El Papu Mar fue izado y remolcado sin incidentes, en una operación iniciada el 22 de mayo y se completó en sólo 7 días, pese al clima adverso. Cómo fue el naufragio con 9 tripulantes a bordo.

El buque empujador Papu Mar, que permaneció más de un mes hundido en el kilómetro 77 de la Vía Navegable Troncal de la Hidrovía, fue reflotado y trasladado con éxito al Puerto de Buenos Aires. La embarcación de bandera paraguaya había naufragado el 18 de abril de 2025 mientras navegaba en convoy junto a la barcaza 240-4, también paraguaya, en el Canal Punta Indio.  

La maniobra estuvo a cargo de las firmas especializadas Servimagnus y Raúl Negro Salvamento, que desplegaron una operación técnica compleja con resultados positivos, sin afectar al medio ambiente ni interrumpir el tránsito fluvial en la zona.

El naufragio en la Hidrovía

De acuerdo a lo informado por Prefectura Naval, el accidente se dio luego de un ingreso repentino de agua que obligó a los nueve tripulantes del remolcador a evacuar la nave y refugiarse en la barcaza. Una vez allí, fueron rescatados por personal de las autoridades fluviales y trasladados al Puerto La Plata.

El reflotamiento en el Canal PUnta Indio, en el kilómetro 77 de la Hidrovía, se concretó en un lapso de apenas siete días.

Con la situación estabilizada, se realizaron los estudios pertinentes y se contactaron con las empresas rescatistas. El proceso previo tomó cerca de dos semanas, hasta que el 22 de mayo comenzaron las tareas en el lugar.

El reflotamiento se concretó en un lapso de apenas siete días, a pesar de las condiciones meteorológicas desfavorables y del entorno desafiante del lecho fluvial.

Para ello, fue clave la intervención de la grúa flotante Magnus VI, que elevó el casco del Papu Mar, mientras el remolcador VB Recoleta permanecía en las inmediaciones para asistir durante el izado y el posterior traslado.

“Tal lo previsto, no se generaron afectaciones al medio ambiente ni a la seguridad de la navegación, cumpliendo con todos los protocolos y estándares del sector”, destacaron fuentes cercanas a la operación.

La maniobra también fue supervisada por autoridades de la Prefectura Naval, que previamente habían aprobado el Plan de Salvamento presentado por las empresas actuantes.

El operativo: equipamiento especial, buzos y bombas de achique

El equipo técnico de Servimagnus tuvo a su cargo la dirección general del operativo y proveyó los equipos de mayor porte, mientras que Raúl Negro Salvamento se encargó del suministro de buzos profesionales, sistemas de achique, y del diseño del procedimiento para reflotar el buque. Esta última firma también asumirá el traslado del Papu Mar desde Buenos Aires hasta el puerto de Escobar.

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La operación requirió un alto grado de planificación técnica y una coordinación precisa.

Durante las tareas preliminares, se evaluó el estado del casco y las posibilidades de estabilización. Posteriormente, se inició el proceso de vaciado del agua acumulada en las bodegas mediante bombas especiales, antes de proceder al izado controlado de la estructura metálica. Una vez a flote, el empujador fue asegurado para su remolque sin contratiempos hasta destino.

La barcaza 240-4, que continuó unida al empujador durante y después del siniestro, transportaba 153 contenedores al momento del incidente.

No se reportaron pérdidas de carga, y su estructura no presentó signos de daño tras el evento, por lo que pudo retomar operaciones de forma regular, según confirmaron autoridades paraguayas. Este tipo de operaciones de salvamento requieren una articulación precisa entre sectores públicos y privados del ámbito fluvial, además de recursos técnicos y humanos altamente especializados.

En este caso, la rapidez de respuesta fue considerada destacable, dado que el reflotamiento de un buque hundido en aguas interiores suele demandar plazos más extensos.

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