogo con La Fraternidad, y el resto de los sindicatos, es mucho más amplio que lo salarial, y tiene que ver con la necesidad de reordenamiento del sistema», detalló el secretario.
“Prácticamente está terminado el proyecto de decreto declarando la Emergencia del sector. El decreto le estará llegando en la brevedad al Presidente para su firma”, completó Mogetta.
La Emergencia Ferroviaria implica la reorganización del sistema, optimizar los recursos de las empresas, tanto económicos como en la dotación de personal, agilizando los procesos administrativos de compras y contrataciones para poder llevar a cabo el mantenimiento y las obras necesarias para el mejoramiento de la seguridad operativa para todos los usuarios.
El recorte del presupuesto
La Fraternidad, además de abordar el conflicto salarial, denunció un recorte del 59% en el presupuesto ferroviario.
El gremio también destacó la dificultad para adquirir insumos básicos que garanticen el funcionamiento adecuado de las distintas líneas que operan en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).
«No hay una inversión ni una política para el modo ferroviario. Nos vemos obligados a trabajar sin insumos, en ocasiones improvisando soluciones temporales para mantener en funcionamiento los trenes«, había expresado Maturano luego del choque de trenes en Palermo, el 10 de mayo en la línea San Martín.