La operación se formalizó tras un acuerdo con YPF, que sigue reorganizando sus activos convencionales. La compañía amplía su presencia en la cuenca con la incorporación de un área clave para la provincia.
Petróleos Sudamericanos concretó la adquisición del clúster Señal Picada – Punta Barda, un bloque estratégico ubicado entre las provincias de Río Negro y Neuquén, cuya cesión fue formalizada tras un acuerdo con YPF. La transacción se enmarca en el Plan Andes de firma estatal que se desprende de sus campos maduros.
La operación representa un movimiento clave en el reposicionamiento de activos convencionales dentro de la región. El área adquirida, que fue objeto de numerosas disputas durante el último año, concentra cerca del 70% de la producción petrolera de Río Negro y figura entre los yacimientos marginales más relevantes de la cuenca.
YPF también le transfirió a Petróleos Sudamericanos seis concesiones en Mendoza Norte.
Para Petróleos Sudamericanos el foco operativo se centra en técnicas de recuperación primaria y secundaria. “Nuestro modelo de negocio se apoya en la eficiencia operativa y en la valorización de yacimientos que han sido despriorizados por grandes operadoras”, señalan desde la compañía que ya cuenta con ocho áreas de explotación en zona.
Por su parte, YPF avanza a paso firme en su plan de salida mediante el que ya transfirió 11 bloques y mantiene en marcha la cesión de otros 39, distribuidos entre Santa Cruz, Tierra del Fuego y otras provincias productoras.
Un área estratégica
El bloque Señal Picada – Punta Barda no solo es significativo por su volumen de producción, sino también por las condiciones técnicas que presenta. Se trata de un conjunto de campos maduros con infraestructura ya desarrollada, lo que permite una rápida integración a la estructura operativa de Petróleos Sudamericanos.
La empresa ha iniciado tareas de reacondicionamiento de pozos y obras de infraestructura tanto en esta área como en otras zonas donde ya tiene presencia, en línea con su estrategia de optimización de costos. El yacimiento representa cerca del 70% de la producción petrolera de Río Negro.
Durante el primer trimestre de 2025, logró sostener su nivel de actividad e incluso concretar la exportación del 100% del petróleo producido en ese período.
“Acceder a precios internacionales mejora la rentabilidad y permite reinvertir con mayor previsibilidad”, indicó Petróleos Sudamericanos en su presentación ante la Comisión Nacional de Valores.
La extensión por diez años de las concesiones en Río Negro, aprobada por la legislatura provincial, constituye otro factor clave para el fortalecimiento de la operadora.
Esta renovación no solo garantiza un horizonte temporal más amplio para planificar inversiones, sino que también consolida su posicionamiento como actor relevante en la cuenca.
La empresa señaló que “este respaldo institucional es fundamental para continuar desarrollando proyectos con estándares ambientales y técnicos adecuados”.
La expansión de Petróleos Sudamericanos
A principios de abril, YPF también le transfirió a la compañía seis concesiones en Mendoza Norte, ampliando así su cartera de activos en otra provincia productiva.
Estas áreas —Barrancas, Mesa Verde, Vizcacheras, Río Tunuyán, La Ventana y Ceferino— representan un refuerzo considerable para las reservas y operaciones de Petróleos Sudamericanos, que ya evalúa estrategias para reactivar la productividad en esos bloques mediante su esquema habitual de trabajo.
El plan de expansión de la empresa contempla además explorar oportunidades en el segmento de energías renovables, como parte de un enfoque de diversificación que busca reducir la exposición a la volatilidad de los hidrocarburos. Si bien los desafíos económicos locales persisten, la compañía apuesta a una mejora en la competitividad del crudo argentino a través de infraestructuras clave como el Gasoducto Vaca Muerta Sur y la ampliación de los oleoductos del Valle.
