Ante el desafío logístico que implicará evacuar una producción que se calcula en hasta 1,5 millones de toneladas anuales, ya se estudia recuperar el servicio en zonas por las que no circula hace años.
El acuerdo alcanzado días atrás para avanzar en la reactivación del yacimiento Potasio Río Colorado ubicado en el departamento de Malargüe promete transformarse en un fuerte impulso para la actividad minera en Mendoza y se estima que podría traer aparejado nuevos proyectos, como, por ejemplo, la reactivación del tren de carga en esa zona del país.
La inversión de 1.000 millones de dólares anunciada permitirá producir 1,5 millones de toneladas anuales de cloruro de potasio, que es utilizado principalmente para la elaboración de fertilizantes destinados al sector agrícola. Semejantes niveles de producción plantean a su vez un nuevo desafío, esta vez a nivel logístico.
La mayor parte de la producción tendrá por destino la exportación a Brasilm por lo que se comienza a especular ahora cómo llegará el potasio a los puertos del Atlántico.
Trasladar 1,5 millones de toneladas de potasio anuales desde Malagüe implica la necesidad de mover, en promedio, más de 4.000 toneladas diarias
Aunque aún no está definido el detalle del proyecto de construcción, para llevar el mineral hasta el Atlántico se estima que se podría utilizar un sistema mixto de camiones y tren.
Por eso, sólo la puesta en marcha de toda la logística e infraestructura para el traslado del mineral implicaría (si es que se confirma el trazado que se está analizando) avanzar en la reactivación del tren de carga entre el sur y el este de Mendoza.
Cómo sería el recorrido del tren de carga
Trasladar 1,5 millones de toneladas de potasio anuales desde del departamento de Malagüe implica la necesidad de mover, en promedio, más de 4.000 toneladas diarias.
Hacerlo únicamente en camiones significaría costos muy altos. Por esta razón se está pensando en la posibilidad de utilizar un sistema mixto de camiones que llevarán el mineral a una estación de transferencia para trasladarlo luego en tren.
Mientras más trayecto se pueda cubrir en tren, menores serán los costos logísticos del traslado del cloruro de potasio.
El proyecto original de la minera Vale era de 6 millones de toneladas de producción por año, lo que convertía en fundamental la ecuación económica de la logística.
Para ello se requería de un tren que uniera de manera directa el yacimiento con el puerto de Bahía Blanca. Cuando esa posibilidad quedó en stand by, el proyecto se paralizó.
Así, ahora se estudia la opción de levantar en Malargüe una estación de transferencia para cargar el ferrocarril que -a través de una traza nueva a construir- debería llevar el mineral hasta General Alvear, donde se acoplaría a la traza existente.
Allí el trayecto sigue hasta Las Catitas, en el departamento de Santa Rosa, a través de lo que es la traza del antiguo tren que unía la zona Este con el Sur. Desde Las Catitas el mineral haría el trayecto final hacia el Atlántico.
En el caso del tramo entre Alvear y Las Catitas se recuperaría la traza del ferrocarril que corre en paralelo a la Ruta Provincial 153 y a lo largo de la cual existe una serie de estaciones que hoy están abandonadas y podrían reactivarse beneficiando a su vez a las economías regionales.
La adjudicación del proyecto minero
El gobierno de Mendoza anunció el lunes que la empresa brasilera ARG y la argentina Compañía Minera Aguilar, parte de Integra Capitals, cuyo presidente es el empresario local José Luis Manzano, son las elegidas para la explotación de la mina Potasio Río Colorado (PRC) al sur de la provincia,
“Luego del dictamen de UBS (Unión de Bancos Suizos), quien realizó el proceso internacional de selección de un adjudicatario para PRC, y ya cumplida la presentación de documentación, anunciamos que la empresa brasilera ARG y la argentina Compañía Minera Aguilar son las elegidas”, expresó el lunes el gobernador mendocino, Rodolfo Suárez, en redes sociales.
Según informó el propio gobernador, “el contrato prevé una inversión de US$ 1.000 millones en un plazo de 5 años, con un compromiso de contratación de pymes y mano de obra local”.
La mina paralizada desde el 2013 está ubicada en el paraje Pata Mora, donde existe un depósito de cloruro de sodio y potasio (de 10% a 60%) a una profundidad promedio de 1.000 metros, para lo cual se planificó un presupuesto inicial de US$ 6.300 millones, pero sólo se ejecutó un 30% hasta ser suspendida.
La reactivación actual de aquel proyecto minero prevé, en primera instancia, la puesta en marcha de una planta precomercial que empleará a 60 personas de manera directa, a las que se sumarán los proveedores tercerizados y la mano de obra, los cuales serían de origen local.
Posteriormente se procederá con la construcción de la mina, que demandará cerca de 1.500 empleados durante los cinco años que llevará la obra. Ya iniciado el proceso de producción, se estima que habrá 500 personas trabajando dentro de la instalación.
