Tras los reclamos de gobernadores y productores, en Energía resolvieron modificar algunos de los artículos de la Ley Ómnibus que más peocupaban al sector. Qué cambia.

Uno de los puntos más resistidos del proyecto de Ley Ómnibus que impulsa el gobierno de Javier Milei es la fuerte desregulación que promueve en el sector de los biocombustibles.

Tras conocerse los detalles de las reformas que promueve el Gobierno para el sector en el mega proyecto que comenzó a ser analizado el martes en la Cámara de Diputados, productores de biocombustibles de Santa Fe habían advertido que, tal como está planteado, el nuevo escenario destruirá miles de puestos de trabajos. E incluso los gobernadores de cinco provincias se reunieron para revisar un tema que los preocupó fuertemente.

Frente al airado reclamo de productores y gobernadores provinciales, ahora el secretario de Energía de la Nación, Eduardo Rodríguez Chirillo, reconoció en Diputados que resolvieron dar marcha atrás con algunos artículos del proyecto de ley que debieron reformularlos tomando en cuenta los reclamos que también surgieron entre diputados de la oposición.

Una de las modificaciones introducidas en la reforma, para evitar la concentración, es la imposibilidad de que ninguna empresa pueda concentrar más del 14% de la demanda interna.

“La propuesta es que el Estado libere el precio y el biodiésel aumente el corte obligatorio de 7% a 10%, para ir creciendo hasta el 15% en el 2026. Eso nos va a alinear con Brasil. En Bioetanol se mantiene el 12% y se aumenta al 18% en tres años para seguir un sendero hasta el 27%”, adelantó Rodríguez Chirillo.

Acerca de los cupos, el secretario de Energía señaló que la intención es que sean sujetos a licitaciones y que ninguna empresa pueda tener más del 14% de la demanda interna.

El reclamo de los productores de biocombustibles

Tras conocerse el contenido de la Ley Ómnibus desde la Cámara Santafesina de Energías Renovables (Casfer), habían advertido que se avanzaba en la eliminación de la protección impositiva que rige sobre el sector.

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Eduardo Rodríguez Chirillo adelantoa demás que se duplicará el corte mínimo obligatorio para el año 2026.

Puntualizaron además que la desregulación del mercado apunta a que las petroleras y mezcladores puedan producir su propio combustible, algo que, advirtieron dejará en pocas manos el negocio de la energía en el país.

“Es una ley que realmente firma la desaparición de las pymes del biodiesel, no solo de Santa Fe, sino de la Argentina”, aseguró Marcelo Kusznierz, integrante de Casfer.

El proyecto de ley planteaba la modificación de ocho artículos de la ley 27.640, donde se establece el marco regulatorio para la elaboración, almacenaje, comercialización y mezcla de biocombustibles y deroga otros diez artículos.

Desde el sector señalaron que estas modificaciones provocarían “un colapso” de las pymes dedicadas a los biocombustibles en la Argentina.

Según explicó Kusznierz, la iniciativa “libera el mercado de biodiésel” habilitando la importación del producto, libera el precio y elimina el porcentaje fijado para la protección del corte mínimo obligatorio; y habilita tanto a las grandes petroleras como a las mezcladoras a producir su propio combustible”.

Y agregó: “A su vez, la medida elimina la protección impositiva que rige sobre el biodiesel y el bioetanol respecto al Impuesto a los Combustibles Líquidos (ICL) y el Impuesto al Dióxido de Carbono (ICO2)”.

“Con esas medidas se le estaría dando a las compañías petroleras el negocio completo de la energía en la Argentina”, advirtió el empresario.

“Lo que se hace es liberar las fuerzas del mercado sobre las pymes de la provincia de Santa Fe, y de la Argentina en general, dejando en manos de los grandes grupos concentrados, como son las aceiteras y las petroleras, tanto la producción como la compra y la venta”, agregó Kusznierz.

En la provincia de Santa Fe hay diez plantas elaboradoras de biocombustibles, la mayoría de ellas instaladas en comunidades pequeñas que motorizan las economías regionales. “Por eso nosotros hablamos del arraigo rural que traen estas plantas, que están lejos de los puertos. Eso es importante porque generan todo un movimiento económico. El sector pyme del biodiésel de Santa Fe le da trabajo y sustento a unas 2.500 familias”, explicó el empresario.

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