La obra ya registra un 60% de avance en Mendoza. Una vez finalizada, el complejo cumplirá con las nuevas especificaciones internacionales para reducir la huella de carbono.
YPF avanza con la modernización de su complejo mendocino con el objetivo de producir combustibles con menor contenido de azufre y así mitigar la huella de carbono. De acuerdo a estimaciones de la compañía, las mejoras en la Refinería de Luján de Cuyo están completadas en un 60%.
La semana pasada, se dio un paso importante con la instalación de módulos de proceso que formarán parte de las nuevas plantas. Se trata de equipos de entre 24 y 30 metros de largo, 7,5 metros de ancho y 5 metros de alto que requirieron una operación logística de 10 días para ser movilizados.
La refinería podrá incrementar la capacidad de producción y abastecimiento de Infinia Diesel en todo el país.
Las enormes estructuras metálicas fueron construidas por AESA y arribaron provenientes de Canning, Buenos Aires.
Están compuestas de tuberías de diversos diámetros y materiales, válvulas y accesorios de piping como así también bandejas para tendido de cables de electricidad e instrumentos.
Su incorporación al complejo se enmarca en el proyecto de Nuevas Especificaciones de Combustibles (NEC) que permitirá a la refinería de Luján de Cuyo producir combustibles de manera menos contaminante.
Esta iniciativa representa una inversión que supera los 600 millones de dólares, lo que constituye una de los mayores desarrollos de la firma en los últimos 40 años.
Además, involucra mano de obra directa para aproximadamente 500 personas y un importante desarrollo de pymes locales. Según el cronograma ideal de YPF, se espera que la obra esté finalizada antes de mediados de 2025.
Una vez optimizada, la refinería podrá incrementar la capacidad de producción y abastecimiento de Infinia Diesel en todo el país. Además, pasará de 50 partes por millón (ppm) de azufre en el proceso de gasoil a 10 ppm de azufre.
De ese modo, se espera un impacto ambiental positivo en las operaciones al disminuir las emisiones de CO2 en la combustión de vehículos. La inciativa contempla la instalación de nuevas unidades (HDSII, H2II y SE33), modificación de unidades existentes (HDSI y OSBL) y adecuación de los servicios para abastecer dichas unidades.
Los nuevos hornos de YPF y un desafío logístico
A principio de año, Impsa entregó una parte iprescindible para el Proyecto NEC la Refinería. Se trata de los hornos de proceso tipo «Reactor Feed Heater», cuya función principal es calentar un fluido calefactor que aporta calor en distintos procesos de una planta de tratamiento de hidrocarburos.
Estos modelos están diseñados para producir combustibles con bajo contenido de azufre, más limpios y de mejor calidad, y su instalación enmarcan dentro de las obras de expansión y modernización que YPF está llevando adelante en el complejo.
El traslado de los hornos también demandó una significativa tarea logística que, en este caso, estuvo a cargo de Impsa, a través de su empresa Transapelt inició el sábado el traslado las enormes piezas de estos modelos que alcanzan una altura de 9,7 metros y un peso de 62 toneladas.
El traslado «fue coordinado de manera conjunta entre Transapelt y personal de Gendarmería Nacional, de la Dirección de Tránsito de la Municipalidad de Godoy Cruz, de Tránsito Vial de la Municipalidad de Luján de Cuyo, con Vialidad Provincial y Vialidad Nacional», detalló la empresa.
El operativo estuvo compuesto por un tractor principal con una formación (carretón) de 8 líneas, 2 tractores de apoyo y 1 tractor hidrogrúa. Además, participaron 6 móviles policiales, 2 vehículos guías de Transapelt y 2 hidrogrúas que sirvieron para la remoción y posterior colocación de los carteles pasantes de la ruta nacional 40.
