De la mano de acuerdos bilaterales con provincias y municipios, la estatal logra reactivar conexiones que habían sido eliminadas por baja ocupación. En paralelo, lanzó descuentos de hasta 20% de cara a la temporada de verano.
Desde hace un año y medio, Aerolíneas Argentinas rearma su cronograma de vuelos para sostener el superávit financiero. En simultáneo, puso en marcha a un esquema denominado Programa de Conectividad Sustentable, cuyo propósito es garantizar la continuidad de rutas aéreas que, debido a la baja demanda o a la marcada estacionalidad, no alcanzan niveles de rentabilidad suficientes.
El modelo busca preservar la conectividad federal en el país, aun en aquellos destinos donde el flujo de pasajeros no asegura un equilibrio económico bajo parámetros comerciales. La sostenibilidad en estos casos se estructura sobre acuerdos bilaterales con gobiernos provinciales o municipios, que asumen un compromiso financiero para hacer viables económicamente las conexiones.
Si la ocupación de los vuelos no alcanza el 80%, los municipios y provincias cubren la diferencia con fondos propios.
La lógica es simple: la aerolínea asegura la prestación del servicio y la contraparte provincial o municipal respalda la operación, minimizando el riesgo de pérdida. Según la compañía, este formato fomenta «la corresponsabilidad en el desarrollo de las rutas y contribuye a optimizar recursos».
El caso más reciente corresponde a Río Cuarto, en la provincia de Córdoba. La ruta que une esa ciudad con Buenos Aires había quedado suspendida en junio por trabajos de refacción en el aeropuerto local y volverá a operar a partir del 1° de noviembre con tres frecuencias semanales.
El convenio tiene vigencia hasta el 31 de marzo de 2026 y establece que, si la ocupación de los vuelos no alcanza el 80%, el municipio cubrirá la diferencia con fondos provinciales. En caso contrario, no se genera desembolso alguno.
El antecedente de Merlo, en San Luis, muestra cómo este esquema puede transformar un vuelo estacional en una operación anual. A través de un acuerdo similar, la localidad logró mantener activa la conexión con la Ciudad de Buenos Aires, promoviendo un flujo constante de pasajeros y evitando la interrupción de un servicio que de otro modo se habría limitado a temporadas de alta.
Aerolíneas Argentinas, con más vuelos y promos para el verano
Además de los acuerdos de conectividad, Aerolíneas Argentinas lanzó beneficios para los pasajeros de cara a la temporada alta. La compañía ofreció un descuento del 20% en todos los vuelos dentro del país, hasta el domingo 5 de octubre y sin restricciones de fechas de viaje. La promoción está disponible en los canales habituales de venta, como la web oficial, la aplicación móvil y agencias de viaje.
La empresa puso en marcha planes de financiación con bancos de alcance nacional y regional. Desde fines de septiembre hasta inicios de octubre, se habilitaron compras en hasta seis cuotas sin interés con entidades como BBVA, Galicia, Macro y Santander.
También se sumaron opciones de 9 y 12 cuotas con bancos provinciales, con el objetivo de ampliar el acceso a los pasajes en un contexto de demanda estacional creciente.
La programación de vuelos para el verano contempla un incremento en la oferta doméstica. Entre las rutas de mayor frecuencia figuran 69 vuelos semanales a Córdoba, 63 a Bariloche, 60 a Mendoza y 51 a Ushuaia. También se reforzarán conexiones hacia Iguazú, El Calafate, Salta, Tucumán y Mar del Plata, además de incrementar frecuencias a destinos como Comodoro Rivadavia, Neuquén, Rosario, Jujuy, Bahía Blanca y Trelew.
El plan incluye además rutas intertramos, que permiten viajar dentro del país sin necesidad de pasar por Buenos Aires. Entre ellas se encuentran Ushuaia–El Calafate, Bariloche–El Calafate, Tucumán–Mar del Plata, Córdoba–Tucumán y Salta–Iguazú, junto a nuevas conexiones como Córdoba–Mendoza, Córdoba–Jujuy y Mar del Plata–Rosario.
En el plano internacional, la compañía anunció la apertura de nuevas rutas de temporada. A partir de enero estarán disponibles vuelos a Buzios–Cabo Frío, con partidas desde Aeroparque y Rosario, y a Aruba, con conexiones desde Buenos Aires, Córdoba y Mendoza.
Estos servicios, previstos hasta fines del verano, se suman al refuerzo de frecuencias hacia los principales destinos turísticos de Brasil y el Caribe, ampliando el alcance de la aerolínea en la región.