Un alerta meteorológico que ya lleva varios días y ráfagas que llegan a los 120 km/h obligan a frenar la producción en el yacimiento neuquino. «Nadie recuerda semanas tan feas como éstas», dicen en la formación.

Vaca Muerta registró un nuevo récord, pero en esta oportunidad, para nada alentador. El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) declaró a 19 provincias del país bajo alerta roja, naranja y amarilla por tormentas y vientos, con ráfagas que en algunas zonas pueden alcanzar los 120 kilómetros por hora.

Entre estas provincias se encuentra Neuquén que tiene por estas horas varias rutas intransitables por el temporal de viento que azota a la región, mientras que autoridades de distintos niveles educativos decidieron suspender las clases ante la alerta naranja emitida por el SNM.

De acuerdo con el pronóstico oficial, Neuquén está siendo afectada por vientos del sector oeste con velocidades entre 50 y 75 km/h, y ráfagas que pueden alcanzar los 120 km/h, pudiendo ser superados en forma puntual.

Pese al clima adverso y el leve descenso registrado en octubre en el fraking de Vaca Muerta, la actividad en la formación neuquina sigue en franco crecimiento en términos productivos.

Esta situación afectó de manera directa a la producción en Vaca Muerta.

En las últimas semanas la formacion alcanzó un nuevo récord de los denominados “Tiempos No Productivos” (NPT), que llegaron a su mayor nivel debido a las inclemencias del clima. Es que por estos días se alcanzó el nivel más alto de suspensión de trabajos por las fuertes ráfagas de viento.

En la industria del petróleo y el gas hay muchos trabajos que son de alto riesgo, y es por esto que en el Convenio Colectivo de Trabajo del sector se prevé por ejemplo que los trabajos «de torre», se suspenderán ante un temporal de viento que tenga ráfagas de más de 80 kilómetros por hora.

Para esa razón, en los equipos de torre, es decir en los perforadores, workover y pulling (estos dos últimos son de mantenimiento de pozos), se colocan medidores de viento o dosímetros para medir la incidencia en ese punto exacto.

No convencional, Shale oil, YPF
En los primeros nueve meses del año se conectaron 167 pozos nuevos en Vaca Muerta.

Pero no solo esos trabajos se han visto alterados en las últimas semanas por los temporales de viento. También fueron afectados los trabajos al nivel del suelo, como soldaduras o montaje y construcción de instalaciones debieron ser paralizados ante los riesgos que trabajar con ráfagas de viento extremas imponían.

Desde el mes pasado, las jornadas de viento extremo se multiplicaron en el norte de la Patagonia, llevando a que incluso se hayan emitido varias alertas meteorológicas por viento para una misma semana.

Estas paralizaciones no se notifican oficialmente, ya que se trata en realidad de medidas de seguridad operativa que se deciden ante cada situacion que se presenta sin previo aviso.

A diferencia de otros trabajos en los que, ante los pronósticos de viento, se resuelve la suspensión de actividades, en los campos petroleros las taresa solo se paralizan en los momentos que los medidores del viento así lo indiquen.

Con tres días consecutivos en alerta meteorológica tan solo en esta semana, desde las empresas del sector afirman que, si bien no tienen registros que fehacientemente marquen que se está ante un récord de «Tiempos No Productivos» por viento, «todo indica eso». «Ninguno recordamos semanas tan feas como estas últimas», afirman.

La producción en Vaca Muerta

Pese al clima adverso y al leve descenso registrado en octubre en el fraking de Vaca Muerta, la actividad en la formación neuquina sigue con su crecimiento en términos productivos y registra una notoria recuperación en el segmento no convencional.

En septiembre -un mes de altos registros-, se conectaron 28 nuevos pozos, cifra que representó el segundo récord histórico tras la baja en la actividad que se había dado durante todo el segundo trimestre del año.

Los datos se desprenden de un informe de la consultora Economía & Energía, que indica un repunte progresivo en el segmento año a año.

En los primeros nueve meses del 2023, en Vaca Muerta se conectaron 167 pozos, un 20% más que durante el mismo período de 2022 (139). Si se compara con los 77 pozos de enero-septiembre de 2019, el crecimiento es del 117%.

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