El sector de la logística está inmerso en un proceso de cambio que trae aparejados modernos desafíos y rediseña los requisitos para los trabajadores. La transición con el e-commerce y el nuevo perfil de desarrollo profesional.
La logística vive un momento particular, de profundas transformaciones, a partir de dos cambios muy fuertes para la organización del trabajo: la pandemia y el crecimiento del e-commerce, que revolucionaron los procesos, las tareas, y las actividades requeridas en el quehacer de la logística.
No obstante, la escasez de talento es un desafío entre múltiples áreas a nivel global y el sector logístico de Argentina no es la excepción. Un estudio reciente de la empresa de recursos humanos ManpowerGroup reveló que el 76% de las organizaciones tiene problemas para cubrir puestos de trabajo por falta de talento calificado.
Entre éstas aparecen la industria del transporte, logística y automotriz y esta última es la tercera más afectada del país, con un 78% de empleadores que presentan dificultades para encontrar el talento que necesitan.
La falta de profesionales con estas competencias impacta directamente en la capacidad de las empresas logísticas para cumplir con los tiempos de entrega y afecta por igual a las intenciones de las empresas por mantener costos competitivos y ofrecer un servicio de calidad a sus clientes, indicaron fuentes del sector.
Expertos logísticos señalan que las repercusiones de la escasez de talento en el sector logístico son profundas y añaden que la falta de personal capacitado son la principal causa de los mencionados retrasos en las entregas. Aunque también generan aumento de costos, disminución de la calidad del servicio e incluso disrupciones en las cadenas de suministro.
La automatización de procesos, el uso de sistemas de gestión avanzados y la implementación de soluciones de inteligencia artificial y big data son algunas de las tecnologías ya implementadas en el rubro para permitir optimizar la eficiencia operativa. Estas innovaciones no solo aumentan la productividad, sino que también abren nuevas oportunidades de empleo en áreas relacionadas con la tecnología y la innovación, remarcó el texto.
Con un crecimiento exponencial de las ventas online que se mantuvo tras la pandemia, el sector logístico tuvo que adaptarse rápidamente al nuevo escenario y en ese sentido, los principales cambios se registraron en el seguimiento paso a paso y en nuevas redes.
El desarrollo del comercio electrónico se transformó en una parte fundamental del mercado minorista a nivel global y si bien su irrupción se vio acelerada en la pandemia y tuvo un impacto significativo sobre las operaciones logísticas, hasta hoy instaló hábitos de consumo que moldean la realidad del sector.
Todo esto impactó, tanto en las empresas dedicadas a las operaciones logísticas, que se vieron obligadas a desarrollar su contraparte virtual para mantenerse competitivas, como en aquellas minoristas alejadas al rubro, que tuvieron que sumar a sus equipos personal especializado en logística para contar con su ecommerce propio.
La nueva generación de trabajadores en la industria logística
Alejandro Iglesias, Director de Cursos de Academia Fundación Andreani (empresa miembro de CEDOL) y UTN Andreani, señaló a Dinamicarg que “todos estos cambios se soportan con la tecnología como protagonista del gran crecimiento de actividad y de la mayor visibilidad del valor de la logística. El otro factor, que pasó a tener relevancia y centralidad total es el cliente final, para el diseño de cualquier operación o proceso. El cliente está en el centro y cuidamos su experiencia en todo el proceso”, aseveró Iglesias.
La transformación del mercado laboral, en los últimos años, plantea opciones interesantes, ya sea para un cambio de trabajo, o para encarar la primera experiencia laboral, así como también avanzar en la formación de cara al futuro.
La automatización de procesos, el uso de sistemas de gestión avanzados y la implementación de soluciones de inteligencia artificial y big data son algunas de las tecnologías ya implementadas en el rubro para permitir optimizar la eficiencia operativa.
