La licitacion quedó en suspenso y los plazos para evitar la falta de gas en siete provincias del Norte durante el próximo invierno se agotan. El rol clave de Brasil.
Mientras que la Secretaría de Energía atraviesa un período de transición que parecería prolongar los plazos, la licitación para la Reversión del Gasoducto Norte aún no tiene definiciones. El problema es que la obra debe estar finalizada en menos de 10 meses para garantizar el abastecimiento de gas en el centro y norte del país durante el inverno de 2024.
La semana pasada las salientes autoridades de la cartera se reunieron con el equipo de Eduardo Rodríguez Chirillo, donde se abordó esta cuestión, pero desde el entorno libertario aún no dieron indicios de si se continuará con el proyecto o su futuro dependerá de los privados. En ese contexto, se empezaron a analizar distintas opciones para asegurar el suministro de gas.
Entre las alternativas, se destaca la posibilidad de realizar un intercambio con Brasil utilizando las plantas de regasificación de Excelerate Energy, proveedora global de soluciones energéticas.
La propuesta fue presentada por la gerente General de la firma en la Argentina y vicepresidente para LATAM, Gabriela Aguilar, durante un panel llevado a cabo en el Energy Day organizado por EconoJournal.
La posibilidad de proceder con la alternativa de un swap de gas con Brasil se basa en un acuerdo entre gobiernos.
Allí, la directiva puntualizó que es una chance concreta llegar a un acuerdo de swap con el gigante del Mercosur para que Petrobras libere volúmenes de gas al mercado argentino durante el próximo invierno. Para ello, se emplearían las instalaciones de Excelerate.
“Podemos utilizar esas terminales que hoy están conectadas para proveer gas flexible y dar suministro al norte argentino”, explicó Aguilar.
De todas maneras, la posibilidad de proceder con esta alternativa se basa en un acuerdo entre gobiernos, tanto con el de Bolivia como con el de Brasil, por lo que los lazos diplomáticos que extienda el nuevo gobierno serán determinantes. “El factor fundamental es volver a tener un diálogo con el gobierno de Bolivia”, sostuvo en ese sentido la gerente.
La urgencia de una Reversión del Gasoducto Norte
Ante el crecimiento de la infraestructura de transporte de gas en la Argentina y el declive de la producción boliviana, la nación vecina anunció redcientemente el cese de las exportaciones de gas a la Argentina.
Si bien la inauguración del Gasoducto Néstor Kirchner amplió la capacidad en 11 millones de metros cúbicos y permite el autoabastecimiento, el flujo del Gasoducto Norte se dirige hacia el sur y hoy no es apto para llevar la producción de Vaca Muerta a la región norte.
Por ello es fundamental la concreción de la obra. Sin embargo, la llegada de un nuevo gobierno que tiene como prioridad reducir a cero la obra pública y el financiamiento del Estado, podría poner un freno al proyecto.
Al respecto, Pablo Brottier, director ejecutivo de la constructora Sacde, señaló que lo mejor es continuar con la licitación “porque la pérdida de no tener ese gas de Vaca Muerta yendo al norte puede ser millonaria; algunos dicen de hasta 2.000 millones de dólares en una única temporada”.
En sinotnía, Carlos Mundin, director de BTU, que participó en el tendido del Néstor Kirchner, aseguró que se debe tomar una decisión sobre el Gasoducto Norte en el primer día del próximo gobierno.
“Desde las empresas constructoras argentinas llevamos mucho tiempo ejecutando proyectos y el valor agregado que podemos dar es bajar el riesgo de construcción, el mejor ejemplo es el éxito que se tuvo con la construcción del Gasoducto Néstor Kirchner”, señaló.
Por último, Gerardo Zmijak, director comercial de Trafigura, apuntó que el panorama de la infraestructura es prometedor si hay un ordenamiento de precios.
”Si las compañías acompañan siendo flexibles, adaptándose a lo que el cliente necesita, ganándole a los tiempos y tomando riesgo, serán útiles para transformar el optimismo en realidad”, analizó.