El gobierno provincial incrementó el gravamen a un insumo clave para la fractura hidráulica en el shale neuquino. La medida busca compensar el impacto de los camiones en las rutas y moderar la carga imositiva sobre otras actividades menos rentables, como la construcción.
La gobernación de Entre Ríos oficializó la actualización de la Guía de Tránsito de Minerales, conocida como “guía minera”, que se aplica al transporte de arena y otros minerales extraídos en las cuencas de los ríos Paraná y Uruguay.
El Decreto Nº 1136, publicado a fines de mayo, fijó un valor de $2.250 por tonelada para la arena silícea destinada a la estimulación hidráulica de pozos en Vaca Muerta.
Actualmente, Entre Ríos abastece más del 80% de la demanda nacional, y se perfila como la fuente principal para los próximos años.
Cada camión transporta unas 33 toneladas, lo que implica un pago de aproximadamente $74.000 por viaje, seis veces superior al monto vigente hasta abril.
Este incremento responde a que la cifra anterior se había mantenido congelada durante años, pese a la alta inflación registrada entre 2019 y 2023, bajo la administración del exgobernador Gustavo Bordet.
Al mismo tiempo, la normativa impulsada por la actual gestión de Rogelio Frigerio contempló una reducción del impuesto para sectores con menores márgenes de rentabilidad, como la construcción, equilibrando la carga impositiva según la actividad económica.
La “guía minera”: un tributo con historia
La Guía de Tránsito de Minerales es un viejo impuesto provincial que se cobra sobre el transporte de arena, piedras, ripio, tierra, arcilla y otros minerales. Tradicionalmente se aplicaba a arenas para la industria del vidrio y la construcción.
Con el crecimiento de Vaca Muerta, que requiere grandes volúmenes de arena silícea para las fracturas hidráulicas en los pozos, el gravamen pasó a impactar también en los envíos hacia Neuquén.
El tributo se abona tanto por la extracción y comercialización como por el transporte de los minerales, y los camiones están obligados a pagarlo para certificar la carga.
Frigerio señaló que, a través de la guía minera, Entre Ríos recauda fondos para obras de mantenimiento de rutas provinciales. Además, el Decreto 1136 avanza en la digitalización administrativa del tributo, agilizando su cobro y simplificando los trámites para las empresas.
La arena de fractura en Vaca Muerta
En los reservorios no convencionales de Vaca Muerta, la extracción de hidrocarburos requiere técnicas de estimulación hidráulica. Durante la etapa bombeada, se inyecta un gran volumen de fluido y arena a alta presión para fracturar la roca y liberar los hidrocarburos atrapados.
Algunas operadoras utilizan arena proveniente de Entre Ríos, mientras que otras recurren a materiales de zonas cercanas a los yacimientos, como Río Negro, Neuquén y Chubut. También existen compañías que combinan ambos orígenes.

Actualmente, Vaca Muerta cuenta con 13 sets activos y realiza un promedio de 2.000 etapas de fractura mensuales, cada una de las cuales requiere aproximadamente 230 toneladas de arena. Esto lleva el consumo mensual a más de 460.000 toneladas.
Impacto sobre las rutas y negociaciones con las petroleras
El aumento del gravamen busca compensar el deterioro de rutas provinciales y nacionales provocado por el transporte pesado de arena.
Entre Ríos se consolidó como el principal polo de abastecimiento de arena de fractura para Vaca Muerta, con un notable incremento del tránsito desde la salida de la pandemia.
El gobierno provincial exploró alternativas con las petroleras para que los privados financien parte del mantenimiento vial, pero las negociaciones no prosperaron.
Según fuentes locales, las empresas consideran demasiado riesgoso cerrar acuerdos específicos con la provincia ante la posibilidad de que medidas similares se extiendan a nivel nacional.
Las ventajas de la arena de Entre Ríos
Técnicos y especialistas señalan que la arena de Neuquén, por caso, presenta un mayor contenido de impurezas y arcilla, lo que requiere procesos adicionales de lavado y tratamiento para cumplir con los estándares que exigen las petroleras. Estos procedimientos incrementan costos y pueden afectar la eficiencia de las operaciones.
Un estudio realizado por YPF detectó que las reservas de arena en Río Negro sufren pérdidas cercanas al 20% en su volumen útil, lo que reduce su rendimiento para el uso no convencional.
Por otro lado, la arena de Entre Ríos, especialmente la extraída en Ibicuy y Diamante, posee características superiores: mayor pureza y una forma esférica que facilita su desempeño en la fractura hidráulica.
Por estas razones, actualmente abastece más del 80% de la demanda nacional, y se perfila como la fuente principal para los próximos años.