Explicaban que el 90% de sus costos están dolarizados y no podían absorber el impacto de la devaluación, por lo que advertían sobre la paralizacion de sus plantas.
La Secretaría de Energía de la Nación autorizó este miércoles un incremento del 20% en el precio de adquisición de la tonelada de biodiésel destinada a su mezcla con gasoil.
Lo hizo por medio de la Resolución 694/2023 publicada hoy en el Boletín Oficial con la firma de Flavia Royón. Asi, casi duplicó a la suba autorizada (junto con un posterior congelamiento hasta el 31 de octubre próximo) del 12,5% en los combustibles.
Entre los considerandos de la medida se advierte que la modificación se da «en virtud de lo manifestado por las cámaras que nuclean a la mayoría de las empresas elaboradoras de biodiesel respecto del incremento en los costos de elaboración del producto en el marco del contexto macroeconómico actual».
De esta manera, la tonelada de biodiesel que se había fijado para agosto en 361.672 pesos pasó a 434.006 pesos «hasta que un nuevo precio lo reemplace«.
La semana pasada las 27 plantas productoras de biodiésel del país alertaron sobre el riesgo de paralización de la actividad de no mediar una corrección en el precio del insumo que se utiliza para el corte obligatorio en el gasoil.
Con este ajuste, en lo que va del año ya se acumula una suba del 47,4% en el precio del biodiesel.
El precio de este insumo para la producción de diésel era de 307.226 pesos en mayo ( cuando subió un 4,34%); 318.455 pesos en junio (+3,65%); 331.194 pesos (+4%) y 346.098 pesos para julio (+4,5%).
Este mes se cumplió un año desde que el gobierno puso en vigencia el nuevo Marco Regulatorio de Biocombustibles, que regirá hasta 2030 a partir de la Ley 27.640 sancionada en julio de 2022, que dispuso nuevos parámetros de cortes obligatorios de naftas y gasoil, y creó la Comisión Especial para el desarrollo del sector.
El nuevo marco de elaboración, almacenaje, comercialización y mezcla de biocombustibles reemplazó al que rigió durante 15 años, y que permitió un amplio desarrollo del sector en distintas provincias vinculadas con la producción de biodiesel y bioetanol a partir de las distintas materias primas.
El régimen de promoción de la producción y uso de los biocombustibles tendrá vigencia hasta el 31 de diciembre de 2030, y habilita al Poder Ejecutivo nacional extenderlo, por única vez, por cinco años más.
Los reclamos del sector del biodiésel
La decisión del gobierno nacional de devaluar el peso un 22% tras las PASO se sintió con fuerza en toda la estructura productiva del país. Y los productores de biodiésel no fueron ajenos al impacto.
La semana pasada las 27 plantas productoras de biodiésel del país amenazaron con paralizar la actividad de no mediar una corrección en el precio del insumo que se utiliza para el corte obligatorio en el gasoil.
El descontento de los productores fue expresado mediante una carta que llevó la rúbrica de las asociaciones CEPREB, CASFER y CAPBA, y que fue enviada a la Secretaría de Energía de la Nación. En ella, las entidades solicitaban una actualización de los valores debido a la brusca variación del tipo de cambio.
Los empresarios advertían que la situación era sumamente delicada y que con el esquema vigente hasta ayer no podían amortizar los costos de producción, que según explicaban están dolarizados en un 90%.
En ese contexto, las cámaras adelantaban que estaba en juego la continuidad de las empresas y los miles de empleos directos e indirectos relacionados con esa industria.
Una de las principales problemáticas que enfrentan está vinculada con el aumento en el precio del aceite y del metanol, que representan más del 80% de los costos y se pagan con divisas.
En ese sentido, el aumento solicitado por las entidades para hacer frente a la suba era de un mínimo del 24%, solo para poder operar, y un 30% para cubrir el verdadero incremento de los insumos inflados.
Hoy el Gobierno autorizó una suba del 20% y dejó las puertas abiertas a nuevos aumentos en el corto plazo.