Pese al entusiasmo que había generado en 2021 el primer pozo de exploración en El Tordillo, los resultados finalmente fueron negativos. El shale oil de la provincia no sería rentable.
La exploración en la formación D-129, que se esperaba que pudiera convertirse en la Vaca Muerta de Chubut, arrojó resultados negativos y el sueño de una formación no convencional que diera nuevo impulso a la producción de hidrocarburos provincial quedó por el momento en stand by.
Los trabajos de exploración en esa zona habían comenzado en 2021 cuando se realizó el primer pozo en el bloque El Tordillo.
Allí los ingenieros de la empresa Tecpetrol se habían mostrado muy entusiasmados con los primeros resultados obtenidos porque el pozo en el que se hizo una sola fractura había arrojado altos caudales de petróleo liviano, de un clásico shale oil como el que puede encontrarse en Vaca Muerta, en la vecina provincia de Neuquén.
Sin embargo, el pozo terminó siendo bautizado como “El Oso”, por los numerosos “amagues” que realizaba. Es que por momentos arrojaba una muy buena producción de shale oil y en otros solo arrojaba agua.
El declino del peso de Chubut en la producción hidrocarburífera del país se hace cada vez más notorio conforme avanza el desarrollo de Vaca Muerta en Neuquén.
Frente a este escenario y con el propósito de despejar las dudas que ofrecía esa primera perforación que ofrecía un buen caudal de producción con fuertes intermitencias, la compañía se lanzó a realizar un pozo con una rama lateral.
Ahora el ministro de Hidrocarburos de Chubut, Martín Cerdá, reconoció que los resultados obtenidos no fueron los esperados.
“Los hallazgos que hubo llevaron a la operadora a hacer un pozo con una rama horizontal como para profundizar los estudios sobre esa roca generadora, pero los resultados no fueron buenos”, confío Cerdá en declaraciones a Diario Río Negro.
Y explicó que desde el gobierno provincial aguardan conocer las conclusiones finales de parte de la operadora para conocer su balance, “si realmente amerita hacer un intento más o directamente se desestima”.
Cerdá recordó que a partir del primer hallazgo de hidrocarburos shale “se había generado una expectativa, pero cuando fueron a explorar más en profundidad los resultados no fueron tan positivos”.
El pozo en cuestión contó en este caso con una rama horizontal de 500 metros de extensión que se adentró en la roca generadora, D-129, pero que según marcó Cerdá, “al estimular no generó el hidrocarburo esperado”.
Es que un punto no menor a tener en cuenta es el costo más alto de realizar un pozo de este tipo en Chubut, en donde no se cuenta con los equipos especiales que están concentrados en Neuquén y el acceso al agua para las fracturas es también más dificultoso.
Esto hace que, si bien un pozo puede arrojar producción shale, no implica que tenga potencial comercial, ya que termina siendo más costoso traer a superficie esa producción que el resultado de su venta. Este es el punto que se espera sea definido en el informe final de la operadora.
El petróleo convencional, desplazado por Vaca Muerta
Chubut fue tradicionalmente la principal productora de crudo de país, hasta el año 2019, cuando fue desplazada de ese puesto por el shale oil de Vaca Muerta. La provincia que enarbola el Escalante como bandera logró sin embargo mantener en 2022 no solo estable su producción -tuvo una caída de solo el 1,48% en comparación con noviembre de 2021- sino que marca un fuerte combate al declino del convencional.
Sin embargo, su lugar en la producción de hidrocarburos a nivel nacional cae a la par del desarrollo de Vaca Muerta.
En 2022, los datos oficiales de producción de hidrocarburos de Argentina muestran el notable crecimiento que Vaca Muerta tuvo en los últimos años y que permitieron que al cierre del año pasado no solo haya llegado una producción récord de casi 280.000 barriles de petróleo por día, sino que con ese volumen ya duplicó las extracciones que tuvo la que supo ser por largos años la principal provincia productora del país: Chubut.
La producción de Vaca Muerta sigue en alza y esta diferencia se sigue ampliando.