En plena feria judicial, un fallo desestimó las críticas al pliego de la licitación de la Hidrovía y rechazó los argumentos sobre un posible direccionamiento de la licitación para favorecer a una empresa.
El Juzgado de Feria de Primera Instancia en lo Contencioso Administrativo Federal rechazó los cuestionamientos una de las empresas dragadoras globales, Dredging International (DEME) contra la licitación de la Hidrovía, que seguirá su curso.
El fallo destacó que no se advierte presunción de ilegalidad en los pliegos del proceso, como así tampoco la supuesta intención de direccionar la licitación encarada por la recientemente creada Agencia Nacional de Puertos y Navegación para favorecer a una empresa.
El juez Enrique Lavié Pico desestimó el pedido de cautelar que buscaba declarar nulo el proceso licitatorio de la Vía Navegable Troncal. Ahora, la licitación seguirá su curso hacia el próximo paso, que será la presentación de ofertas para el dragado, balizamiento y tecnificación de la Vía.
En su argumentación, el magistrado señaló que la empresa DEME no acreditó la verosimilitud necesaria ni el supuesto daño irreparable que se daría en caso de avanzar el proceso.
“La parte actora no cumplió con la carga de poner en evidencia, de manera circunstanciada, la ilegalidad y arbitrariedad que invoca como fundamento de su pretensión, en forma clara e inequívoca”, destacó.
No se advierte del Pliego de Bases y Condiciones las irregularidades alegadas por la parte actora, como así tampoco la supuesta intención de redireccionar la licitación», dice el fallo.
Además, rechazó que haya evidencia que señale una intención de la Agencia Nacional de Puertos y Navegación, que conduce Iñaki Arreseygor, de direccionar la licitación para favorecer a la actual empresa dragadora.
El juzgado remarcó que “no se advierte del Pliego de Bases y Condiciones las irregularidades alegadas por la parte actora, como así tampoco la supuesta intención de redireccionar la licitación para, en definitiva, favorecer a la empresa que actualmente presta el servicio de dragado de la vía troncal de navegación, como señala en su presentación”.
DEME no acreditó la existencia de una irregularidad que implicara una ilegalidad ni que la continuidad del proceso pudiera generar un daño irreparable.
Así sigue el proceso de licitación de la Hidrovía
En su fallo, Lavié Pico destacó que para poder avanzar con una cautelar la demostración de una acción ilegal –incluso en una etapa judicial temprana- debe ser manifiesta, y que en este caso eso no sucedió.
De tal forma, al no acreditar una presunta ilegalidad o norma que no se cumplió, tampoco aportó pruebas sobre qué daño se generaría en caso que la licitación avance. “Respecto al peligro en la demora que invoca la demandante tampoco se encuentra debidamente acreditada su configuración, toda vez que la empresa actora no ha logrado demostrar el supuesto perjuicio ocasionado de manera concreta y actual”, señala.
La relevancia de la licitación fue otro de los argumentos del magistrado para no interrumpir el proceso: “Máxime, teniendo en consideración que la licitación en cuestión procura asegurar, en definitiva, un adecuado desenvolvimiento de un bien del dominio público y la prestación de un servicio público de la mayor trascendencia y relevancia para la República, como lo es la vía navegable troncal y su apropiado mantenimiento y navegabilidad a través de actividades de dragado y balizamiento, entre muchas otras, garantizando así la continuidad y regularidad de la navegación fluvial interjurisdiccional y el transporte nacional e internacional, en beneficio de la comunidad en general”.
De esta manera, el proceso de licitación anunciado el 19 de noviembre por el jefe de gabinete, Guillermo Francos, continuará sin interrupciones hasta el próximo paso.
La fecha límite para la presentación de ofertas será el 12 de febrero, y ese mismo día se abrirán los sobres para comenzar la evaluación técnica de las propuestas.
Recientemente, el gobierno aseguró que buscará tener la Hidrovía adjudicada a un concesionario privado durante abril.