Federico Susbielles lamentó que YPF y Petronas hayan elegido Río Negro para la mega inversión y califícó como «acelerada» esa decisión. Aseguró que la ciudad está preparada “para comenzar a trabajar mañana”.
El intendente de Bahía Blanca, Federico Susbielles, se pronunció sobre la reciente decisión de YPF de ubicar la megainversión de la planta de GNL en Punta Colorada, Río Negro, en lugar de la provincia de Buenos Aires, y la definió como “acelerada”.
Recordó que los trabajos en colaboración con la petrolera nacional y Petronas comenzaron en 2017 y «que Bahía Blanca había sido seleccionada en 2022, superando las expectativas de ambas empresas durante estos siete años de esfuerzo», dijo.
«Bahía Blanca hizo todo lo que debía hacer y más. Trabajamos con seriedad y profesionalismo en estos siete años, que atravesaron distintas administraciones, tanto en la Provincia, como en el Municipio y el Puerto», afirmó Susbielles en una conferencia de prensa, alineándose con las declaraciones del gobernador Axel Kicillof.
«El tiempo dirá si esto es solo un daño a Bahía Blanca o para todos los argentinos»
Federico Susbielles, intendente
Susbielles también destacó que, mientras Kicillof promovía un régimen propio de incentivos para inversiones en la provincia de Buenos Aires, Bahía Blanca se había comprometido a adherir al RIGI de la Ley Bases, con el objetivo de asegurar la construcción de la planta de GNL en su puerto.
En cuanto a la decisión de trasladar la inversión a Río Negro, el jefe comunal subrayó que su ciudad está preparada para «comenzar a operar mañana» con la licuefacción y gasificación de los hidrocarburos de Vaca Muerta, gracias a su vasta experiencia.
La planta de GNL en Río Negro
En contraste, la provincia patagónica tendrá que desarrollar una infraestructura completa, “lo que implicará muchos años de trabajo y miles de millones de dólares”, señaló.
El intendente advirtió que esta decisión de YPF no solo afecta a la ciudad que gobierna, sino que también podría tener repercusiones más amplias: «El tiempo dirá si esto es solo un daño a Bahía Blanca o para todos los argentinos», refiriéndose a las posibles demoras en el inicio de los procesos de exportación en el futuro puerto de Punta Colorada, próximo a Sierra Grande, en la provincia patagónica.
Asimismo, lamentó que la discusión se haya «politizado» en lugar de enfocarse en criterios técnicos.
Cuestionó la validez de la consultoría contratada recientemente por YPF para definir la ubicación de la planta de licuefacción de gas, señalando que «no dan los tiempos» entre la recolección de información y la decisión final.
Y añadió: «En Bahía fueron siete años de múltiples estudios técnicos, en profundidad. Ahora hubo una aceleración en la decisión«.
Satisfacción en Neuquén
El mega proyecto de YPF y la malaya Petronas, que contempla una inversión de 40.000 millones de dólares para transportar gas desde Vaca Muerta y licuarlo en el puerto de Punta Colorada, en Río Negro, representa la mayor inversión en la historia de Argentina.
Este ambicioso proyecto tiene como objetivo duplicar la producción de gas natural del país en los próximos años, lo cual requerirá la construcción de nuevos gasoductos.
En este contexto, el ministro de Energía de Neuquén, Gustavo Medele, celebró la decisión de ubicar la planta en Río Negro y destacó el impacto positivo que tendrá en la actividad en Vaca Muerta.
«Es muy positivo tener el proyecto en la mesa. El gas provendrá de Neuquén, y hay que producirlo«, señaló el funcionario.
Medele explicó que este proyecto será un nuevo vector de exportación del gas neuquino y que, para abastecer la planta, la actividad en Neuquén deberá incrementarse significativamente incluso antes de que la planta esté operativa.
«Hacia la madurez del proyecto, equivale prácticamente a la producción que tiene Neuquén hoy en día, con lo cual la actividad debería escalar. Esperamos que cuando el proyecto comience, signifique el inicio de las actividades de construcción de pozos, por lo tanto para Neuquén es un impacto muy positivo», comentó.
Además, Medele destacó la importancia de la colaboración entre los gobernadores de Neuquén y Río Negro, Rolando Figueroa y Alberto Weretilnek, respectivamente, en la ejecución de este proyecto.
«El hecho de que haya dos gobernadores focalizados en este proyecto va a redundar en algo exitoso. La gestión pública va a dar soporte a la gestión privada», concluyó.
