Marcelo Orrego ocupará por un año un cargo que será rotativo entre los mandatarios del espacio que también integran Mendoza, Catamarca, Salta y Jujuy. Destacó que en su provincia se lograron acuerdos duraderos con los pobladores en zonas de yacimientos y que el mejor camino para explotarlos es el consenso.
El gobernador de San Juan, Marcelo Orrego, fue elegido como el primer presidente de la Mesa del Cobre, un espacio que reúne a cinco provincias mineras con la meta de impulsar su desarrollo y fortalecer las políticas relacionadas con este sector estratégico.
La elección tuvo lugar en la Cumbre de Minería celebrada en Mendoza, que contó también con la participación del anfitrión Alfredo Cornejo y los gobernadores Raúl Jalil (Catamarca), Gustavo Sáenz (Salta) y Carlos Sadir (Jujuy).
«Hay una madurez política en Argentina. Cuando empezamos la Mesa del Litio, fue un buen inicio. Hoy avanzar con la Mesa del Cobre es muy importante, sobre todo para el sector minero”, dijo el gobernador de Catamarca, Raúl Jalil.
Orrego liderará la Mesa del Cobre durante un año, tras lo cual la presidencia será rotativa entre los mandatarios de las provincias integrantes. Este ámbito busca potenciar a Argentina como una de las principales reservas mundiales de cobre, un recurso clave para la transición energética global.
Durante el evento, Orrego destacó: «Es un honor acompañarlos hoy en esta 1ª Cumbre de Minería que reafirma el compromiso de nuestras provincias y nuestro país con una minería moderna, sostenible y responsable. San Juan es, indiscutiblemente, una provincia minera por historia y por presente».
Además, resaltó la relevancia de la minería para su provincia: «El 75% de nuestras exportaciones provienen de esta actividad. Contamos con minas emblemáticas como Veladero, la más grande de Argentina, y proyectos avanzados como Hualilán, que iniciará su construcción en 2025″.
El potencial de la minería en San Juan
Entre los avances destacados en su gestión respecto al sector minero, Orrego mencionó la evaluación de 34 informes de impacto ambiental relacionados con prospección y exploración, incluyendo la aprobación de la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) para el proyecto Hualilán, que marca el primer proyecto aurífero aprobado en San Juan en 17 años.
Orrego subrayó el enfoque estratégico de la provincia: «San Juan entiende la minería como una política de Estado, construyendo una industria robusta que respete los recursos naturales, prioriza el cuidado del agua y genera empleo”.
Asimismo, valoró alianzas internacionales clave como la reciente entre BHP y Lundin, que involucran proyectos como Josemaría y Filo del Sol, ubicando a la provincia «dentro del Top 10 global” del sector.
“La confianza de las comunidades es esencial. La confianza se gana en gramos, pero se pierde en kilos y en San Juan hemos demostrado que es posible lograr consensos duraderos. La minería no es solo el presente, sino el futuro de nuestras provincias y de un país que apuesta por un desarrollo sostenible”, finalizó.
Desafíos de las provincias del cobre
Durante la Cumbre de Minería en Mendoza, los gobernadores participantes destacaron los retos y oportunidades del sector minero, enfatizando la necesidad de consenso y sostenibilidad.
Alfredo Cornejo señaló que el desarrollo de la minería requerirá «un camino de convivencia y consenso” para superar los desafíos planteados.
Por su parte, Gustavo Sáenz destacó la relevancia estratégica de los recursos nacionales: «El desafío más grande que tenemos es que hoy el mundo demanda lo que nosotros tenemos para darles. En este caso, la oportunidad es hoy. Hay que lograr mantener durante el tiempo la sustentabilidad y la licencia social en minería”.
Raúl Jalil subrayó la importancia de los avances colectivos en el sector: «Hay una madurez política en Argentina. Cuando empezamos la Mesa del Litio, fue un buen inicio. Hoy avanzar con la Mesa del Cobre es muy importante, sobre todo para el sector minero”.
Mientras tanto, Carlos Sadir resaltó la necesidad de agilizar procesos y atraer inversiones: «Los desafíos que tenemos son comunes. Ahora trabajamos en cómo acortar procesos, no solo con el estudio del impacto ambiental. Pero también tenemos que buscar nuevos y más inversores para que sigan explorando”.
La fuerza del cobre
La demanda de energía a nivel global podría duplicarse para 2050, según proyecciones de la consultora Wood Mackenzie, en un escenario marcado por la transición hacia energías renovables y el abandono progresivo de los combustibles fósiles y la generación térmica tradicional.
Este cambio estructural sitúa al cobre como un recurso clave, ya que su papel en la electrificación es insustituible.
En la actualidad, cerca del 90% del consumo mundial de cobre está directamente relacionado con su capacidad como conductor eléctrico, una propiedad esencial en sistemas de generación, distribución y consumo de energía.
Según el informe, se espera que la demanda de cobre también se duplique para mediados de siglo, con un crecimiento promedio anual cercano al 2%.
El cobre será demandado por diversos sectores, entre ellos la construcción, el transporte, las redes eléctricas, la maquinaria industrial y los electrodomésticos, entre otros.
Esta amplia base de aplicaciones representa un sólido soporte para el crecimiento sostenido de su consumo, lo que genera una necesidad urgente de desarrollar nuevos proyectos mineros que garanticen el suministro futuro.
En un horizonte de una década, se estima que serían necesarias unas 5 millones de toneladas adicionales de cobre para satisfacer la demanda proyectada.
Sin embargo, en un escenario de cero emisiones netas, esta cifra podría aumentar significativamente, alcanzando entre 9 y 10 millones de toneladas.