La infraestructura de transmisión existente le permite a la provincia incorporar nuevos proyectos. Además de elevar la capacidad renovable y reducir emisiones, tendrán impacto en el empleo y la economía regional .
Formosa avanza con un plan de parques solares distribuidos en ocho localidades que demandará más de USD 192 millones de inversión privada y aportará 217 MW de potencia instalada.
Se trata de un conjunto de iniciativas que diversifican la matriz energética y fortalecen la oferta eléctrica en la provincia el Noreste del país.
La infraestructura de transmisión existente, con estaciones transformadoras de 500 kV y 132 kV, constituye un elemento clave para la radicación de los proyectos. Este marco técnico permite que dos compañías de peso en el sector se consoliden como protagonistas del nuevo capítulo energético en la provincia: MSU Green Energy y Ambientes y Energía SAS.
Según datos de CAMMESA al primer trimestre de 2025, la energía solar representa aproximadamente el 3,1% de la capacidad instalada del país, con un total cercano a los 2.000 MW al considerar tanto grandes parques como generación distribuida.
MSU Green Energy lidera con dos desarrollos ya avanzados. Por un lado, el Parque Solar Las Lomitas (22 MW), en fase de construcción, y por otro el Parque Solar Ingeniero Juárez (15 MW), que ya se encuentra operativo. En conjunto, suman 37 MW de potencia.
Las instalaciones ocupan 80 hectáreas y reúnen más de 63.000 paneles fotovoltaicos. Según la empresa, estos parques permitirán reducir más de 43.000 toneladas de CO₂ anuales y abastecer energía renovable a más de 33.000 hogares.
“Revolucionamos los pueblos donde construimos estos parques, movilizando la economía local y promoviendo el desarrollo”, señaló Juan Pablo Martínez, gerente de energía renovable de la compañía.
Megaproyecto en tres localidades
La segunda gran apuesta corresponde a Ambientes y Energía SAS, que impulsa un proyecto solar de 80 MW en Laguna Blanca, Ibarreta y Pirané. La inversión estimada alcanza los USD 67 millones.
Los parques ya fueron licitados y adjudicados, y resta la autorización de CAMMESA para iniciar las obras. Una vez operativos, constituirán uno de los polos solares más relevantes del noreste argentino.
Formosa, con más parques en carpeta
Además de los parques en marcha, existen iniciativas proyectadas en Formosa capital, Clorinda y Güemes, que en conjunto aportarán otros 100 MW de potencia renovable. Para seleccionar la empresa a cargo de estos desarrollos, está prevista una licitación para los próximos días.

Con estas ampliaciones, la provincia alcanzará una capacidad solar instalada total cercana a los 217 MW, consolidándose como un actor emergente en el mapa energético nacional.
La instalación de parques solares en diferentes localidades de Formosa genera efectos que van más allá del suministro eléctrico. Durante las etapas de construcción y operación se multiplican las oportunidades de empleo y se dinamiza la economía regional, especialmente a través de proveedores de insumos y servicios.
El desarrollo energético también significa un alivio para comunidades que enfrentan limitaciones en la provisión de energía, ofreciendo mayor estabilidad y confiabilidad en el suministro.
Energía solar en la matriz argentina
Desde la sanción de la Ley 27.191 en 2015, que fijó como meta alcanzar un 20% de renovables en la matriz eléctrica para 2025, el sector fotovoltaico en Argentina mostró un crecimiento constante.
Según datos de CAMMESA al primer trimestre de 2025, la energía solar representa aproximadamente el 3,1% de la capacidad instalada del país, con un total cercano a los 2.000 MW al considerar tanto grandes parques como generación distribuida.
Las provincias con mayor avance en proyectos solares a gran escala son San Juan y Jujuy, principalmente por sus altos índices de radiación. Marcelo Alvarez, coordinador del Comité Solar FV y miembro de la Comisión Directiva de la Cámara Argentina de Energías Renovables (CADER), proyecta que durante 2025 la capacidad se incrementará en un 50%.
De cara a 2030, se espera que la energía solar alcance los 3.096 MW de capacidad instalada, priorizando aquellos proyectos con despacho asegurado.
A pesar del crecimiento, el desarrollo de la energía solar en Argentina todavía enfrenta obstáculos. Entre ellos, la falta de financiamiento accesible, la insuficiencia en infraestructura de transmisión y la inestabilidad macroeconómica, factores que limitan la expansión de proyectos de gran escala.