Se trata de la primera vez que la low cost suma a su flota un modelo distinto al habitual Boeing 737-800. La novedad se da luego de que la compañía atravesó dos meses con problemas y fue advertida por la ANAC, aunque por ahora sin sanciones.
Flybondi, la aerolínea de bajo costo argentina, ampliará su flota con la incorporación de dos Airbus A320, modelos distintos a los habituales Boeing 737-800 que utiliza la compañía. Estas aeronaves, con capacidad para 180 pasajeros, se suman a otras dos incorporadas la semana pasada, llevando el total de su flota a 19 aviones.
Esta expansión busca mejorar la operatividad de Flybondi tras los inconvenientes operacionales sufridos en la segunda parte del año, que incluyeron cancelaciones y demoras, en gran parte debido a problemas de financiamiento relacionados con las restricciones cambiarias, según las explicaciones de la compañía.
A pesar de las notificaciones de infracción, la ANAC aún no le ha impuesto sanciones a la lowcost Flybondi por los problemas en varios vuelos en los últimos meses.
Las nuevas incorporaciones permitirán a la aerolínea afrontar la demanda de la temporada de verano y reducir los problemas operativos que afectaron a los pasajeros.
Las aeronaves, con matrícula lituana, serán operados bajo la modalidad ACMI (Aircraft, Crew, Maintenance, and Insurance) gracias a un acuerdo con Avion Express, una compañía de leasing aeronáutico del grupo Avia Solutions.
El convenio se beneficia de la reforma reciente al Código Aeronáutico argentino, que facilita el uso de aeronaves extranjeras y la contratación de personal foráneo en operaciones locales.
Con estos refuerzos, la low cost planea aumentar las frecuencias de sus vuelos nacionales e internacionales, especialmente hacia Brasil, y explorar nuevos destinos.
Mauricio Sana, CEO de la aerolínea, destacó que este crecimiento permitirá ofrecer una propuesta más competitiva y fortalecer la conectividad durante el verano.
En esa línea, el directivo subrayó el compromiso con el desarrollo económico y turístico de Argentina, destacando su rol como la aerolínea privada más grande del país.
“Estamos evaluando también sumar nuevos destinos para el corto y mediano plazo. El compromiso de Flybondi con Argentina es sólido y sostenible: hoy somos la aerolínea argentina privada más grande del país y queremos potenciar el desarrollo productivo, la generación de empleo y el impulso del turismo”, apuntó Sana.
Flybondi informa que ya transportó a más de 13.000.000 de personas desde que empezó a operar en 2018, y resalta que el 20% de sus pasajeros son personas que viajaron en avión por primera vez en su vida, lo cual demostraría la «democratización» del acceso a ese medio de transporte a partir de las tarifas de bajo costo.
Los cuestionamientos a Flybondi
La aerolínea también se enfoca en mejorar la calidad del servicio y la fiabilidad operativa, tras recibir críticas por las cancelaciones de vuelos y las demoras. Hace unas semanas, la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) notificó a Flybondi en varias ocasiones debido a estas irregularidades.
Uno de los incidentes más críticos ocurrió en Puerto Madryn en octubre, y generó un fuerte malestar entre los operadores turísticos locales, e incluso cruces con la compañía.
A pesar de las notificaciones de infracción, la ANAC aún no ha impuesto sanciones, aunque el proceso podría derivar en medidas más severas si no se resuelven adecuadamente los problemas.
La fiscalización de la ANAC busca garantizar que las aerolíneas ofrezcan servicios competentes y respeten los derechos de los pasajeros, lo que aumenta la presión sobre Flybondi para mejorar sus estándares operativos.
La ampliación de la flota es, en este contexto, una estrategia clave para fortalecer la capacidad operativa de la aerolínea, reducir cancelaciones y asegurar una experiencia más predecible y eficiente para los viajeros. Con esta inversión, Flybondi aspira a consolidar su posición en el mercado argentino y mejorar su fiabilidad.