Se trata de la sexta prórroga desde su vencimiento, el año pasado. Las provincias de Neuquén y Río Negro esperarán a que la medida se oficialice para definir los pasos a seguir.

El Gobierno nacional prorrogará por un año más los contratos de concesión de represas del Comahue, ubicadas en Neuquén y Río Negro, a tan solo seis días del vencimiento previsto, según informaron fuentes de la Secretaría de Energía de la Nación.

Sin embargo, en las provincias donde se ubican algunas de las centrales hidroeléctricas más importantes del pais aún no han recibido la confirmación oficial de esta nueva prórroga. Ambas reclaman participar en las decisiones que hacen al futuro de las represas, hasta ahora sin mucho eco en Nación.

Esta será la sexta extensión de los contratos firmados en los 90 y vencidos en 2023 y prorrogados primero por el gobierno anterior y a partir de diciembre, por la la administración de Javier Milei hasta ahora por plazos de 60 días.

El Gobierno neuquino envió recientemente una nota al Secretario de Energía de la Nación, Eduardo Rodríguez Chirillo, solicitando que, ante la falta de acción y la incertidumbre, se transfiera el control de los complejos a la provincia.

Las concesiones de El Chocón y Arroyito (operadas por la italiana Enel), del complejo Cerros Colorados (a cargo de la empresa nacional Aconcagua Energía) y de Alicurá (administrada por la norteamericana AES) vencerán el 11 de agosto.

Además, la concesión de 30 años más un año de prórroga de Piedra del Águila, gestionada por la empresa argentina Central Puerto, finalizará el 29 de diciembre.

En este contexto, el Gobierno neuquino envió recientemente una nota al Secretario de Energía de la Nación, Eduardo Rodríguez Chirillo, solicitando que, ante la falta de acción y la incertidumbre, se transfiera el control de los complejos a la provincia.

La misiva, remitida por el ministro de Infraestructura de Neuquén, Rubén Etcheverry, exigió que antes de tomar cualquier decisión sobre el futuro de las represas hidroeléctricas, se transfiera su gestión a las provincias, incluyendo a Río Negro, donde están ubicadas sobre el río Limay.

Según informó Clarín, la prórroga se oficializará en breve en el Boletín Oficial.

Neuquén y Río Negro exigen ser parte de las decisiones

Las provincias quieren formar parte de la negociación, ya que son las legítimas dueñas del agua de los rios Limay y Neuquén, ya que la última reforma de la Constitución Nacional, en 1994, federalizó los recursos naturales.

Sin embargo, la administración central cuestiona el punto porque eso fue después de la privatización de las represas hidroeléctricas que construyó el estado Nacional.

En el contexto de la discusión sobre el futuro de las represas del Comahue, diputados nacionales de Neuquén y Río Negro presentaron el 22 de julio un proyecto de resolución solicitando al Gobierno nacional que convoque a las provincias para implementar una tarifa eléctrica diferencial por la energía generada en las centrales hidroeléctricas de los ríos Neuquén y Limay.

Represas del Comahue, centrales hidroeléctricas
Enarsa se encargará de la operación de las represas hidroeléctricas «transitoriamente» ante la proximidad del vencimiento de las concesiones.

Esta acción se alinea con la reciente aprobación en las dos legislaturas de la implementación de un canon por el uso de estos recursos hídricos.

El proyecto de los diputados nacionales busca que la región obtenga un valor diferencial en términos energéticos, argumentando que, siendo una zona productora de energía a partir de recursos naturales propios de ambas provincias, merece un trato especial.

El proyecto subraya que las provincias tienen el derecho de participar en las decisiones sobre el uso y aprovechamiento de sus recursos naturales, por lo que elevan esta solicitud al gobierno central.

Las represas del Comahue, en tiempo de descuento

El Gobierno tomó una decisión hace más de un mes respecto al futuro manejo de las represas del Comahue, al crear cuatro sociedades anónimas con capital perteneciente a dos organismos nacionales y excluyendo a las provincias de Neuquén y Río Negro, que reclaman participación en las decisiones.

Las compañías que por ahora están en poder del Estado tienen el propósito de explotar y vender la energía generada en las centrales hidroeléctricas ubicadas sobre los ríos Limay y Neuquén, recursos naturales sobre los que los gobernadores intentan hacer valer los derechos provinciales consagrados en la Constitución, hasta ahora sin éxito.

En el Boletín Oficial de la Nación se publicó, el 24 de junio, la conformación de cuatro sociedades anónimas que llevan el nombre de los complejos: El Chocón, Alicurá, Piedra del Águila y Cerros Colorados.

El propósito principal de estas nuevas entidades es la producción y comercialización de energía eléctrica a través de los complejos hidroeléctricos ubicados en los ríos Neuquén y Limay.

Además, se dedicarán a la planificación, desarrollo, ejecución, operación y mantenimiento de obras y elementos complementarios necesarios para la generación de energía hidroeléctrica.

“Hace 30 años que sabemos que se iban a vencer y no tenemos un camino por parte del Estado Nacional para saber qué van a hacer con esas concesiones,” había dicho Etcheverry en esa oportunidad.

“Sorpresivamente sale la creación de cuatro empresas con los nombres de las represas,” indicó el ministro neuquino y remarcó que tanto ENARSA como Nucleoeléctrica Argentina “no tienen ninguna capacidad, ningún historial, ni antecedentes para manejar represas hidroeléctricas”.

«Esto no hace más que empeorar la situación y generar más incertidumbre con estas cuatro resoluciones, que lo único que hacen es crear cuatro empresas sin decir para qué”, agregó.

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