Son los 29 kilómetros del loop que conecta Tío Pujio con Ferreira, en Córdoba, y que superó con éxito las pruebas técnicas. El proyecto continúa así avanzando a su puesta en funcionamiento, clave para abastecer con gas de Vaca Muerta a 7 provincias del Norte y luego exportar a Brasil.
La obra de Reversión del Gasoducto del Norte alcanzó un nuevo hito significativo que la aproxima a su finalización. Con la exitosa culminación del Gas-In, ya está operativo un tramo de 29 kilómetros del loop que conecta Tío Pujio con Ferreyra, en la provincia de Córdoba.
A pesar de un incidente reciente con una falla durante la prueba hidráulica de los caños, se lograron superar los ensayos necesarias para que quede habilitada esta parte del gasoducto.
El nuevo trazado corre paralelo al Gasoducto Transportadora de Gas del Norte (TGN) y, una vez completadas las diferentes fases y conexiones, permitirá transportar gas desde Vaca Muerta hacia las provincias de Córdoba, Salta, Jujuy, Santiago del Estero, Catamarca, La Rioja y Tucumán.
La reversión del Gasoducto del Norte permitirá al país ahorrar 1.500 millones de dólares anuales en importaciones de gas.
Una vez finalizado el nuevo gasoducto y el loop, se prevé que la red será capaz de transportar 15 millones de metros cúbicos diarios de gas hasta el sur de Salta.
El proyecto es crucial ante el fin de las importaciones de gas desde Bolivia, luego de casi dos décadas de un contrato de provisión que finalmente ha concluído.
El 18 de septiembre, de hecho, los gasoductos argentinos dejaron de recibir el fluido desde el país vecino. La Reversión del Gasoducto del Norte, varias veces demorada y ahora en su etapa fnal, es justamente la obra que permitirá suplir esas importaciones con gas de Vaca Muerta.
Durante la fase de construcción, los equipos técnicos llevaron a cabo 30 cruces importantes, que incluyeron vías ferroviarias y la Ruta Provincial 10. Actualmente, se avanza en los últimos 33 kilómetros necesarios para completar el loop de 62 kilómetros entre Tío Pujio y Ferreyra.
Por otro lado, está a punto de entrar en funcionamiento el Gasoducto de Integración Federal de 36 pulgadas, que conecta La Carlota con Tío Pujio. En esta sección, ya se han completado todos los cruces especiales requeridos para su operatividad.
El nuevo Gasoducto Norte en su etapa final
Hace unos días, la Secretaría de Energía de la Nación anunció a través de su cuenta en la red social X que la obra de Reversión del Gasoducto del Norte ha entrado en su fase final.
Después de varios meses de retraso, Energía Argentina S.A. (Enarsa) retomó el proyecto con urgencia luego del primer trimestre de este 2024, ya que el suministro de gas al norte del país estaba en riesgo debido al inminente vencimiento del contrato con Bolivia, previsto para el 31 de julio de 2024 y luego estirado hasta esta primavera.
Los esfuerzos se enfocaron en relicitar la obra, que la administración anterior había adjudicado en parte. Según informó recientemente el secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo, en los últimos días se completó el cruce del Río Tercero, uno de los puntos más críticos del proyecto.
La reversión del Gasoducto del Norte permitirá a Argentina ahorrar 1.500 millones de dólares anuales en importaciones de gas. Una vez finalizado el nuevo gasoducto y el loop, se prevé que la red será capaz de transportar 15 millones de metros cúbicos diarios de gas hasta el sur de Salta.
Además, tras la reversión de dos plantas compresoras adicionales y la finalización de un segundo loop, la capacidad del sistema se ampliará a 19 millones de metros cúbicos diarios.
Brasil, meta final
Durante su participación el pasado miércoles en la Expo Río Oil & Gas, celebrada en Brasil, el gobernador de Neuquén, Rolando Figueroa, planteó la posibilidad de construir un gasoducto directo que conecte Vaca Muerta con la industria brasileña.
«Estamos contribuyendo a un proceso de sustitución de importaciones muy importante para el país. El horizonte y la mirada con Brasil está», afirmó Figueroa, destacando el potencial de la integración regional. «Trabajando juntos en Latinoamérica, podemos ser una de las grandes potencias mundiales», añadió.
El objetivo estratégico de la industria energética argentina es extender el suministro de shale gas hacia Brasil. Para ello, se están evaluando cinco posibles rutas para llegar al país vecino, muchas de las cuales podrían desarrollarse de manera simultánea.
La opción que genera mayor consenso en el sector es la ruta vía Bolivia, ya que requeriría una inversión relativamente baja.
Sin embargo, la actual etapa de la Reversión del Gasoducto Norte, que permitirá enviar 19 MMm³/d desde Neuquén hacia el NOA, no sería suficiente para abastecer a Brasil, ya que gran parte de ese volumen se destinará al consumo interno de Argentina. De hecho, solo quedaría un excedente de entre 6 y 9 MMm³/d durante los meses de verano.
Por lo tanto, sería necesario avanzar hacia una segunda fase de la reversión, que dependería de financiamiento privado. Esta ampliación incluiría la construcción de nuevos loops y plantas compresoras, lo que permitiría aumentar la capacidad de transporte en otros 10 MMm³/d.