La licitación fue lanzada el año pasado e incluye la puesta en valor de una estación de la Línea A, otra de la B y dos de la D, todas declaradas patrimonio histórico. Para el inicio de los trabajos sólo falta un OK formal.
Luego de algunas demoras y dudas, finalmente se reactiva el plan de obras en estaciones del subte porteño.
Subterráneos de Buenos Aires (SBASE) emitió un dictamen preliminar para la adjudicación de las obras de mejora en cuatro estaciones de subte, que apuntan a reparar y optimizar infraestructura clave.
Este dictamen será presentado al Directorio de SBASE, que decidirá formalmente sobre la adjudicación de los contratos en los próximos días. Desde la firma apuntan a reactivar el plan de mejora anunciado en 2022, que incluía la renovación de 20 estaciones de la red.
En este tramo, las tareas se realizarán en las estciones de Lima (línea A), Pueyrredón (línea B), Scalabrini Ortiz (línea D) y Palermo (línea D).
Dado que todas las estaciones mencionadas son Monumento Histórico Nacional (MHN), cualquier intervención deberá preservar sus características patrimoniales.
Las cuatro estaciones mencionadas formaban parte del último grupo que nunca llegó a ser adjudicado.
El plan original quedó trunco poco después de su inicio, completándose solo la primera fase que abarcó refacciones en Castro Barros y Acoyte de la línea A, General San Martín de la línea C, Bulnes de la línea D, Jujuy de la línea E y Facultad de Medicina de la línea D.
Si no surgen imprevistos, las obras podrían comenzar en pocas semanas.
Los trabajos incluyen impermeabilización y pintura, tratamiento de filtraciones, reparación de pisos, recambio de luminarias, reorganización del tendido eléctrico, actualización de cartelería y la instalación de señalización braille y nuevo mobiliario en los andenes.
Dado que todas las estaciones mencionadas son Monumento Histórico Nacional (MHN), cualquier intervención deberá preservar sus características patrimoniales.
La situación actual de las estaciones de subte
Lima es una de las dos estaciones de la línea A que no se modernizó a finales de los 2000, lo que la hace particularmente notable.
Por otro lado, Scalabrini Ortiz está muy deteriorada debido a filtraciones. Sus murales necesitan restauración, un trabajo que SBASE ha condicionado al progreso de las obras de mejora. Cabe señalar que el presupuesto porteño para este año no contempla partidas para proyectos de envergadura en el subte.
Al margen de la refacción de estaciones y la finalización de los trabajos en la línea D y el Nodo Obelisco, la única inversión más importante es la renovación parcial de la flota de la línea B, que fue recientemente postergada por tercera vez.
Caen los pasajeros en el subte
La Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (Aaeta) comunicó que la venta de pasajes en el subte de Buenos Aires cayó un 23% en junio en comparación con el mismo mes de 2023. La entidad atribuye esta disminución a varios factores: aumentos en las tarifas, caída en la actividad económica, mayor evasión de pasajes y deterioro en la calidad del servicio.
Según Aaeta, el mes pasado se registraron 15.199.797 transacciones en el subte porteño, lo que representa una reducción de 4,6 millones de pasajes en comparación con el mismo período del año anterior. Este es el menor registro desde que la entidad comenzó a realizar este relevamiento en 2013, excluyendo los meses de junio de 2020 y 2021, cuando la movilidad estuvo afectada por las restricciones de la pandemia de Covid-19.
Vale remarcar que desde hace un más de un mes el boleto del subte aumentó a $650, pero está estipulado un nuevo incremento para el mes de agosto, que lo elevará a $757. También están vigentes los descuentos para usuarios frecuentes, lo que implica que el valor de la tarifa disminuye progresivamente una vez superados los 20, 30 o 40 viajes mensuales, los abonos y los pases habituales