En ese sentido, LinkedIn publicó recientemente una lista de Empleos en Auge en el 2024, que incluye a los 25 puestos que han experimentado un crecimiento sostenido en los últimos cinco años. El análisis proporciona una visión sobre los sectores que ofrecen las mejores oportunidades a largo plazo y sobre el particular, se observa una clara tendencia hacia la demanda de roles altamente especializados
“Actualmente, la oferta universitaria para carreras, cursos y especializaciones en logística, se puede encontrar en todas las universidades del país, en general todas con una gran demanda. Como ejemplo, puedo mencionar que, en marzo de este año, 700 jóvenes eligieron estudiar logística en la UTN.FRBA, iniciando la Tecnicatura Universitaria en Logística”, explica Iglesias.
“Es una señal muy fuerte de lo atractivo que resulta la logística para el desarrollo profesional de los jóvenes. También la Academia Fundación Andreani tiene una propuesta de muy alta calidad junto a la UTN y en su propia plataforma”, especifica.
Todos los estudios señalan que los empleos más demandados requieren un cambio en la formación y en el conjunto de habilidades de los profesionales, ya que se demandan otro tipo de competencias que se adapten a estos nuevos roles.
De hecho, según datos de LinkedIn, las aptitudes requeridas para los puestos de trabajo han cambiado un 25 % desde 2015 y se prevé que cambien al menos un 65 % para 2030 en todo el mundo.
Fuentes del sector, apuntaron que, “en cuanto al rol de las empresas, tienen como responsabilidad ser un lugar para completar lo que no se ofrece generalmente en la universidad. La formación de las personas también se da en las empresas donde uno se desempeña”.
Señalan que se deben cuidar “aspectos técnicos, pero también trabajar y apoyar los desarrollos de los colaboradores con muchas de sus necesidades de habilidades más blandas”.
En ese sentido, Iglesias pone el foco sobre la disparidad de realidades de la logística que implica tener presencia en todo el país, y remarca que “hay todo un equipo trabajando en capacitación y educación dentro de cada empresa, y un proyecto que se estará lanzando próximamente. Dada la enorme población que debemos alcanzar, con muchos colaboradores en todas las plantas y sucursales del país, es necesario desarrollar, formar a formadores, es en lo que estamos trabajando”.
En el sector, consideran que, más allá de las competencias técnicas, se necesita contar con habilidades blandas que permitan, por ejemplo, gestionar y liderar equipos diversos y dinámicos. Habilidades que, al contrario de lo que se pueda pensar, es posible aprender y desarrollar con el tiempo, ofreciendo así la posibilidad de adaptar el perfil empresario a los nuevos roles.
El impacto en el costo final de la logística
Está claro que el nuevo escenario se ha instalado y demanda operaciones logísticas más completas y hoy las empresas se dividen entre las que supieron adaptarse a las nuevas exigencias y lograron ampliar su portafolio de procesos logísticos, las que se encuentran en desarrollo de su presencia digital, y las que por distintas cuestiones quedaron rezagadas y luchan por mantenerse a flote apoyándose en sus operaciones.
Al respecto, sostienen en el sector que, en muchas ocasiones, el costo de envío de lo que se compra por internet, supera al producto en sí, lo que genera una complicación en la comercialización, que impacta directamente en la captación de personal.
Y es, precisamente, el aumento de los costos logísticos, lo que golpea con mayor fuerza al mercado de entrega directa al consumidor final y los rubros de productos de bajo valor agregado, debido a que estos sectores ven reducidas sus ganancias y pierden competitividad frente a productos importados, esto repercute en el cese de actividad y en un mayor riesgo de pérdida de empleos en dichos sectores.
De ahí que la necesidad de personal capacitado, para hacer frente a los nuevos tiempos y establecer un nivel de comercialización adecuado para enfrentar el mercado, destacan los voceros.
En suma, de una manera u otra, es la información, lo que le permite accionar adecuadamente a las empresas, y también es un beneficio para los consumidores, que así pueden jerarquizar cada vez más sus elecciones y contar con más recursos para tomar decisiones.
Históricamente, la logística ha sido la columna vertebral silenciosa del comercio, el motor que impulsa la conexión entre la oferta y la demanda, así, yendo desde las antiguas rutas comerciales hasta las cadenas de suministro globales actuales, la logística ha sido el hilo invisible que une ambas partes.
